Messi no arranca: un gol cada 156’; el curso pasado, cada 77’
Más allá de la lesión que sufrió el 26 de septiembre en el partido ante Las Palmas y que le tuve dos meses menos cinco días de baja, los números esta temporada no juegan a favor de Lionel Messi, que sólo ha marcado cuatro goles en nueve partidos de Liga. Eso significa estar lejísimos de la media de la temporada pasada cuando marcó 43 en 38 partidos. Messi ha hecho goles esta temporada al Atlético de Madrid (el decisivo 1-2), dos al Levante y a la Real Sociedad la semana pasada a última hora después de que sus compañeros, especialmente Neymar, le buscaran casi obsesivamente. En total, cuatro goles en 614 minutos, a gol cada 156’. La temporada pasada sus números fueron un escándalo: 43 goles en 3.374 minutos. El argentino lo jugó todo menos 45 minutos en Anoeta, cuando se desató la tormenta que acabó en catarsus y triplete. A estas alturas la temporada pasada, además, había marcado 13 goles en 14 partidos a un gol cada 97 minutos.
Es una temporada extraña para Messi, que llegó corto de vacaciones después de hacer el Triplete y llegar a la final de la Copa América con Argentina. Empezó bien la temporada, con dos goles en la Supercopa de Europa ante el Sevilla como prolongando el estado de gracia con el que había terminado la temporada anterior. Pero luego Messi fue midiendo los tiempos y hasta fue suplente en el Calderón, donde salió para hacer el 1.2 con un toque sutil con la pierna izquierda. Es extraño verlo en el banquillo, pero este curso se lo ha tomado mejor cuando le ha tocado. “Existía riesgo de lesión”, admitió aquel día Luis Enrique.
La lesión de Messi, una rotura en el ligamento lateral de su rodilla izquierda, ha cambiado los tiempos de la temporada del argentino, que lleva unos números impropios de él en este primer tercio de la temporada. Luis Enrique lo justifica: “Lo vi muy bien, en la línea de todo el equipo, acercándose al nivel de Leo Messi en el proceso lógico de su recuperación”. Alrededor de Messi se intenta relativizar este bajón de números. Primero, por su estado físico, aún no excelente. Y luego, por cierto cambio en su estilo de juego. Con Neymar y Suárez desatados, ha dado un paso atrás para asistir. Pero tampoco en eso mejora sus números del año pasado: lleva dos asistencias. El año pasado, 21. Messi, que espera alcanzar su nivel óptimo en el Mundial de Clubes, que mira con especial atención por la posible final ante River, puede destruir los datos en cualquier instante pero es un hecho que sus números son menos brillantes que otros años.
