Argentina hizo añicos a Bolivia


Juan C. Toro / La Paz
Ocurrió lo que muchos temían. Bolivia cayó estrepitosamente ante Argentina por 7-0, en el amistoso que se jugó anoche en Houston, Estados Unidos. Con ese marcador se ratificó el mal momento del fútbol nacional, el peor de su historia.


La Albiceleste, número uno del mundo, la tuvo muy fácil desde el inicio. Demostró por qué está en la cima de la clasificación y también quedó claro el por qué la Verde está en el puesto 67 del ranking FIFA.

La definición del juego comenzó temprano. A los cinco minutos Sergio Agüero tiró un pase cruzado para Ezequiel Lavezzi, quien con un remate raso venció a Daniel Vaca e inauguró el marcador y desnudó, una vez más, los problemas defensivos del equipo nacional.
De ahí en adelante el equipo que vistió de azul marcó el ritmo del partido, controló el medio terreno y cuando quiso se lanzó al ataque y creó zozobra en la portería boliviana.

A los 33’, Erik Lamela y Agüero se juntaron, destrozaron a la defensa con tres toques y el Kün anotó con un globito.

A los 40’, Wálter Veizaga cometió una falta, él y los defensores se durmieron, no los argentinos, que cobraron la falta, dejaron mal parados a la defensores y convirtieron el tercer tanto a través de Lavezzi.

Bolivia llegó a la puerta de Sergio Romero en tres oportunidades, Marcelo Martins fue quien le exigió más con un remate, luego no hubo más complicaciones para Argentina.

En el segundo tiempo los argentinos mantuvieron el ritmo y no dudaron a la hora de hacer daño. A los 59’ Agüero puso el 4-0 tras un error de Abraham Cabrera. Luego le tocó entrar a Lionel Messi, quien a los dos minutos de pisar el césped (66) puso el 5-0, le ganó en el cabezazo a Ronald Raldes.

Cinco minutos después otra vez la estrella del Barcelona dijo presente en el tanteador, luego de una gran asistencia de Agüero y puso el 6-0.

Joaquín Correa, que entró en el segundo tiempo, fue quien anotó el séptimo tanto. Fue a los 83’ con un remate de media distancia, lejos del alcance de Vaca.

En esta etapa sólo hubo un equipo en el terreno de juego, el argentino, que supo mandar y controlar el partido a su antojo, ante una Selección nacional que no tuvo rumbo.

Era un partido que el DT Julio Baldivieso no lo quería jugar, lo hizo por obligación. Queda pensar en el debut en la eliminatoria frente a Uruguay, en el partido que se jugará en La Paz a las 16:00 el próximo 8 de octubre.

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