Importación de calzados, cuero y textiles de China crece en 176%
Jorge H. tiene un pequeño taller de confección en Villa Las Delicias y un puesto de venta en la calle Tumusla, pero analiza abandonar su actividad para dedicarse a la importación de textiles de China porque es más rentable traer estos insumos que fabricar ropa.
Relató que hasta hace cinco años, el 100% de las prendas y zapatos que se comercializaban en la calle Tumusla, Mariano Graneros, Murillo, la avenida Illampu y las vías cercanas a la plaza Eguino, eran producción nacional, pero que ahora se redujo a 20%, y el 80% es traído desde el país asiático. "De China llegan zapatos, chamarras, pantalones, muebles, ropa interior y todo lo que uno se puede imaginar. Quisiera dedicarme sólo a importar porque se invierte menos y se gana más, pero duele dejar lo que aprendí, dejar de confeccionar”, lamentó Jorge.
Según datos del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), los textiles, cuero y calzados importados de China son los más sensibles para la industria local. La internación de estos tres productos el año pasado tuvo un valor de 96 millones de dólares, un 176% más que en 2010.
Las estadísticas revelan que la importación de calzados sumó 53,7 millones de dólares, un 94% más que hace cinco años; la de textiles alcanzó a 29,8 millones de dólares, un 54,4% más, y de cuero llegaron a 12,5 millones de dólares, un 64% más (ver infograma).
Bolivia también adquiere de otros países esos artículos, pero, en el caso de los dos primeros, la mitad proviene del gigante asiático y hasta un 82% el cuero.
La producción en cuero
La vicepresidenta de la Asociación de Productores Artesanos en Cuero, Jheny Saavedra, contó que la fabricación de zapatos y botas en cuero se redujo en 50% y 60% debido a la competencia china.
Hace un año en su taller se producían semanalmente 150 pares, ahora sólo 60 o 70; daba empleo a ocho personas, pero actualmente trabaja con cuatro.
"Los zapatos chinos son muy baratos, pero son de cuero sintético que no dura, en cambio nosotros elaboramos en cuero. Desde hace tres años que no hacemos subir los precios, pero igual la gente no compra”, afirmó Saavedra.
La devaluación del yuan
La presidenta de la Confederación Nacional de Micro y Pequeña Empresa (Conamype), Virginia Ajhuacho, advirtió que, tras la reciente devaluación del yuan, el sector está preocupado porque puede darse una "invasión” de productos. "La importación de China es subfacturada y sus precios son un robo para el país. Todos esos productos deberían ser catalogados como ilegales porque no vienen con el precio país. Dentro de poco vamos a tener una invasión por la devaluación de su moneda”, aseguró.
La dirigente dijo que de cada 10 trabajadores de las microempresas, cuatro perdieron su fuente laboral (desde hace tres años) por la competencia de los productos asiáticos, el contrabando, los incrementos salariales y el doble aguinaldo.
En el país aún hay 500 mil personas que se dedican a la producción textil, pero cada año abandonan cerca de 120 microempresarios. Eligen el comercio, se convierten en asalariados o, en el peor de los casos, están desempleados, añadió.
El Banco Central de China debilitó en un 4,4% su moneda frente al dólar, con la finalidad de fortalecer sus exportaciones abaratando sus productos para que sean más competitivos.
Para el IBCE, esta medida es negativa para Bolivia porque habrá mayor dificultad de exportar al gigante asiático. "Estos factores encarecen los productos nacionales frente a la oferta de nuestros vecinos que sí depreciaron su moneda y se alinearon a mostrar precios más competitivos. Las importaciones desde China aumentarán su ritmo de crecimiento, mientras que las exportaciones se estancarán o tenderán a disminuir”, indicó.
El IBCE recomienda fortalecer la industria nacional, brindar mejores condiciones para operar, evitar el encarecimiento de mano de obra y, si es posible, establecer cuotas de importación de productos desde ese país.
Los productores y microempresarios piden al Gobierno que proteja la industria nacional a través de políticas que restrinjan el ingreso de productos chinos y de contrabando.
"Queremos que el Gobierno abra los ojos, que vea que la producción nacional está en crisis. Es momento de que proteja a la industria nacional y no a los demás países, porque hay un total desequilibrio”, sostuvo la presidenta del Conamype.
Otros sectores
Otros productos sensibles para la economía local, que también se importan de China, son las maderas y manufacturas, la joyería, por lo que es común observar en los mercados artículos más baratos de este tipo.
Incluso se interna al país azúcar, girasol, soya y derivados desde el gigante asiático.
El primer semestre siguieron las compras
Compras En el primer semestre del año, se importaron de China textiles por un valor de 13,1 millones de dólares, calzados por 26,3 millones, cueros y manufacturas por 5,6 millones y maderas y manufacturas por 4,8 millones de dólares.
Regiones El país adquiere productos, bienes de capital y equipos de transporte, principalmente, de Brasil, China, Estados Unidos, Argentina, Perú, Chile y otros.
Comercio Las ventas de Bolivia a China sólo representan el 23% de todo lo que se compra. El primer semestre se importaron productos por un total de 828,2 millones de dólares.
El gigante duplicó sus ventas en cuatro años
En los últimos cuatro años casi se duplicaron las importaciones desde China. En 2010 las compras alcanzaron un valor de 652,8 millones de dólares, mientras que en 2014 superaron los 1.811 millones de dólares, un 177,4% más, según las cifras del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
Bolivia compra, anualmente, al país asiático más de 4.000 productos y sólo le vende 58 .
La manufactura china está presente en todos los sectores porque no sólo se importa bienes de capital y equipos de transporte, sino también productos que la industria nacional fabrica.
Del país asiático se compran helicópteros, motocicletas, vehículos, teléfonos celulares, neumáticos, accesorios y partes para computadoras, herbicidas, insecticidas, tubos para oleoductos o gasoductos, máquinas y otros. Bolivia exporta materias primas minerales y sus concentrados (zinc, plata, estaño, plomo, oro, antimonio y wólfram), madera, cuero y pieles, pelo fino de alpaca o llama y otros.
En 2010 el precio de las exportaciones fue de 208,6 millones de dólares y en 2014 de 434 millones de dólares. Hay un aumento de 208%. A junio de 2015, el valor llegó a 220,2 millones de dólares.
