Muere un palestino en una redada israelí en un hospital
Ramala, AP
Los palestinos expresaron su enojo cuando el jueves surgió un video que mostraba a tropas israelíes disfrazadas con vestimentas árabes tradicionales, incluida una que se hizo pasar por una mujer embarazada y otros con barbas falsas, e irrumpieron a un hospital en Cisjordania durante la noche matando a un hombre palestino durante una redada.
La redada la noche del miércoles se llevó a cabo en Hebrón, una ciudad inestable en el sur de Cisjordania que con frecuencia ha sido centro de violencia durante el conflicto entre israelíes y palestinos.
Durante la noche entraron al hospital más de 20 efectivos israelíes disfrazados, informó Yihad Shawar, director del hospital de Al-Ahli. Fueron hasta la unidad quirúrgica, donde sacaron sus armas y asaltaron una sala donde se estaba atendiendo a Azzam Shalaldé por heridas de bala, señaló.
Los soldados esposaron a Shalaldé y a un hermano que estaba en la sala, y después dispararon y mataron a otro hermano, Abdalá, de 27 años, cuando salió de un baño, dijo Shawar.
"Esto es un crimen claro. Nadie debería transgredir los hospitales, pero Israel lo hizo", dijo Shawar.
Osama Najjar, vocero del Ministerio de Salud palestino, catalogó el incidente de "asesinato".
El ejército israelí dijo que sus tropas habían entrado en el centro para detener a un sospechoso de apuñalamiento. Durante la detención, el sospechoso en el hospital atacó a las tropas, dijo el ejército sin proporcionar más detalles.
Sin embargo, el hospital le proporcionó a The Associated Press un video de la cámara de seguridad que muestra cómo una docena de hombres caminan por un pasillo del hospital empujando a alguien cubierto con una cobija en una silla de ruedas. La persona en la silla de ruedas se quita la cobija, se para y, con los otros hombres, desenfunda una pistola y sigue avanzando.
A los hombres se les unen lo que parecen ser dos mujeres, una con un niqab, una prenda que cubre su cara y rostro, y la otra parece estar embarazada.
Minutos después, los hombres con pañuelos palestinos tradicionales y otros que traen lo que parecen ser barbas y bigotes falsos, empujan al hombre en silla de ruedas, aparentemente arrestan al sospechoso Shalaldé, salen otra vez por el pasillo mientras las enfermeras observan perplejas.
Después el ejército afirmó que Shalaldé había herido gravemente a un hombre israelí cuando lo apuñaló en el pecho hacía un mes en Cisjordania. "Durante su escape, la víctima le disparó e hirió al agresor", dijo el ejército. Agregó que Shalaldé tiene unos 20 años y procede de una familia de "conocidos operativos de Hamas".
El incidente del jueves se produce en medio de una ola de violencia entre israelíes y palestinos que no da signos de remitir. Doce israelíes han muerto en una serie de ataques de palestinos, mientras que 78 palestinos han muerto, 50 de ellos considerados como agresores por Israel y el resto en enfrentamientos con tropas israelíes.
La violencia estalló en Jerusalén por las tensiones en torno a un lugar de culto venerado por judíos y musulmanes, y pronto se extendió a Israel, Cisjordania y la Franja de Gaza.
Los palestinos expresaron su enojo cuando el jueves surgió un video que mostraba a tropas israelíes disfrazadas con vestimentas árabes tradicionales, incluida una que se hizo pasar por una mujer embarazada y otros con barbas falsas, e irrumpieron a un hospital en Cisjordania durante la noche matando a un hombre palestino durante una redada.
La redada la noche del miércoles se llevó a cabo en Hebrón, una ciudad inestable en el sur de Cisjordania que con frecuencia ha sido centro de violencia durante el conflicto entre israelíes y palestinos.
Durante la noche entraron al hospital más de 20 efectivos israelíes disfrazados, informó Yihad Shawar, director del hospital de Al-Ahli. Fueron hasta la unidad quirúrgica, donde sacaron sus armas y asaltaron una sala donde se estaba atendiendo a Azzam Shalaldé por heridas de bala, señaló.
Los soldados esposaron a Shalaldé y a un hermano que estaba en la sala, y después dispararon y mataron a otro hermano, Abdalá, de 27 años, cuando salió de un baño, dijo Shawar.
"Esto es un crimen claro. Nadie debería transgredir los hospitales, pero Israel lo hizo", dijo Shawar.
Osama Najjar, vocero del Ministerio de Salud palestino, catalogó el incidente de "asesinato".
El ejército israelí dijo que sus tropas habían entrado en el centro para detener a un sospechoso de apuñalamiento. Durante la detención, el sospechoso en el hospital atacó a las tropas, dijo el ejército sin proporcionar más detalles.
Sin embargo, el hospital le proporcionó a The Associated Press un video de la cámara de seguridad que muestra cómo una docena de hombres caminan por un pasillo del hospital empujando a alguien cubierto con una cobija en una silla de ruedas. La persona en la silla de ruedas se quita la cobija, se para y, con los otros hombres, desenfunda una pistola y sigue avanzando.
A los hombres se les unen lo que parecen ser dos mujeres, una con un niqab, una prenda que cubre su cara y rostro, y la otra parece estar embarazada.
Minutos después, los hombres con pañuelos palestinos tradicionales y otros que traen lo que parecen ser barbas y bigotes falsos, empujan al hombre en silla de ruedas, aparentemente arrestan al sospechoso Shalaldé, salen otra vez por el pasillo mientras las enfermeras observan perplejas.
Después el ejército afirmó que Shalaldé había herido gravemente a un hombre israelí cuando lo apuñaló en el pecho hacía un mes en Cisjordania. "Durante su escape, la víctima le disparó e hirió al agresor", dijo el ejército. Agregó que Shalaldé tiene unos 20 años y procede de una familia de "conocidos operativos de Hamas".
El incidente del jueves se produce en medio de una ola de violencia entre israelíes y palestinos que no da signos de remitir. Doce israelíes han muerto en una serie de ataques de palestinos, mientras que 78 palestinos han muerto, 50 de ellos considerados como agresores por Israel y el resto en enfrentamientos con tropas israelíes.
La violencia estalló en Jerusalén por las tensiones en torno a un lugar de culto venerado por judíos y musulmanes, y pronto se extendió a Israel, Cisjordania y la Franja de Gaza.