No todo fue eficacia
Argentina encontró los goles porque mantuvo su estilo ofensivo
Nicolás Baier, Espn
La primera lectura que se hace sobre la goleada de Argentina ante Paraguay está relacionada a un tema de eficacia.
Los números incentivan ese análisis: la Selección anotó en el 40% de sus remates, el porcentaje más alto entre los que realizaron al menos 10 tiros en un partido. También logró que el 66.67% de sus remates fueran al arco (10 de 15).
Nadie desmerece semejante poder de fuego. Sin embargo, la clave la dieron Gerardo Martino y varios jugadores al término de la semifinal en Concepción.
Para el entrenador, "lo mejor es la perseverancia en seguir jugando". Aunque todavía quiere que el equipo sostenga el ritmo durante mayor cantidad de tiempo, el Tata sabe que es fundamental afianzar la idea. Con ella los resultados llegan solos.
En esa línea fue Lionel Messi: "Hicimos lo que veníamos haciendo en partidos anteriores. Buscamos la misma idea". El duelo ante una Paraguay que los complicó en el debut y en un tramo de la semi, no hizo modificar el libreto.
"Ahora no nos vamos a meter atrás. Vamos a seguir jugando a nuestra manera", reflexionó Javier Mascherano. En la final de la Copa América se viene Chile, tal vez la única selección capaz de jugarle de igual a igual a Argentina.
Mantener el estilo no es sinónimo de triunfo seguro. Si bien "la tendencia es el riesgo", cuerpo técnico y futbolistas saben que jugadas como el gol de Lucas Barrios no se pueden repetir. Hay que ser certeros para tomar la decisión de tocar hacia atrás o revolearla cuando haga falta. No siempre y en cualquier sector del campo se puede arriesgar.
En la zona mixta, Sergio Agüero confesó: "Cuando nos hicieron el 2-1 pensamos 'Uy, otra vez lo mismo de la fase de grupos'. Dijimos de no repetir los mismos errores y en el segundo tiempo salimos como al principio". De eso se trata. Profundizar una forma propia sin especular exageradamente con el rival.
"Seguimos siendo cabezas dura y continuamos intentando", cerró Mascherano. Lo que para algunos es testarudez, al equipo parece fortalecerlo.
Salir limpio del fondo, lateralizar en busca de huecos, rotar, mostrarse por sorpresa, romper líneas para partir defensas, llegar con mucha gente al ataque.
Con espacios, los delanteros de Argentina hicieron un desparramo. Con sólo decir que Gonzalo Higuaín anotó un tanto pero no completó ningún pase (sobre tres toques de balón, tuvo el gol y dos pases errados).
"Entró uno y entraron todos". Totalmente cierto. Tanto como que gran parte de la victoria se la lleva la búsqueda de la idea.
Nicolás Baier, Espn
La primera lectura que se hace sobre la goleada de Argentina ante Paraguay está relacionada a un tema de eficacia.
Los números incentivan ese análisis: la Selección anotó en el 40% de sus remates, el porcentaje más alto entre los que realizaron al menos 10 tiros en un partido. También logró que el 66.67% de sus remates fueran al arco (10 de 15).
Nadie desmerece semejante poder de fuego. Sin embargo, la clave la dieron Gerardo Martino y varios jugadores al término de la semifinal en Concepción.
Para el entrenador, "lo mejor es la perseverancia en seguir jugando". Aunque todavía quiere que el equipo sostenga el ritmo durante mayor cantidad de tiempo, el Tata sabe que es fundamental afianzar la idea. Con ella los resultados llegan solos.
En esa línea fue Lionel Messi: "Hicimos lo que veníamos haciendo en partidos anteriores. Buscamos la misma idea". El duelo ante una Paraguay que los complicó en el debut y en un tramo de la semi, no hizo modificar el libreto.
"Ahora no nos vamos a meter atrás. Vamos a seguir jugando a nuestra manera", reflexionó Javier Mascherano. En la final de la Copa América se viene Chile, tal vez la única selección capaz de jugarle de igual a igual a Argentina.
Mantener el estilo no es sinónimo de triunfo seguro. Si bien "la tendencia es el riesgo", cuerpo técnico y futbolistas saben que jugadas como el gol de Lucas Barrios no se pueden repetir. Hay que ser certeros para tomar la decisión de tocar hacia atrás o revolearla cuando haga falta. No siempre y en cualquier sector del campo se puede arriesgar.
En la zona mixta, Sergio Agüero confesó: "Cuando nos hicieron el 2-1 pensamos 'Uy, otra vez lo mismo de la fase de grupos'. Dijimos de no repetir los mismos errores y en el segundo tiempo salimos como al principio". De eso se trata. Profundizar una forma propia sin especular exageradamente con el rival.
"Seguimos siendo cabezas dura y continuamos intentando", cerró Mascherano. Lo que para algunos es testarudez, al equipo parece fortalecerlo.
Salir limpio del fondo, lateralizar en busca de huecos, rotar, mostrarse por sorpresa, romper líneas para partir defensas, llegar con mucha gente al ataque.
Con espacios, los delanteros de Argentina hicieron un desparramo. Con sólo decir que Gonzalo Higuaín anotó un tanto pero no completó ningún pase (sobre tres toques de balón, tuvo el gol y dos pases errados).
"Entró uno y entraron todos". Totalmente cierto. Tanto como que gran parte de la victoria se la lleva la búsqueda de la idea.