Denuncia de Doyen contra la FIFA: la sentencia, el 24 de julio
Bruselas, As
Se celebró en el Tribunal de Primera Instancia de Bruselas (TPÌB) la primera vista judicial del enfrentamiento entre Doyen, el principal fondo de inversión del mundo, y la FIFA. El operador, con Nelio Lucas, su consejero delegado, a la cabeza, reclamó la ejecución de medidas cautelares contra la normativa del máximo organismo del fútbol mundial hasta que la Comisión Europea dicte sentencia sobre el fondo del asunto. Está previsto que el TPIB dé su veredicto el próximo 24 de julio. “La decisión de la FIFA de prohibir los fondos de inversión contradice la ley soberana de la Unión Europea. Es desproporcionada e ilegal”, defendió en la audiencia pública el abogado belga Jean-Louis Dupont, representante legal de Doyen y letrado conocido por el caso Bosman. Los demandantes señalan que la medida vulnera la competencia del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), además de las libertades fundamentales de establecimiento, prestación de servicios, trabajo y circulación de capitales. “El modelo de inversión de terceros (TPI) asegura que el club y el jugador tienen toda la independencia en sus decisiones. Nosotros no tenemos la propiedad de los futbolistas, simplemente prestamos el dinero para realizar la inversión. Somos como un banco y actuamos con transparencia. Defendemos la regulación del sector”, esgrimió Nelio Lucas. “Estamos seguros de que los tribunales van a estimar nuestros argumentos”, concluyó Dupont.
La circular 1.464 de la FIFA, sellada el pasado 22 de diciembre, prohíbe desde el 1 de mayo la propiedad de futbolistas por parte de empresas (TPO), así como la posesión de cualquier tipo de derecho que conceda a una empresa participar, total o parcialmente, en el valor de un futuro traspaso de un jugador de un club a otro (el modelo con el que trabaja Doyen). Este operador también presentó sendas denuncias ante el Tribunal de Gran Instancia de París y la Comisión Europea. Cuenta con el apoyo de La Liga y la Liga Portuguesa de Fútbol Profesional, que también demandaron a la FIFA por este asunto ante la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea.
Se celebró en el Tribunal de Primera Instancia de Bruselas (TPÌB) la primera vista judicial del enfrentamiento entre Doyen, el principal fondo de inversión del mundo, y la FIFA. El operador, con Nelio Lucas, su consejero delegado, a la cabeza, reclamó la ejecución de medidas cautelares contra la normativa del máximo organismo del fútbol mundial hasta que la Comisión Europea dicte sentencia sobre el fondo del asunto. Está previsto que el TPIB dé su veredicto el próximo 24 de julio. “La decisión de la FIFA de prohibir los fondos de inversión contradice la ley soberana de la Unión Europea. Es desproporcionada e ilegal”, defendió en la audiencia pública el abogado belga Jean-Louis Dupont, representante legal de Doyen y letrado conocido por el caso Bosman. Los demandantes señalan que la medida vulnera la competencia del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), además de las libertades fundamentales de establecimiento, prestación de servicios, trabajo y circulación de capitales. “El modelo de inversión de terceros (TPI) asegura que el club y el jugador tienen toda la independencia en sus decisiones. Nosotros no tenemos la propiedad de los futbolistas, simplemente prestamos el dinero para realizar la inversión. Somos como un banco y actuamos con transparencia. Defendemos la regulación del sector”, esgrimió Nelio Lucas. “Estamos seguros de que los tribunales van a estimar nuestros argumentos”, concluyó Dupont.
La circular 1.464 de la FIFA, sellada el pasado 22 de diciembre, prohíbe desde el 1 de mayo la propiedad de futbolistas por parte de empresas (TPO), así como la posesión de cualquier tipo de derecho que conceda a una empresa participar, total o parcialmente, en el valor de un futuro traspaso de un jugador de un club a otro (el modelo con el que trabaja Doyen). Este operador también presentó sendas denuncias ante el Tribunal de Gran Instancia de París y la Comisión Europea. Cuenta con el apoyo de La Liga y la Liga Portuguesa de Fútbol Profesional, que también demandaron a la FIFA por este asunto ante la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea.