Eder Balanta, de jugar en el Barcelona a jugar contra el Barcelona
El colombiano apareció un día en los medios catalanes como refuerzo culé para el Tata Martino. Finalmente se frustró, aunque el colombiano padeció todo
Eran las ocho de la mañana, recién se había levantado WhatsApp. A todos los desmentía. Eder Álvarez Balanta vivía en Buenos Aires, pero dos diarios españoles, Mundo Deportivo y Sport, lo tenían en la portada: a él y a Nahuel Guzmán, hoy en Tigres. El Tata Martino había asumido como entrenador del FC Barcelona y ya se hablaba de los refuerzos que podía traer. Ramón Díaz enfilaba al equipo de River que iba salir campeón del fútbol argentino y el defensor era una pieza clave. Todos los amigos le preguntaban y él -lo admitía- se lo tomaba a mal.
"Mis amigos me escriben por Facebook desde Colombia y me dicen: “¿Es cierto que te vas al Barça?” Y yo les digo que no, que no me han dicho nada, que son rumores. Y ellos me dicen: “Pero están diciendo que te vas”. Y yo les digo que no y ellos me dicen que sí. Y yo ya no sé qué decirles. Porque si yo, que soy el implicado, les digo que no es cierto y ellos me siguen diciendo que lo es, se vuelve muy difícil. Por eso son difíciles los rumores y todo lo que se dice".
Balanta, un chico sencillo de Bogotá que se fue a vivir a Buenos Aires para sumarse a las inferiores de River y que pasó cuatro meses hablando apenas con un compañero, era una joya que todos querían: hasta el propio José Pekerman terminaría llevándolo al Mundial de Brasil. Era determinante, mientras Ramón Díaz manejaba el plantel. El Barcelona efectivamente lo sondeó, el entonces presidente de River, Daniel Passarella, aseguró que valía diez millones de dólares y finalmente no se concretó la operación. Desde ahí, con lesiones de por medio, todo empezó a diluírse.
Pero un día se fue y llegó Marcelo Gallardo, que decidió dejarlo de lado. El Muñeco realizó una apuesta que le salió brillante: sacó a Balanta -no le convencía su desorden posicional- y puso a Ramiro Funes Mori, con quien ganó la Copa Sudamericana y la Copa Libertadores. Hasta que Funes Mori emigró al fútbol inglés, a Everton, y Balanta recuperó la titularidad. Aunque nada fue igual y la historia terminó con Balanta, en un partido por la Sudamericana con Chapecoense, pidiendo el cambio por un mal rendimiendo. "Cuando uno está mal, es mejor que juegue un compañero", admitió, luego de que Gallardo planteara que él no lo había "cuidado".
Balanta, de las portadas de Barcelona a jugar quizás en el Mundial de Clubes contra el Barcelona, cierra una etapa de grandes éxitos de River, aunque sin estar en la misma posición. Todavía no es seguro que vaya a terminar siendo titular, aunque es el único defensor central zurdo que tiene con jerarquía.
