Denuncian “negociados” de algunos militares en Nueva Esperanza
La Paz, Erbol
Las instituciones de la población de Nueva Esperanza, en Pando, denunciaron que miembros “corruptos” de la Armada Boliviana están comprometidos en explotación ilegal de recursos naturales, contrabando e incluso narcotráfico.
“Aquellos malos miembros corruptos de la Armada Boliviana están comprometidos en todos los malos negociados con súbditos extranjeros, así como la tala indiscriminada de madera, pesca, explotación ilegal aurífera, sustracción de recursos naturales como la castaña, esto en los márgenes del río Madera y Abuná. Asimismo, contrabando de motocicletas robadas en el vecino país, narcotráfico, permitiendo todos estos delitos penados por ley a cambio de compensación económica”, dice un manifiesto público enviado a ERBOL y firmado por más de una docena de organizaciones, incluyendo la alcaldesa Margarita Jiménez.
El 6 de diciembre, brasileros en complicidad con al menos un boliviano robaron armas de un puesto militar en esta población pandina.
Alarmados por ese crimen, la alcaldesa de Nueva Esperanza llamó a una magna reunión, donde asistieron las instituciones locales y representantes de Brasil.
En ese encuentro, se denunció el vínculo de algunos “malos” miembros de la Armada con actos delincuenciales.
En ese sentido, la magna reunión pidió la “militarización” de esta zona con el Ejército, la presencia de Comando Conjunto y Umopar, sanciones a los responsables del robo de armas, la creación de una Policía Provincial, y la instancian de oficinas de Aduana y Migración.
Las instituciones de la población de Nueva Esperanza, en Pando, denunciaron que miembros “corruptos” de la Armada Boliviana están comprometidos en explotación ilegal de recursos naturales, contrabando e incluso narcotráfico.
“Aquellos malos miembros corruptos de la Armada Boliviana están comprometidos en todos los malos negociados con súbditos extranjeros, así como la tala indiscriminada de madera, pesca, explotación ilegal aurífera, sustracción de recursos naturales como la castaña, esto en los márgenes del río Madera y Abuná. Asimismo, contrabando de motocicletas robadas en el vecino país, narcotráfico, permitiendo todos estos delitos penados por ley a cambio de compensación económica”, dice un manifiesto público enviado a ERBOL y firmado por más de una docena de organizaciones, incluyendo la alcaldesa Margarita Jiménez.
El 6 de diciembre, brasileros en complicidad con al menos un boliviano robaron armas de un puesto militar en esta población pandina.
Alarmados por ese crimen, la alcaldesa de Nueva Esperanza llamó a una magna reunión, donde asistieron las instituciones locales y representantes de Brasil.
En ese encuentro, se denunció el vínculo de algunos “malos” miembros de la Armada con actos delincuenciales.
En ese sentido, la magna reunión pidió la “militarización” de esta zona con el Ejército, la presencia de Comando Conjunto y Umopar, sanciones a los responsables del robo de armas, la creación de una Policía Provincial, y la instancian de oficinas de Aduana y Migración.