Estados Unidos dice que misiles rusos cayeron accidentalmente en Irán
Rusia lo niega y asegura que todos los lanzamientos alcanzaron sus objetivos en Siria
Joan Faus
Washington, El País
Al menos cuatro misiles de crucero disparados el miércoles por Rusia desde el mar Caspio cayeron accidentalmente en Irán, según dijeron este jueves funcionarios del Gobierno de Barack Obama a medios estadounidenses. El Ministerio ruso de Defensa lo negó y reiteró que todos los 26 misiles lanzados alcanzaron sus objetivos contra posiciones rebeldes en Siria, como había anunciado el miércoles.
Los lanzamientos se hicieron desde navíos a unos 1.500 kilómetros de distancia de Siria, sobrevolando Irán e Irak. Los misiles que no habrían alcanzado su objetivo cayeron en una zona rural en Irán, según la cadena televisiva NBC. Se desconoce si su impacto pudo causar víctimas mortales.
El Pentágono y el Departamento de Estado declinaron valorar las informaciones periodísticas. Los medios públicos iraníes no hicieron ninguna reacción inmediata a esas informaciones, pero la agencia semioficial Fars consideró la información un ejemplo de propaganda de EE UU contra Rusia, según informa el diario The New York Times.
Desde que se inició la semana pasada, Washington ha criticado con dureza la ofensiva aérea rusa en Siria por considerar que legitima al régimen de Bachar el Asad y por apenas golpear posiciones del Estado Islámico (EI). EE UU lidera desde hace un año una coalición internacional que bombardea posiciones del grupo yihadista en Siria e Irak. Los extremistas del EI son enemigo común de Washington, Moscú y Damasco.
En caso de confirmarse, la caída accidental de los misiles en Irán supondría un episodio embarazoso para Rusia. Con su campaña de apoyo a El Asad, el Gobierno de Vladimír Putin busca exhibir músculo militar y erigirse como un actor clave para resolver el polvorín sirio. La guerra civil en ese país estalló hace cuatro años y ha causado al menos 250.000 muertos.
El secretario de Defensa estadounidense, Ash Carter, consideró este jueves, en la sede de la OTAN en Bruselas, “poco profesional” que Rusia no avisara con antelación del lanzamiento de misiles. El jefe del Pentágono ha declinado cooperar con Rusia en Siria, pero ha accedido a establecer un canal de comunicación para evitar incidentes entre las campañas aéreas de ambos países.
Funcionarios estadounidenses dijeron al Times que el lanzamiento de los misiles Kalibr fue el primero que hacía Rusia en operaciones reales. Y lo consideraron una decisión sorprendente dado que los grupos rebeldes sirios no tienen artefactos de defensa aérea, por lo que no es necesario evitar el uso de aviones de combate.
Joan Faus
Washington, El País
Al menos cuatro misiles de crucero disparados el miércoles por Rusia desde el mar Caspio cayeron accidentalmente en Irán, según dijeron este jueves funcionarios del Gobierno de Barack Obama a medios estadounidenses. El Ministerio ruso de Defensa lo negó y reiteró que todos los 26 misiles lanzados alcanzaron sus objetivos contra posiciones rebeldes en Siria, como había anunciado el miércoles.
Los lanzamientos se hicieron desde navíos a unos 1.500 kilómetros de distancia de Siria, sobrevolando Irán e Irak. Los misiles que no habrían alcanzado su objetivo cayeron en una zona rural en Irán, según la cadena televisiva NBC. Se desconoce si su impacto pudo causar víctimas mortales.
El Pentágono y el Departamento de Estado declinaron valorar las informaciones periodísticas. Los medios públicos iraníes no hicieron ninguna reacción inmediata a esas informaciones, pero la agencia semioficial Fars consideró la información un ejemplo de propaganda de EE UU contra Rusia, según informa el diario The New York Times.
Desde que se inició la semana pasada, Washington ha criticado con dureza la ofensiva aérea rusa en Siria por considerar que legitima al régimen de Bachar el Asad y por apenas golpear posiciones del Estado Islámico (EI). EE UU lidera desde hace un año una coalición internacional que bombardea posiciones del grupo yihadista en Siria e Irak. Los extremistas del EI son enemigo común de Washington, Moscú y Damasco.
En caso de confirmarse, la caída accidental de los misiles en Irán supondría un episodio embarazoso para Rusia. Con su campaña de apoyo a El Asad, el Gobierno de Vladimír Putin busca exhibir músculo militar y erigirse como un actor clave para resolver el polvorín sirio. La guerra civil en ese país estalló hace cuatro años y ha causado al menos 250.000 muertos.
El secretario de Defensa estadounidense, Ash Carter, consideró este jueves, en la sede de la OTAN en Bruselas, “poco profesional” que Rusia no avisara con antelación del lanzamiento de misiles. El jefe del Pentágono ha declinado cooperar con Rusia en Siria, pero ha accedido a establecer un canal de comunicación para evitar incidentes entre las campañas aéreas de ambos países.
Funcionarios estadounidenses dijeron al Times que el lanzamiento de los misiles Kalibr fue el primero que hacía Rusia en operaciones reales. Y lo consideraron una decisión sorprendente dado que los grupos rebeldes sirios no tienen artefactos de defensa aérea, por lo que no es necesario evitar el uso de aviones de combate.