EEUU considera "muy preocupantes" las críticas de líder iraní tras acuerdo nuclear
Dubai, Reuters
Estados Unidos dijo el martes que está "perturbado" por la hostilidad del líder supremo de Irán tras el acuerdo nuclear alcanzado días atrás, mientras los jefes de la diplomacia intentaban calmar la oposición al pacto de los sectores de línea dura en sus respectivos países.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, sostuvo que un discurso del sábado del líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, en el que prometió desafiar las políticas de Washington en la región a pesar de un acuerdo con las potencias mundiales sobre el programa nuclear de Teherán, era "muy preocupante".
"No sé cómo interpretarlo en este momento, excepto adoptarlo por su valor nominal, que esa es su política", dijo Kerry en una entrevista con la cadena de televisión saudí Al Arabiya.
"Pero sé que a menudo los comentarios se hacen públicos y las cosas pueden evolucionar de manera diferente. Si esa es la política, es muy inquietante, es muy preocupante", añadió.
Khamenei, la máxima autoridad en Irán, dijo el sábado a sus partidarios que las políticas de Washington en la región estaban opuestas a Irán en "180 grados", en un discurso pronunciado en una mezquita en Teherán donde muchos fieles coreaban "Muerte a Estados Unidos" y "Muerte a Israel".
En virtud del acuerdo alcanzado en Viena la semana pasada, Irán será objeto de reducciones a largo plazo en su programa nuclear a cambio del levantamiento de sanciones de Estados Unidos, la Unión Europea y la ONU.
El acuerdo fue firmado entre Irán y Estados Unidos, Gran Bretaña, China, Francia, Alemania y Rusia.
Fue un gran logro en política exterior tanto para el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, como para el mandatario pragmático de Irán, Hassan Rouhani.
Ambos líderes deben presentar el plan en sus respectivos países a políticos de línea dura que han sido enemigos durante décadas y que se refieren mutuamente como "El Gran Satán" y un miembro del "Eje del Mal".
En el caso de Irán, el acuerdo debe contar con la aceptación del Consejo de Seguridad Nacional y finalmente de Khamenei, quien hasta ahora se ha abstenido de emitir su juicio final.
OPOSICIÓN A ACUERDO
En Estados Unidos, los republicanos que controlan el Congreso se han mostrado contrarios al acuerdo, pero Obama ha dicho que vetará cualquier intento de bloquearlo.
Kerry también tiene la tarea de vender el acuerdo a aliados escépticos de Estados Unidos en la región. Israel se opone en forma implacable y aliados como Arabia Saudita no ven con buenos ojos un acuerdo que beneficiaría a Irán.
El secretario general del Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico, Abdullatif al-Zayani, dijo que el discurso de Khamenei demuestra la "continua intromisión de Irán en los asuntos internos de algunos países árabes".
"Esos comentarios no ayudan a construir la confianza para relaciones de cooperación basadas en los principios de una buena vecindad (y) la no intromisión en asuntos internos", declaró Zayani, citado por la agencia de noticias saudí SPA.
El director general del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, Dore Gold, describió la oposición de su país al pacto como un "gran desacuerdo" con Washington sobre "un pilar central de la política exterior", pero así y todo intentó restar importancia a la división con su aliado más cercano.
En tanto, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán defendió el acuerdo nuclear luego de las fuertes críticas emitidas por figuras conservadoras de la república islámica.
"No estamos diciendo que el acuerdo favorece en su totalidad a Irán. Cualquier negociación requiere concesiones. Definitivamente hemos mostrado cierta flexibilidad", dijo Mohammed Javad Zarif al Parlamento iraní.
"Les digo lo mismo que le dije al Líder Supremo: hicimos lo mejor que pudimos por preservar los puntos intransables (de Irán) sino todos", añadió Zarif, en referencia a Khamenei.
Estados Unidos dijo el martes que está "perturbado" por la hostilidad del líder supremo de Irán tras el acuerdo nuclear alcanzado días atrás, mientras los jefes de la diplomacia intentaban calmar la oposición al pacto de los sectores de línea dura en sus respectivos países.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, sostuvo que un discurso del sábado del líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, en el que prometió desafiar las políticas de Washington en la región a pesar de un acuerdo con las potencias mundiales sobre el programa nuclear de Teherán, era "muy preocupante".
"No sé cómo interpretarlo en este momento, excepto adoptarlo por su valor nominal, que esa es su política", dijo Kerry en una entrevista con la cadena de televisión saudí Al Arabiya.
"Pero sé que a menudo los comentarios se hacen públicos y las cosas pueden evolucionar de manera diferente. Si esa es la política, es muy inquietante, es muy preocupante", añadió.
Khamenei, la máxima autoridad en Irán, dijo el sábado a sus partidarios que las políticas de Washington en la región estaban opuestas a Irán en "180 grados", en un discurso pronunciado en una mezquita en Teherán donde muchos fieles coreaban "Muerte a Estados Unidos" y "Muerte a Israel".
En virtud del acuerdo alcanzado en Viena la semana pasada, Irán será objeto de reducciones a largo plazo en su programa nuclear a cambio del levantamiento de sanciones de Estados Unidos, la Unión Europea y la ONU.
El acuerdo fue firmado entre Irán y Estados Unidos, Gran Bretaña, China, Francia, Alemania y Rusia.
Fue un gran logro en política exterior tanto para el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, como para el mandatario pragmático de Irán, Hassan Rouhani.
Ambos líderes deben presentar el plan en sus respectivos países a políticos de línea dura que han sido enemigos durante décadas y que se refieren mutuamente como "El Gran Satán" y un miembro del "Eje del Mal".
En el caso de Irán, el acuerdo debe contar con la aceptación del Consejo de Seguridad Nacional y finalmente de Khamenei, quien hasta ahora se ha abstenido de emitir su juicio final.
OPOSICIÓN A ACUERDO
En Estados Unidos, los republicanos que controlan el Congreso se han mostrado contrarios al acuerdo, pero Obama ha dicho que vetará cualquier intento de bloquearlo.
Kerry también tiene la tarea de vender el acuerdo a aliados escépticos de Estados Unidos en la región. Israel se opone en forma implacable y aliados como Arabia Saudita no ven con buenos ojos un acuerdo que beneficiaría a Irán.
El secretario general del Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico, Abdullatif al-Zayani, dijo que el discurso de Khamenei demuestra la "continua intromisión de Irán en los asuntos internos de algunos países árabes".
"Esos comentarios no ayudan a construir la confianza para relaciones de cooperación basadas en los principios de una buena vecindad (y) la no intromisión en asuntos internos", declaró Zayani, citado por la agencia de noticias saudí SPA.
El director general del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, Dore Gold, describió la oposición de su país al pacto como un "gran desacuerdo" con Washington sobre "un pilar central de la política exterior", pero así y todo intentó restar importancia a la división con su aliado más cercano.
En tanto, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán defendió el acuerdo nuclear luego de las fuertes críticas emitidas por figuras conservadoras de la república islámica.
"No estamos diciendo que el acuerdo favorece en su totalidad a Irán. Cualquier negociación requiere concesiones. Definitivamente hemos mostrado cierta flexibilidad", dijo Mohammed Javad Zarif al Parlamento iraní.
"Les digo lo mismo que le dije al Líder Supremo: hicimos lo mejor que pudimos por preservar los puntos intransables (de Irán) sino todos", añadió Zarif, en referencia a Khamenei.