San Martín aprovechó los errores de Huracán y lo dio vuelta al final
San Juan, DyN
El concierto de fútbol y goles con que Huracán comenzó su partido en San Juan se convirtió con los minutos en un torrente de derroche, mala suerte y errores que le sirvieron a San Martín una fiesta por una impensada victoria de 3-2 y salvar un invicto de 19 partidos como local.
En cambio Huracán quedó a expensas de que una victoria de Crucero del Norte, el lunes ante Estudiantes, lo deposite nuevamente en la zona de descenso.
Huracán a los dos minutos ya golpeó con una definición de Ramón "Wanchope" Ábila tras un desborde de Gonzalo Espinoza, que dos después se perdió un gol con el arco desguarnecido pues el remate dio en el travesaño.
"Hay que cerrar las jugadas", deslizó con voz tenue el resignado entrenador de Huracán, Néstor Apuzzo, una vez terminado el partido.
Espinoza brilló con jugadas de alto vuelo pero falló en sus dos definiciones.
Además de servirle el primer gol a Abila, hizo una fina jugada con desborde por izquierda iniciando camino al segundo gol porque su centro fue conectado por Wanchope, el rebote en Ardente dejó boyando la pelota que Bogado le acomodó para el remate de Distéfano.
Iban 13 minutos y Huracán estaba 2-0 con San Martín obnubilado y cada vez que Espinoza tomaba la pelota desbarataba la contención del equipo local. Como una jugada que recibió de pecho de espaldas al arco casi en mitad de cancha, se dio vuelta e inició una carrera hasta la puerta del área pero el remate se fue a milímetros de un poste.
La primera cadena fantasmal de Huracán llegó iniciado el adicionado de la etapa inicial cuando en el último corner del período Canuhé la devolvió al centro del área y Facundo Pumpido convirtió de tijera.
La primera contra de Huracán con un pase perfecto de Toranzo para Abila terminó chocando la pelota en la base de un palo. Fue un espejismo para quienes imaginaron que todo seguiría igual.
El acierto del técnico local, Carlos Mayor, fue disponer los ingresos de Gelabert y Vitti porque activaron el medio y ataque.
Huracán se quedó, ya había hecho derroche y todavía tenía ventaja en el resultado, pero a los 26 tuvo la mala suerte que el remate de Vitti en un tiro libre dio en la cara de Vismara, modificó el rumbo de la pelota y se convirtió en el empate.
Apuzzo buscó renovar la generación de juego con el ingreso de Montenegro por Toranzo, pero faltaba el error de Carlos Arano a dos minutos del final para sepultar a Huracán, porque quiso entregarle un pase con la cabeza a su arquero Marcos Díaz pero lo hizo corto y Marcos Figueroa se interpuso para puntearla y dejar descolocado al guardavallas.
Entonces hubo fiesta para los locales, impensada un rato antes cuando sufría el fútbol y goles de Huracán.
El concierto de fútbol y goles con que Huracán comenzó su partido en San Juan se convirtió con los minutos en un torrente de derroche, mala suerte y errores que le sirvieron a San Martín una fiesta por una impensada victoria de 3-2 y salvar un invicto de 19 partidos como local.
En cambio Huracán quedó a expensas de que una victoria de Crucero del Norte, el lunes ante Estudiantes, lo deposite nuevamente en la zona de descenso.
Huracán a los dos minutos ya golpeó con una definición de Ramón "Wanchope" Ábila tras un desborde de Gonzalo Espinoza, que dos después se perdió un gol con el arco desguarnecido pues el remate dio en el travesaño.
"Hay que cerrar las jugadas", deslizó con voz tenue el resignado entrenador de Huracán, Néstor Apuzzo, una vez terminado el partido.
Espinoza brilló con jugadas de alto vuelo pero falló en sus dos definiciones.
Además de servirle el primer gol a Abila, hizo una fina jugada con desborde por izquierda iniciando camino al segundo gol porque su centro fue conectado por Wanchope, el rebote en Ardente dejó boyando la pelota que Bogado le acomodó para el remate de Distéfano.
Iban 13 minutos y Huracán estaba 2-0 con San Martín obnubilado y cada vez que Espinoza tomaba la pelota desbarataba la contención del equipo local. Como una jugada que recibió de pecho de espaldas al arco casi en mitad de cancha, se dio vuelta e inició una carrera hasta la puerta del área pero el remate se fue a milímetros de un poste.
La primera cadena fantasmal de Huracán llegó iniciado el adicionado de la etapa inicial cuando en el último corner del período Canuhé la devolvió al centro del área y Facundo Pumpido convirtió de tijera.
La primera contra de Huracán con un pase perfecto de Toranzo para Abila terminó chocando la pelota en la base de un palo. Fue un espejismo para quienes imaginaron que todo seguiría igual.
El acierto del técnico local, Carlos Mayor, fue disponer los ingresos de Gelabert y Vitti porque activaron el medio y ataque.
Huracán se quedó, ya había hecho derroche y todavía tenía ventaja en el resultado, pero a los 26 tuvo la mala suerte que el remate de Vitti en un tiro libre dio en la cara de Vismara, modificó el rumbo de la pelota y se convirtió en el empate.
Apuzzo buscó renovar la generación de juego con el ingreso de Montenegro por Toranzo, pero faltaba el error de Carlos Arano a dos minutos del final para sepultar a Huracán, porque quiso entregarle un pase con la cabeza a su arquero Marcos Díaz pero lo hizo corto y Marcos Figueroa se interpuso para puntearla y dejar descolocado al guardavallas.
Entonces hubo fiesta para los locales, impensada un rato antes cuando sufría el fútbol y goles de Huracán.