Sabala, en el descuento, amarga la noche de Arda con Turquía
Turquía salió dispuesto a marcar lo antes posible. Con Arda Turan como director de la orquesta y un Sen muy activo y desequilibrante, los turcos empezaron a llegar con mucho peligro al área letona. Las ocasiones iban llegando. Sen y Turan tuvieron las dos primeras en los dos minutos iniciales. Dueños del balón y del juego, los locales se estrellaban una y otra vez con el muro letón. Y si lo pasaban, allí estaba el meta Vanins para que los turcos no se adelantases. Los letones no renunciaban a nada y cada robo se convertía en una ocasión en la portería de Babacan. Rakels era el que comandaba los ataques, siempre con mucha velocidad y movimientos rápidos. Los minutos iban pasando con una Turquía cada vez más desesperada en busca de ese gol que le dejara con vida en la clasificación. Yilmaz la tuvo en un rechace, poco después fue Sen de un potente disparo. Lo intentaban todo, entrando por las bandas y con un Arda muy enchufado, aunque se le notaba la falta de ritmo. Sin embargo, el balón no entraba y los nervios empezaban a notarse tanto en la grada como en el campo...
Tras la reanundación el guión no cambió. El seleccionador turco sacó toda la artillería con la entrada de Bulut al campo. Turquía cada vez estaba más volcada sobre la portería de un Vanins que lo paraba todo. Turan seguía ordenando y creando fútbol, pero el gol no llegaba. La desesperación se notaba en la cara de los turcos que, una y otra vez, se estrellaban con el muro letón. Yilmaz, Bulut, Calhanoglu... pero el balón no entraba. Y, en la contra, Letonia a punto estuvo de abrir el marcador. Balta, en dos ocasiones, salvó a su equipo. La primera sacando bajo palos un tiro de Karasauskas y, después, llegando al corte en un pase de la muerte. Tras el susto, Inan dio tranquilidad. El medio aprovechó su potente disparo desde fuera del área para hacer el primer tanto del partido y dejar a Turquía con vida en la clasificación para Francia. Quedaba un cuarto de hora para que el partido llegara a su punto y final y parecía que Turquía lo tenía hecho. Nada más lejos de la realidad. El seleccionador letón dio entrada a Sabala, la gran esperanza del país que a sus 20 años ya juega en el Brujas belga. Turquía se relajó y Letonia se fue a por el empate. Y, en el descuento, Sabala, de tiro desde la frontal tras un rechace, puso las tablas. Turquía se desesperó, pero tuvo una última ocasión que se fue al limbo. Letonia lo celebró como si hubiera conseguido el pase, no es para menos. Turquía se juega gran parte de sus opciones en el siguiente encuentro ante Holanda. Los turcos se aprovechan de la derrota de los holandeses ante Islandia y se quedan a sólo un punto de ellos. A siete y nuevo puntos respectivamente ya se encuentran República Checa e Islandia
