Francia: Corte reintegra a Le Pen en partido derechista
París, AP
Una corte francesa reintegró a Jean-Marie Le Pen como miembro del partido ultraderechista Frente Nacional que fundó hace varias décadas, en un amargo revés para su hija Marine Le Pen, la actual presidenta de la organización y quien lo había suspendido a raíz de declaraciones polémicas y antisemitas.
El drama familiar y político refleja la evolución del partido, ya que Marine Le Pen, con serias aspiraciones a la presidencia, cultiva una imagen menos radical que la de su padre.
Había intentado marginar a su padre, presidente honorario vitalicio del partido, suspendiendo su membresía. Ella llevó a cabo una reunión especial el 4 de mayo en la que varias figuras altas del partido suspendieron la membresía de su padre.
Jean-Marie Le Pen objetó la decisión y una corte en el suburbio parisino de Nanterre falló a su favor el jueves. El juez dijo que el partido violó sus propios estatutos al suspender a Le Pen sin fijar una fecha para una decisión final sobre si debía ser expulsado de forma permanente.
Marine Le Pen dijo que el fallo del jueves "no tendrá ninguna influencia" en la votación que realizan actualmente los miembros del partido sobre cambios a los estatutos del Frente Nacional. La votación se realiza por correo y está previsto que finalice el 10 de julio.
Entre los cambios se contempla eliminar el estatus de su padre como presidente honorario vitalicio del partido, un título creado por él cuando Marine se hizo cargo del partido en 2011.
En un comunicado, el partido dijo que estaba apelando el fallo del jueves, pero dijo que la decisión sólo produciría un resultado: Ahora que fue reintegrado en el partido, Jean-Marie Le Pen puede votar sobre su propio futuro.
Haber sido suspendido fue una derrota importante para un hombre que una vez fue candidato para la presidencia francesa y cuya lucha abiertamente antiinmigrante hizo que el gobierno se enfocara más en la seguridad y la migración.
Jean-Marie Le Pen ha sido criticado varias veces por su racismo y antisemitismo. Su hija ha tratado de distanciar al partido de esa postura y en cambio se ha enfocado en atacar lo que ella llama "islamización" y los temores de la violencia extremista.
Una corte francesa reintegró a Jean-Marie Le Pen como miembro del partido ultraderechista Frente Nacional que fundó hace varias décadas, en un amargo revés para su hija Marine Le Pen, la actual presidenta de la organización y quien lo había suspendido a raíz de declaraciones polémicas y antisemitas.
El drama familiar y político refleja la evolución del partido, ya que Marine Le Pen, con serias aspiraciones a la presidencia, cultiva una imagen menos radical que la de su padre.
Había intentado marginar a su padre, presidente honorario vitalicio del partido, suspendiendo su membresía. Ella llevó a cabo una reunión especial el 4 de mayo en la que varias figuras altas del partido suspendieron la membresía de su padre.
Jean-Marie Le Pen objetó la decisión y una corte en el suburbio parisino de Nanterre falló a su favor el jueves. El juez dijo que el partido violó sus propios estatutos al suspender a Le Pen sin fijar una fecha para una decisión final sobre si debía ser expulsado de forma permanente.
Marine Le Pen dijo que el fallo del jueves "no tendrá ninguna influencia" en la votación que realizan actualmente los miembros del partido sobre cambios a los estatutos del Frente Nacional. La votación se realiza por correo y está previsto que finalice el 10 de julio.
Entre los cambios se contempla eliminar el estatus de su padre como presidente honorario vitalicio del partido, un título creado por él cuando Marine se hizo cargo del partido en 2011.
En un comunicado, el partido dijo que estaba apelando el fallo del jueves, pero dijo que la decisión sólo produciría un resultado: Ahora que fue reintegrado en el partido, Jean-Marie Le Pen puede votar sobre su propio futuro.
Haber sido suspendido fue una derrota importante para un hombre que una vez fue candidato para la presidencia francesa y cuya lucha abiertamente antiinmigrante hizo que el gobierno se enfocara más en la seguridad y la migración.
Jean-Marie Le Pen ha sido criticado varias veces por su racismo y antisemitismo. Su hija ha tratado de distanciar al partido de esa postura y en cambio se ha enfocado en atacar lo que ella llama "islamización" y los temores de la violencia extremista.