Tres colegios de La Paz atraviesan 14 problemas para usar las computadoras Quipus
La Paz, ANFLos colegios Ayacucho, Liceo La Paz y Hugo Dávila reportaron al menos 14 problemas que atraviesan estudiantes, profesores y directores cuando quieren usar las computadoras Quipus, entregadas por el gobierno el año pasado a los alumnos del sexto de secundaria.
A la unidad educativa La Paz fueron entregadas 251 computadoras Quipus, que han sido utilizadas una sola vez en este año de manera experimental, debido a que no cuentan con un aula o un ambiente donde puedan funcionar.
La falta de conexión eléctrica es otro problema. Inicialmente las aulas de este colegio, ubicado a una cuadra del Prado paceño, contaban con dos enchufes, que eran insuficientes para instalar al menos 40 computadoras para todo el aula. Tras las gestiones del director Alcibiades Beltrán, la alcaldía instaló un sistema eléctrico que incrementó de dos a ocho enchufes por salón.
Pese a ello, no había alargadores de corriente ni cortapicos. El director informó que algunos padres de familia y estudiantes compraron por su cuenta estos insumos para utilizar las Quipus. Otros rechazaron gastar dinero de su bolsillo, de ahí que sólo un paralelo de los seis, empleó las computadoras.
Otro problema que salió a relucir fue la seguridad de las aulas. Hay algunas que no tienen vidrios, otras carecen de puertas, e incluso si las hubiera, dentro del curso tampoco hay una gaveta o un repositorio donde se puedan dejar las computadoras después de usarlas.
“No hay condiciones materiales para la computadora o para controlar la parte logística. En un ambiente ideal debería haber un estante, por ahora sólo guardamos en un depósito y con varias llaves tenemos que asegurar, si se pierde es responsabilidad nuestra y es grave”, informó Beltrán a la ANF, a tiempo de destacar que, cuando menos, este colegio tiene un ítem para un profesor de computación, cuando otros, donde también hay computadoras, no cuentan con un profesor de esta área.
El vía crucis de los estudiantes del Ayacucho
Adnan Tórrez es el presidente del sexto C de secundaria del colegio Ayacucho de La Paz. Con una computadora Quipus en mano, dio a conocer que es el único curso de los seis paralelos al que se dotó con 24 computadoras, debido a que adquirieron, por su cuenta, los alargadores y cortapicos para que éstas funcionen.
Sin embargo, Adnan y sus compañeros se sienten “frustrados” por estas computadoras que, a diferencia del Liceo La Paz, "duermen" en el curso y no en un depósito, porque la Alcaldía les instaló rejas en las ventanas y puertas del aula. Las llaves de los candados están en manos de Adrian, ni el portero ni el director pueden ingresar a su curso.
“Desde marzo estamos usando las computadoras, desde que nos pusieron las rejas. El problema es que cuando las encendimos y queríamos exponer en un data (show), nos sorprendimos que las computadoras no tenían Word, Excel o Power Point y esa fue nuestra primera rabieta”, explicó el estudiante.
Un segundo problema que identificaron en su uso es la imposibilidad de guardar documentos en las computadoras. “Están congeladas, no podemos guardar nada. Obligatoriamente necesito comprar una flash (memory) y llevarme la tarea que hice a mi casa”, precisó.
El Internet es un tercer problema. Si bien la empresa Quipus visitó el colegio e instaló el equipo necesario para internet WiFi, cuando la empresa Entel quiso terminar el trabajo, la llave de seguridad del procesador central se perdió. “No hay la llave, dicen que la tiene el director, que lo tiene el portero y se pasaron la bolita”, lamentó.
El profesor de computación, Favio Vera, señaló que otra dificultad es la capacitación de los profesores. Dijo que no todos están habituados al uso de las computadoras. Adnan confesó que en una ocasión, un profesor se rehusó de dar clases con las computadoras porque “no estaba especializado”.
Por ahora, los estudiantes del colegio Ayacucho esperan que la empresa Quipus pueda ir a su colegio para que arreglen las 164 computadoras que se encuentran bloqueadas, debido a que, según el profesor de computación, no se adquirió la licencia de funcionamiento de Windows 8.
En el colegio Hugo Dávila se usan las Quipus, pero con limitaciones
En el colegio Hugo Dávila de la zona de Miraflores la situación es distinta a de los otros dos colegios. Las 173 computadoras que recibió fueron entregadas a los estudiantes y se empezaron a usar, de manera gradual, en cuatro materias: matemática, física, química y biología. Sin embargo, también atraviesan dificultades.
“Es insuficiente el número de computadoras, cada año el número de estudiantes varía, el año pasado teníamos 173 estudiantes en el sexto de secundaria, este año tenemos 215, entonces tenemos un déficit de más de 30 equipos”, informó el director del colegio Juan Rivera, quien ya solicitó al Ministerio de Educación las 42 computadoras Quipus que requieren, pero hasta la fecha no tuvieron respuesta.
El colegio Hugo Dávila funciona en la mañana y en la tarde. En el turno matutino, las computadoras están en un depósito y cada vez que un curso quiere utilizar las máquinas se arma todo un procedimiento de entrega e instalación en el aula que dura entre 10 a 15 minutos, el mismo tiempo que se necesita para desinstalar los equipos. Esto provoca que los tiempos de la clase se acorten, porque las computadoras obligatoriamente deben volver al depósito porque las aulas deben ser utilizadas por los estudiantes del turno de la tarde.
Las computadoras se entregan bajo lista y muchas de ellas están registradas con dos nombres, con el del estudiante de la promoción 2014 y con el del estudiante de la promoción 2015. De continuar así, el director observa que cada año se tendrán que cambiar las listas para entregar la computadora a cada estudiante.
Al igual que en los otros colegios, en el Hugo Dávila los padres de familia compraron los alargadores y cortapicos, pero insisten en que el Gobierno se haga cargo de los pisos tecnológicos (espacios para que las computadoras trabajen en red) y del acceso a Internet que hasta la fecha no ha llegado. “Faltó planificación en la entrega de las computadoras”, observó el presidente de la junta escolar del colegio Hugo Dávila, Ramiro Loza.
