Periodista dice que fue preso cuando tomaba fotos
La Paz, Erbol
El periodista potosino Juan Carlos Paco Meramendi contó a través de ERBOL los detalles de su captura durante la violenta movilización que protagonizaron los manifestantes del Comité Cívico Potosinista el pasado miércoles en inmediaciones del Viceministerio de Régimen Interior y relató las agresiones que sufrió durante su traslado a una celda policial.
“En el momento que ingresaron los dirigentes al Viceministerio (de Régimen Interior), deducimos que la situación iba a durar una o dos horas. Nosotros estábamos cerca al Multicine, a dos cuadras de la plaza Isabel La Católica, entramos al Multicine para buscar un baño y distraernos un poco en la galería. Después nos dimos cuenta que estaban gasificando. Salí y me di cuenta que un grupo de efectivos de la UTOP (Unidad Táctica de Operaciones Policiales) estaba golpeando salvajemente a un minero cooperativista”, dijo el periodista.
En ese momento, Paco Meramendi se acercó a tomar fotografías del hecho y entonces un uniformado policial le pidió su credencial de periodista.
“Le di (la credencial), me la quitó y prácticamente me la hizo desaparecer. Después vino otro policía y me pidió mi carnet de identidad y vio que mi lugar de nacimiento decía ‘Potosí’, entonces quiso detenerme y yo me resistí. En el forcejeo el policía que tenía mi carnet desapareció. Es decir, me detuvieron cuando sacaba fotos a la golpiza que recibía un minero”, agregó. Su grabadora y su cámara fotográfica también fueron confiscadas por la Policía, objetos que el periodista aún no pudo recuperar.
“Me subieron con tres o cuatro personas más a un carro y allí nos agredieron brutalmente. Nos hicieron recorrer por las calles de la ciudad, mientras éramos pisoteados y abusados. Al llegar a un cuartel, nos hicieron sacar las chamarras, el chaleco y nos hicieron tapar las cabezas”, acotó.
El reportero manifestó que ahora está tranquilo pese a que sufrió una vulneración a sus derechos como trabajador de la prensa y como ser humano al permanecer preso por siete días.
“No me dejaron trabajar, no me comprobaron ningún delito (…) Me quedo con el periodismo porque he nacido para eso y es prácticamente mi razón de existir. Estoy preparado para cualquier otra situación”, finalizó.
La pasada semana se determinó la detención preventiva para este periodista de 52 años y otros tres potosinos. Se los acusó de dañar bienes materiales del Estado y por posesión ilegal de explosivos. Luego de la presión que ejerció la dirigencia cívica, los cuatro recobraron esta mañana su libertad.
El periodista potosino Juan Carlos Paco Meramendi contó a través de ERBOL los detalles de su captura durante la violenta movilización que protagonizaron los manifestantes del Comité Cívico Potosinista el pasado miércoles en inmediaciones del Viceministerio de Régimen Interior y relató las agresiones que sufrió durante su traslado a una celda policial.
“En el momento que ingresaron los dirigentes al Viceministerio (de Régimen Interior), deducimos que la situación iba a durar una o dos horas. Nosotros estábamos cerca al Multicine, a dos cuadras de la plaza Isabel La Católica, entramos al Multicine para buscar un baño y distraernos un poco en la galería. Después nos dimos cuenta que estaban gasificando. Salí y me di cuenta que un grupo de efectivos de la UTOP (Unidad Táctica de Operaciones Policiales) estaba golpeando salvajemente a un minero cooperativista”, dijo el periodista.
En ese momento, Paco Meramendi se acercó a tomar fotografías del hecho y entonces un uniformado policial le pidió su credencial de periodista.
“Le di (la credencial), me la quitó y prácticamente me la hizo desaparecer. Después vino otro policía y me pidió mi carnet de identidad y vio que mi lugar de nacimiento decía ‘Potosí’, entonces quiso detenerme y yo me resistí. En el forcejeo el policía que tenía mi carnet desapareció. Es decir, me detuvieron cuando sacaba fotos a la golpiza que recibía un minero”, agregó. Su grabadora y su cámara fotográfica también fueron confiscadas por la Policía, objetos que el periodista aún no pudo recuperar.
“Me subieron con tres o cuatro personas más a un carro y allí nos agredieron brutalmente. Nos hicieron recorrer por las calles de la ciudad, mientras éramos pisoteados y abusados. Al llegar a un cuartel, nos hicieron sacar las chamarras, el chaleco y nos hicieron tapar las cabezas”, acotó.
El reportero manifestó que ahora está tranquilo pese a que sufrió una vulneración a sus derechos como trabajador de la prensa y como ser humano al permanecer preso por siete días.
“No me dejaron trabajar, no me comprobaron ningún delito (…) Me quedo con el periodismo porque he nacido para eso y es prácticamente mi razón de existir. Estoy preparado para cualquier otra situación”, finalizó.
La pasada semana se determinó la detención preventiva para este periodista de 52 años y otros tres potosinos. Se los acusó de dañar bienes materiales del Estado y por posesión ilegal de explosivos. Luego de la presión que ejerció la dirigencia cívica, los cuatro recobraron esta mañana su libertad.