Atentados de Estado Islámico contra "Francia cruzada" también dejan varios musulmanes muertos
París, Reuters
Los ataques de la semana pasada en París dejaron al menos 129 muertos, entre los que había dos hermanas que estaban en una celebración de cumpleaños, un arquitecto con una carrera promisoria, un músico muy talentoso y una mujer que recibió un disparo cuando estaba haciendo compras.
Lo que todos tenían en común es que eran musulmanes que murieron en la matanza indiscriminada perpetrada por el Estado Islámico. La mayor parte de las víctimas del EI y otros grupos yihadistas lo son, ya que los insurgentes luchan en países de mayoría musulmana y usualmente atacan a comunidades islamistas que son menos radicales y a las que consideran herejes.
Estado Islámico se adjudicó al autoría de los atentados contra la "Francia cruzada", lo que implica que todos los franceses son católicos. Pero debido a que el Islam es la segunda religión en cantidad de fieles en Europa, una masacre en ese continente seguramente dejará musulmanes muertos.
"EI ha estado matando a miles de musulmanes por años en África y Oriente Medio", dijo Yasser Louati, portavoz del Colectivo contra la Islamofobia en Francia.
"Ahora están matando musulmanes en Francia (...) La palabra 'islámico' en su nombre es solamente un pretexto para su ideología. Miren sus ataques, esto no tiene fin".
La minoría musulmana francesa, la mayor de la Unión Europea, representa a casi el 8 por ciento de la población. Y de acuerdo con la lista de fallecidos del viernes, un 6 por ciento de las víctimas fue identificado como musulmán o personas con un origen étnico en países de mayoría musulmana.
Halima y Hodda Saadi eran dos hermanas de origen tunecino que estaban celebrando el cumpleaños de un amigo en el café La Belle Equipe. Ellas, que estaban sentadas en la terraza, fueron parte de las 19 personas muertas en el ataque en el lugar.
Otra de las víctimas en el lugar fue Djamila Houd, una hija de inmigrantes argelinos que trabajaba en una tienda de ropa.
Amine Ibnolmobarak, de 29 años, era un arquitecto que creció en Marruecos y viajó a Francia a estudiar. "Sus padres lo enviaron a Burdeos a estudiar medicina, pero él vino a París a estudiar arquitectura y se destacó rápidamente", dijo un ex profesor en un tributo al joven muerto.
Algunos sitios web que muestran a las víctimas incluyen un video de YouTube de Kheireddine Sahbi, de 29 años, tocando música árabe. Para Barthelemy Jobert, presidente de la Universidad París-Sorbonna donde estudiaba, él era un "virtuoso violinista argelino (...) muy activo en la banda de música tradicional de la universidad".
Lassana Diarra, un futbolista francés de origen maliense que estaba jugando con la selección local en el Stade de France al momento de los ataques, anunció en su página de Facebook que su primo Asta Diakite había muerto en los atentados en París.
Diarra pidió a los franceses "permanecer unidos frente a un horror que no reconoce color o religión".
Los ataques de la semana pasada en París dejaron al menos 129 muertos, entre los que había dos hermanas que estaban en una celebración de cumpleaños, un arquitecto con una carrera promisoria, un músico muy talentoso y una mujer que recibió un disparo cuando estaba haciendo compras.
Lo que todos tenían en común es que eran musulmanes que murieron en la matanza indiscriminada perpetrada por el Estado Islámico. La mayor parte de las víctimas del EI y otros grupos yihadistas lo son, ya que los insurgentes luchan en países de mayoría musulmana y usualmente atacan a comunidades islamistas que son menos radicales y a las que consideran herejes.
Estado Islámico se adjudicó al autoría de los atentados contra la "Francia cruzada", lo que implica que todos los franceses son católicos. Pero debido a que el Islam es la segunda religión en cantidad de fieles en Europa, una masacre en ese continente seguramente dejará musulmanes muertos.
"EI ha estado matando a miles de musulmanes por años en África y Oriente Medio", dijo Yasser Louati, portavoz del Colectivo contra la Islamofobia en Francia.
"Ahora están matando musulmanes en Francia (...) La palabra 'islámico' en su nombre es solamente un pretexto para su ideología. Miren sus ataques, esto no tiene fin".
La minoría musulmana francesa, la mayor de la Unión Europea, representa a casi el 8 por ciento de la población. Y de acuerdo con la lista de fallecidos del viernes, un 6 por ciento de las víctimas fue identificado como musulmán o personas con un origen étnico en países de mayoría musulmana.
Halima y Hodda Saadi eran dos hermanas de origen tunecino que estaban celebrando el cumpleaños de un amigo en el café La Belle Equipe. Ellas, que estaban sentadas en la terraza, fueron parte de las 19 personas muertas en el ataque en el lugar.
Otra de las víctimas en el lugar fue Djamila Houd, una hija de inmigrantes argelinos que trabajaba en una tienda de ropa.
Amine Ibnolmobarak, de 29 años, era un arquitecto que creció en Marruecos y viajó a Francia a estudiar. "Sus padres lo enviaron a Burdeos a estudiar medicina, pero él vino a París a estudiar arquitectura y se destacó rápidamente", dijo un ex profesor en un tributo al joven muerto.
Algunos sitios web que muestran a las víctimas incluyen un video de YouTube de Kheireddine Sahbi, de 29 años, tocando música árabe. Para Barthelemy Jobert, presidente de la Universidad París-Sorbonna donde estudiaba, él era un "virtuoso violinista argelino (...) muy activo en la banda de música tradicional de la universidad".
Lassana Diarra, un futbolista francés de origen maliense que estaba jugando con la selección local en el Stade de France al momento de los ataques, anunció en su página de Facebook que su primo Asta Diakite había muerto en los atentados en París.
Diarra pidió a los franceses "permanecer unidos frente a un horror que no reconoce color o religión".
