Tres muertos en un ataque contra una base militar de la ONU en Malí
Hombres armados han hecho estallar varios cohetes en el interior del recinto
José Naranjo
Bamako, El País
Al menos dos militares de la ONU y un contratista civil han muerto y una veintena de personas han resultado heridas este sábado de madrugada en un ataque perpetrado por un grupo de hombres armados contra la base de la misión de pacificación de Naciones Unidas en Malí (Minusma) en la ciudad de Kidal, en el norte del país. Los fallecidos son dos soldados guineanos de dicha misión y un contratista civil. Al menos cuatro proyectiles impactaron en el interior de la base durante el ataque.
Los hechos tuvieron lugar sobre las cuatro de la madrugada, según ha confirmado Olivier Salgado, portavoz de Minusma. De los veinte heridos, al menos cuatro se encuentran en estado grave y están siendo evacuados en medio de fuertes medidas de seguridad. El representante especial para Malí del secretario general de la ONU, Mongi Hamdi, ha declarado: "estos ataques no mermarán la determinación de Naciones Unidas de apoyar al pueblo maliense y el proceso de paz".
Desde su creación en 2013, la Minusma se ha convertido en una de las misiones de Naciones Unidas con más víctimas mortales, unas 60, pues es objetivo constante de los ataques de distintos grupos armados que operan en el norte de Malí, tanto yihadistas como facciones rebeldes que se disputan el territorio. Esta misión cuenta con más de 11.000 efectivos uniformados desplegados principalmente en cuatro regiones, Gao, Kidal, Tombuctú y Mopti.
La violencia se ha intensificado en los últimos meses en el norte, donde se producen constantes incidentes violentos pese a la firma de los acuerdos de paz de junio de este año. La amenaza viene tanto de bandidos que atacan a la población civil, de grupos armados que reclaman la independencia del norte de Malí, agrupados en la Coordinadora de Movimientos del Azawad, o de grupos yihadistas que hostigan tanto al Ejército maliense como a las fuerzas de paz.
Malí se encuentra en estado de emergencia desde que el viernes 20 de noviembre se produjera un ataque terrorista al hotel Radisson Blu en la capital, Bamako, en el que fallecieron 20 personas, clientes y personal del establecimiento, además de los dos terroristas. Este atentado fue asumido por dos grupos radicales, Al Morabitún, afín a Al Qaeda, y el Frente de Liberación de Macina. Este viernes se produjeron dos detenciones de sospechosos acusados de colaborar en el asalto.
Bamako, El País
Al menos dos militares de la ONU y un contratista civil han muerto y una veintena de personas han resultado heridas este sábado de madrugada en un ataque perpetrado por un grupo de hombres armados contra la base de la misión de pacificación de Naciones Unidas en Malí (Minusma) en la ciudad de Kidal, en el norte del país. Los fallecidos son dos soldados guineanos de dicha misión y un contratista civil. Al menos cuatro proyectiles impactaron en el interior de la base durante el ataque.
Los hechos tuvieron lugar sobre las cuatro de la madrugada, según ha confirmado Olivier Salgado, portavoz de Minusma. De los veinte heridos, al menos cuatro se encuentran en estado grave y están siendo evacuados en medio de fuertes medidas de seguridad. El representante especial para Malí del secretario general de la ONU, Mongi Hamdi, ha declarado: "estos ataques no mermarán la determinación de Naciones Unidas de apoyar al pueblo maliense y el proceso de paz".
Desde su creación en 2013, la Minusma se ha convertido en una de las misiones de Naciones Unidas con más víctimas mortales, unas 60, pues es objetivo constante de los ataques de distintos grupos armados que operan en el norte de Malí, tanto yihadistas como facciones rebeldes que se disputan el territorio. Esta misión cuenta con más de 11.000 efectivos uniformados desplegados principalmente en cuatro regiones, Gao, Kidal, Tombuctú y Mopti.
La violencia se ha intensificado en los últimos meses en el norte, donde se producen constantes incidentes violentos pese a la firma de los acuerdos de paz de junio de este año. La amenaza viene tanto de bandidos que atacan a la población civil, de grupos armados que reclaman la independencia del norte de Malí, agrupados en la Coordinadora de Movimientos del Azawad, o de grupos yihadistas que hostigan tanto al Ejército maliense como a las fuerzas de paz.
Malí se encuentra en estado de emergencia desde que el viernes 20 de noviembre se produjera un ataque terrorista al hotel Radisson Blu en la capital, Bamako, en el que fallecieron 20 personas, clientes y personal del establecimiento, además de los dos terroristas. Este atentado fue asumido por dos grupos radicales, Al Morabitún, afín a Al Qaeda, y el Frente de Liberación de Macina. Este viernes se produjeron dos detenciones de sospechosos acusados de colaborar en el asalto.
