Hollande alerta de “un éxodo” si no se ayuda a países vecinos de Siria
Una conferencia reúne en París a 56 países y 11 organizaciones internacionales
Carlos Yárnoz
París, El País
Ministros y representantes de 56 países y 11 organizaciones internacionales han prometido ayuda financiera y técnica a los Estados vecinos de Siria que acogen a varios millones de refugiados que han abandonado sus hogares a causa de la guerra y las persecuciones. Los más afectados son Jordania, Líbano, Turquía e Irak, donde los refugiados se agolpan en campos e instalaciones que, en muchos casos, no reúnen condiciones adecuadas de alojamiento. En la apertura de la Conferencia Internacional sobre Víctimas de Violencias Étnicas y Religiosas en Oriente Próximo, celebrada este martes en París, el presidente François Hollande advirtió de que, o se actúa con rapidez para ayudar a esos países y a las familias acogidas, o pronto habrá no solo “tragedias”, sino “un éxodo”.
Los dirigentes reunidos -procedentes de toda Europa, Rusia, América y Oriente Próximo, salvo Siria e Irán- acordaron aportar medios para mejorar el acceso a la sanidad y la educación de los refugiados, favorecer la comunicación entre los integrantes de las familias, tratar a las víctimas de violencia sexual, reconstruir infraestructuras y servicios, desminar áreas de guerra o favorecer el regreso a las zonas de origen donde ya no haya violencia.
En el comunicado final, se apuesta por crear centros de documentación o proteger a testigos para evitar que los crímenes, incluidos los de tráfico de personas, queden impunes. Para ello, los participantes han pedido a la ONU que haga las gestiones oportunas para que la Corte Penal Internacional pueda juzgar los crímenes del Estado Islámico.
El documento de conclusiones señala que la solución al conflicto sirio debe ser “política” y deberá pasar por un “Gobierno de transición”. En esa solución política hizo hincapié el ministro jordano de Exteriores, Nasser Judeh, copresidente de la Conferencia con su homólogo francés, Laurent Fabius. Judeh aseguró ante los periodistas que estamos ante “una guerra mundial, porque incluye a todo el mundo”. Fabius añadió que hay que actuar con urgencia porque “los terroristas no esperan”. Francia aportará 25 millones de euros al programa.
Bochornoso incidente en el Quai d´Orsay al saltar una grabación del servicio de seguridad en plena conferencia de prensa
La Conferencia fue convocada en marzo pasado, pero ha coincidido con la oleada de refugiados que está conmoviendo a todo el mundo. España será la sede a comienzos del año que viene de la próxima cita.
Durante la conferencia de prensa de Fabius y Judeh en el Quai d´Orsay, se produjo un incidente bochornoso para el ministerio. Cuando Judeh iba a tomar la palabra, saltó por el sistema de sonido una grabación según la cual, y por “problemas técnicos”, había que abandonar el lugar “por la salida de emergencia”. Decenas de veces, durante cinco interminables minutos, se repitió el mensaje mientras los ministros, sobre una tarima del espectacular salón del palacio, ponían cara de circunstancias ante periodistas y miembros de las delegaciones.
París, El País
Ministros y representantes de 56 países y 11 organizaciones internacionales han prometido ayuda financiera y técnica a los Estados vecinos de Siria que acogen a varios millones de refugiados que han abandonado sus hogares a causa de la guerra y las persecuciones. Los más afectados son Jordania, Líbano, Turquía e Irak, donde los refugiados se agolpan en campos e instalaciones que, en muchos casos, no reúnen condiciones adecuadas de alojamiento. En la apertura de la Conferencia Internacional sobre Víctimas de Violencias Étnicas y Religiosas en Oriente Próximo, celebrada este martes en París, el presidente François Hollande advirtió de que, o se actúa con rapidez para ayudar a esos países y a las familias acogidas, o pronto habrá no solo “tragedias”, sino “un éxodo”.
Los dirigentes reunidos -procedentes de toda Europa, Rusia, América y Oriente Próximo, salvo Siria e Irán- acordaron aportar medios para mejorar el acceso a la sanidad y la educación de los refugiados, favorecer la comunicación entre los integrantes de las familias, tratar a las víctimas de violencia sexual, reconstruir infraestructuras y servicios, desminar áreas de guerra o favorecer el regreso a las zonas de origen donde ya no haya violencia.
En el comunicado final, se apuesta por crear centros de documentación o proteger a testigos para evitar que los crímenes, incluidos los de tráfico de personas, queden impunes. Para ello, los participantes han pedido a la ONU que haga las gestiones oportunas para que la Corte Penal Internacional pueda juzgar los crímenes del Estado Islámico.
El documento de conclusiones señala que la solución al conflicto sirio debe ser “política” y deberá pasar por un “Gobierno de transición”. En esa solución política hizo hincapié el ministro jordano de Exteriores, Nasser Judeh, copresidente de la Conferencia con su homólogo francés, Laurent Fabius. Judeh aseguró ante los periodistas que estamos ante “una guerra mundial, porque incluye a todo el mundo”. Fabius añadió que hay que actuar con urgencia porque “los terroristas no esperan”. Francia aportará 25 millones de euros al programa.
Bochornoso incidente en el Quai d´Orsay al saltar una grabación del servicio de seguridad en plena conferencia de prensa
La Conferencia fue convocada en marzo pasado, pero ha coincidido con la oleada de refugiados que está conmoviendo a todo el mundo. España será la sede a comienzos del año que viene de la próxima cita.
Durante la conferencia de prensa de Fabius y Judeh en el Quai d´Orsay, se produjo un incidente bochornoso para el ministerio. Cuando Judeh iba a tomar la palabra, saltó por el sistema de sonido una grabación según la cual, y por “problemas técnicos”, había que abandonar el lugar “por la salida de emergencia”. Decenas de veces, durante cinco interminables minutos, se repitió el mensaje mientras los ministros, sobre una tarima del espectacular salón del palacio, ponían cara de circunstancias ante periodistas y miembros de las delegaciones.
