Al Qaeda acusa al EI de usar el derramamiento de sangre como forma de acción: “Es un capricho”
Saná, EFE
Las facciones en la península Arábiga y en el Magreb islámico del grupo yihadista Al Qaeda acusaron hoy a la organización extremista Estado Islámico (EI) de adoptar el derramamiento de sangre como método principal de sus acciones.
En un comunicado conjunto publicado en internet y leído en un vídeo por el líder de la filial arábiga (AQPA), Ibrahim Batarfi, ambas facciones acusaron también al EI de autodesignarse como autoridad competente para expulsar de la comunidad islámica a los musulmanes con los que no comulga.
Ambos grupos añadieron que el EI utiliza este método para legitimar sus asesinatos y así vencer al resto de los grupos islamistas.
“Condenamos el método de la anatematización y el derramamiento de sangre sin justificación que ejerce el grupo de (el líder del EI, Abu Bakr) Al Bagdadi”, añadió el comunicado.
En su alocución, Batarfi señaló también que “este método se basa en una mezcla de ignorancia, desviación y capricho”.
“El califato de Al Bagdadi es para nosotros religiosamente nulo y no lo reconocemos, ni vemos que los musulmanes estén obligados a jurarle lealtad porque es una lealtad para el pecado y la agresión, y no para el bien y el miedo a Dios”, añadió.
Además, destacó que “este califato no se basó en el método del profeta Mahoma, sino que consiguió un poco de autoridad a través de la dominación, la violación, el derramamiento de la sangre y la anatematización”.
Asimismo, criticó los ataques que ha lanzado el grupo yihadista a mezquitas en las que mató “a buenos y a malos”.
“El método de la destrucción, de la división, de la provocación de discordias y de la perturbación de los esfuerzos es el método del fracasado e incapaz que conoce solo la destrucción”, destacó Batarfi, que también pidió a los seguidores del EI que abandonen este grupo.
Este comunicado contrasta con un mensaje de audio hecho público en las últimas horas y en el que el líder de Al Qaeda, Ayman al Zawahiri, llamó a la unidad de los yihadistas para luchar contra Estados Unidos y Rusia y pidió el cese de los combates entre los “muyahidín” (guerreros santos) en Siria.
“Hay que unirse, rechazar las disputas y suspender los combates entre los muyahidín”, asegura en el mensaje el líder de la organización yihadista.
La grabación, de 16 minutos de duración y cuya autenticidad no ha podido ser verificada, parece indicar un cambio de postura de Al Qaeda respecto a su rival Estado Islámico, aunque Al Zawahiri no nombra directamente a este grupo.
Al Zawahiri siempre ha descalificado al EI y a su líder Abu Bakr al Bagdadi, aunque algunas ramas de Al Qaeda, como AQPA, ya habían pedido anteriormente apoyar a este grupo yihadista en su lucha en Irak y Siria contra la coalición internacional, liderada por Estados Unidos, lo que también contrasta con el vídeo difundido hoy.
El 10 de junio de 2014, el EI, anteriormente facción de Al Qaeda en Irak, ocupó Mosul y amplias zonas del norte iraquí, y poco después, proclamó un califato en los territorios bajo su control en ese país y en la vecina Siria, donde impuso una interpretación radical de la ley islámica.
Las facciones en la península Arábiga y en el Magreb islámico del grupo yihadista Al Qaeda acusaron hoy a la organización extremista Estado Islámico (EI) de adoptar el derramamiento de sangre como método principal de sus acciones.
En un comunicado conjunto publicado en internet y leído en un vídeo por el líder de la filial arábiga (AQPA), Ibrahim Batarfi, ambas facciones acusaron también al EI de autodesignarse como autoridad competente para expulsar de la comunidad islámica a los musulmanes con los que no comulga.
Ambos grupos añadieron que el EI utiliza este método para legitimar sus asesinatos y así vencer al resto de los grupos islamistas.
“Condenamos el método de la anatematización y el derramamiento de sangre sin justificación que ejerce el grupo de (el líder del EI, Abu Bakr) Al Bagdadi”, añadió el comunicado.
En su alocución, Batarfi señaló también que “este método se basa en una mezcla de ignorancia, desviación y capricho”.
“El califato de Al Bagdadi es para nosotros religiosamente nulo y no lo reconocemos, ni vemos que los musulmanes estén obligados a jurarle lealtad porque es una lealtad para el pecado y la agresión, y no para el bien y el miedo a Dios”, añadió.
Además, destacó que “este califato no se basó en el método del profeta Mahoma, sino que consiguió un poco de autoridad a través de la dominación, la violación, el derramamiento de la sangre y la anatematización”.
Asimismo, criticó los ataques que ha lanzado el grupo yihadista a mezquitas en las que mató “a buenos y a malos”.
“El método de la destrucción, de la división, de la provocación de discordias y de la perturbación de los esfuerzos es el método del fracasado e incapaz que conoce solo la destrucción”, destacó Batarfi, que también pidió a los seguidores del EI que abandonen este grupo.
Este comunicado contrasta con un mensaje de audio hecho público en las últimas horas y en el que el líder de Al Qaeda, Ayman al Zawahiri, llamó a la unidad de los yihadistas para luchar contra Estados Unidos y Rusia y pidió el cese de los combates entre los “muyahidín” (guerreros santos) en Siria.
“Hay que unirse, rechazar las disputas y suspender los combates entre los muyahidín”, asegura en el mensaje el líder de la organización yihadista.
La grabación, de 16 minutos de duración y cuya autenticidad no ha podido ser verificada, parece indicar un cambio de postura de Al Qaeda respecto a su rival Estado Islámico, aunque Al Zawahiri no nombra directamente a este grupo.
Al Zawahiri siempre ha descalificado al EI y a su líder Abu Bakr al Bagdadi, aunque algunas ramas de Al Qaeda, como AQPA, ya habían pedido anteriormente apoyar a este grupo yihadista en su lucha en Irak y Siria contra la coalición internacional, liderada por Estados Unidos, lo que también contrasta con el vídeo difundido hoy.
El 10 de junio de 2014, el EI, anteriormente facción de Al Qaeda en Irak, ocupó Mosul y amplias zonas del norte iraquí, y poco después, proclamó un califato en los territorios bajo su control en ese país y en la vecina Siria, donde impuso una interpretación radical de la ley islámica.