Qué significa ser “partidario” del ISIS
El grupo yihadista alaba el ataque de San Bernardino y califica de "mártires" a sus autores
óscar gutiérrez
Madrid, El País
El boletín de la radio Al Bayan, brazo mediático del Estado Islámico (ISIS, en sus siglas en inglés), se refería ayer en dos ocasiones al ataque de Tashfeen Malik y Syed Farook en San Bernardino (California). En las dos --dos párrafos escuetos si se transcribe su contenido--, el locutor del ISIS denomina a los atacantes “seguidores”, ensalza su “martirio” y alaba la muerte de las 14 personas en el atentado. No se trata, por tanto, de una reivindicación del ataque, sino más bien del aprovechamiento de informaciones sobre el apoyo que Malik, la mujer paquistaní, había dado al grupo yihadista en las redes sociales.
Como la mujer paquistaní hay cientos si no miles de personas que de un modo u otro expresan su “apoyo” al ISIS, la organización yihadista con mayor ritmo de crecimiento gracias a una propaganda engrasada en las redes y un territorio aún bajo su poder en suelo sirio e iraquí. También hay grupos armados que manifiestan su lealtad. Pero sin la aceptación del califa Abubaker al Bagdadi no se puede hablar de adhesión a la organización.
Si el ISIS está detrás de un atentado y asume la autoría, como por ejemplo en el caso de los atentados de noviembre en Beirut, así lo expresa --normalmente con detalle-- a través de Al Bayan o su agencia informativa Amaq con apelativos para los perpetradores como “soldados” o “leones” del califato. Malik y Farook responden a eso que los expertos en yihadismo llaman terroristas “inspirados” por el ISIS, sin pertenencia a célula alguna ni vínculos operativos --a diferencia de la naturaleza organizativa del ataque en París el 13 de noviembre.
Esto es, Malik y Farook, según los datos facilitados hasta el momento por la investigación, su modo operandis y la reacción del ISIS, son lobos solitarios radicalizados al estilo del australiano Man Haron Monis, que asaltó un café de Sidney el pasado 15 de diciembre. Los dos atacantes de San Bernardino, él estadounidense y ella paquistaní, siguieron además el patrón habitual de radicalización y matrimonio tras conocerse en Internet y casarse en Arabia Saudí.
No obstante, EE UU es tanto objetivo de los terroristas simpatizantes o inspirados por el ISIS, como expresó el portavoz del grupo, Abu Mohamed al Adnani a finales del verano de 2014, como de sus células operativas, centradas en atentar contra los países que participan en la coalición formada en su contra.
óscar gutiérrez
Madrid, El País
El boletín de la radio Al Bayan, brazo mediático del Estado Islámico (ISIS, en sus siglas en inglés), se refería ayer en dos ocasiones al ataque de Tashfeen Malik y Syed Farook en San Bernardino (California). En las dos --dos párrafos escuetos si se transcribe su contenido--, el locutor del ISIS denomina a los atacantes “seguidores”, ensalza su “martirio” y alaba la muerte de las 14 personas en el atentado. No se trata, por tanto, de una reivindicación del ataque, sino más bien del aprovechamiento de informaciones sobre el apoyo que Malik, la mujer paquistaní, había dado al grupo yihadista en las redes sociales.
Como la mujer paquistaní hay cientos si no miles de personas que de un modo u otro expresan su “apoyo” al ISIS, la organización yihadista con mayor ritmo de crecimiento gracias a una propaganda engrasada en las redes y un territorio aún bajo su poder en suelo sirio e iraquí. También hay grupos armados que manifiestan su lealtad. Pero sin la aceptación del califa Abubaker al Bagdadi no se puede hablar de adhesión a la organización.
Si el ISIS está detrás de un atentado y asume la autoría, como por ejemplo en el caso de los atentados de noviembre en Beirut, así lo expresa --normalmente con detalle-- a través de Al Bayan o su agencia informativa Amaq con apelativos para los perpetradores como “soldados” o “leones” del califato. Malik y Farook responden a eso que los expertos en yihadismo llaman terroristas “inspirados” por el ISIS, sin pertenencia a célula alguna ni vínculos operativos --a diferencia de la naturaleza organizativa del ataque en París el 13 de noviembre.
Esto es, Malik y Farook, según los datos facilitados hasta el momento por la investigación, su modo operandis y la reacción del ISIS, son lobos solitarios radicalizados al estilo del australiano Man Haron Monis, que asaltó un café de Sidney el pasado 15 de diciembre. Los dos atacantes de San Bernardino, él estadounidense y ella paquistaní, siguieron además el patrón habitual de radicalización y matrimonio tras conocerse en Internet y casarse en Arabia Saudí.
No obstante, EE UU es tanto objetivo de los terroristas simpatizantes o inspirados por el ISIS, como expresó el portavoz del grupo, Abu Mohamed al Adnani a finales del verano de 2014, como de sus células operativas, centradas en atentar contra los países que participan en la coalición formada en su contra.