ANCELOTTI: "El trabajo de un entrenador es hacer feliz al presidente"
Madrid, As
Carlo Ancelotti espera una nueva oportunidad para entrenar a uno de los mejores clubes de Europa después del año sabático que se tomó tras ver rescindido su contrato con el Real Madrid después de un año un blanco. Algo que sabía que iba a suceder desde el día en el que firmó con el equipo blanco. “La experiencia me decía que iba a ser despedido si el año anterior no ganaba un título. Yo lo sabía desde el día que firmé mi contrato con el Real Madrid”, asegura el técnico italiano a The Independent.
Ancelotti tiene la mochila llena de experiencias y títulos desde que debutará en el banquillo de la Reggiana en 1995 y no duda en reconocer quién manda en un club y hacia dónde debe enfocar su trabajo. Desde su etapa en el Milán se ha especulado con que Ancelotti se dejaba hacer las alineaciones por Berlusconi y ahora no reconoce eso pero sí confiesa que su trabajo, además de ganar, es satisfacer al presidente. “El dueño o presidente es la persona que controla el club. El trabajo del entrenador es hacerle feliz”, explica.
Aunque la clave de su éxito no es su mano izquierda con el presidente sino con el vestuario. “Pero la clave del éxito, como entrenador, es la relación con los jugadores. Grandes equipos y grandes jugadores tiene éxito cuando el ambiente es el correcto. Deben divertirse en su trabajo y sentirse libre para mostrar su talento”.
Y como ejemplo de su metodología es la buena impresión que dejó a grandes estrellas del fútbol. “Esta es mi visión. He trabajado con algunos de los jugadores más importantes como Cristiano, Ibrahimovic, Kaká y Zidane, pero ellos son los más fáciles de llevar porque son los más profesionales. Esa mentalidad ganadora es la que hace que te lo pongan más fácil. Por supuesto que a veces me enfado, pero siempre tengo una actitud calmada”.
Ahora Ancelotti espera volver a trabajar para buscar su cuarta Champions League, aunque no es algo que le quite el sueño. “Me gustaría ganar otra Champions, pero no la busco para ser el mejor. He tenido la suerte de ganar tres y puedo recordar cada momento vivido”.
Quizás la conseguida con el Real Madrid sea la más especial por la obsesión que había en Madrid. “La Décima fue muy especial ya que desde mi primer día de trabajo vi que todo el mundo hablabal de ello. Eso hizo que fuera lo más importante para los jugadores, presidente y aficionados. Para mí no fue una presión, sino más bien una motivación”.
Ancelotti también afirmó que si no entrena este año es porque no ha encontrado equipo. “Amo mi trabajo. No lo encuentro estresante y sólo me tomé el descanso porque no encontré un club después del Real Madrid. No era algo que necesitara después de dirigir al Madrid porque el estrés no es un problema para mí”.
Carlo Ancelotti espera una nueva oportunidad para entrenar a uno de los mejores clubes de Europa después del año sabático que se tomó tras ver rescindido su contrato con el Real Madrid después de un año un blanco. Algo que sabía que iba a suceder desde el día en el que firmó con el equipo blanco. “La experiencia me decía que iba a ser despedido si el año anterior no ganaba un título. Yo lo sabía desde el día que firmé mi contrato con el Real Madrid”, asegura el técnico italiano a The Independent.
Ancelotti tiene la mochila llena de experiencias y títulos desde que debutará en el banquillo de la Reggiana en 1995 y no duda en reconocer quién manda en un club y hacia dónde debe enfocar su trabajo. Desde su etapa en el Milán se ha especulado con que Ancelotti se dejaba hacer las alineaciones por Berlusconi y ahora no reconoce eso pero sí confiesa que su trabajo, además de ganar, es satisfacer al presidente. “El dueño o presidente es la persona que controla el club. El trabajo del entrenador es hacerle feliz”, explica.
Aunque la clave de su éxito no es su mano izquierda con el presidente sino con el vestuario. “Pero la clave del éxito, como entrenador, es la relación con los jugadores. Grandes equipos y grandes jugadores tiene éxito cuando el ambiente es el correcto. Deben divertirse en su trabajo y sentirse libre para mostrar su talento”.
Y como ejemplo de su metodología es la buena impresión que dejó a grandes estrellas del fútbol. “Esta es mi visión. He trabajado con algunos de los jugadores más importantes como Cristiano, Ibrahimovic, Kaká y Zidane, pero ellos son los más fáciles de llevar porque son los más profesionales. Esa mentalidad ganadora es la que hace que te lo pongan más fácil. Por supuesto que a veces me enfado, pero siempre tengo una actitud calmada”.
Ahora Ancelotti espera volver a trabajar para buscar su cuarta Champions League, aunque no es algo que le quite el sueño. “Me gustaría ganar otra Champions, pero no la busco para ser el mejor. He tenido la suerte de ganar tres y puedo recordar cada momento vivido”.
Quizás la conseguida con el Real Madrid sea la más especial por la obsesión que había en Madrid. “La Décima fue muy especial ya que desde mi primer día de trabajo vi que todo el mundo hablabal de ello. Eso hizo que fuera lo más importante para los jugadores, presidente y aficionados. Para mí no fue una presión, sino más bien una motivación”.
Ancelotti también afirmó que si no entrena este año es porque no ha encontrado equipo. “Amo mi trabajo. No lo encuentro estresante y sólo me tomé el descanso porque no encontré un club después del Real Madrid. No era algo que necesitara después de dirigir al Madrid porque el estrés no es un problema para mí”.