Comcipo decide que los marchistas retornen a la ciudad de Potosí
La Paz, Erbol
El Directorio Ampliado del Comité Cívico Potosinista (Comcipo) definió la tarde de hoy que los marchistas, que llegaron hasta la ciudad de La Paz en demanda de atención a su pliego petitorio de 26 puntos, retornen a la capital potosina.
“Se ha resuelto que nuestros compañeros puedan retornar a la cabeza del compañero Jhonny Llally (presidente de Comcipo), pero se mantienen las medidas de presión y a la llegada de nuestros compañeros se va a convocar a un consejo consultivo para tomar otras acciones para que puedan ser atendidas las demandas del pueblo potosino”, dijo a ERBOL el secretario general de los cívicos, Emilio Elías.
La decisión fue adoptada después de que el Ejecutivo dio por cerrado el diálogo que se desarrolló durante cuatro días en la sede de Gobierno, pero casi a la conclusión de ese proceso no se logró instalar la plenaria en la que se iba suscribir un acuerdo final de las negociaciones.
Ante esa situación “se tomó la resolución de que nuestros compañeros retornen, por unanimidad se ha pedido que nuestros compañeros retornen porque no podemos seguir manteniéndolos (en La Paz), cuando el Gobierno se muestra totalmente soberbio y no quiere atendernos, por tanto tampoco podemos seguir siendo humillados”, aseveró.
Los potosinos llegaron a la ciudad de La Paz el pasado 7 de julio y desde entonces se instalaron en el coliseo de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) y desde ese centro deportivo salieron durante varios días a movilizarse por las céntricas calles de la sede de Gobierno.
Los manifestantes, incluso en más de tres oportunidades, trataron de ingresar por la fuerza a la plaza Murillo y en ese intento fueron gasificados por efectivos policiales que durante todas estas semanas resguardaron el centro político del país.
El pasado 22 de julio se registró la jornada más violenta en la sede de Gobierno, donde la dirigencia de Comcipo sostuvo un primer encuentro con autoridades del Ejecutivo en el edificio del Viceministerio de Régimen Interior y el mismo no tuvo los resultados esperados para la instalación del diálogo.
Entonces, la dirigencia cívica abandonó el Viceministerio y minutos después, un grupo de mineros violentó la puerta principal de ese edificio público con la explosión de un cachorro de dinamita, luego algunos de los movilizados ingresaron hasta el patio y rompieron los vidrios de la mencionada infraestructura.
Ante este hecho, policías intervinieron y los movilizados se enfrentaron a los uniformados durante más de una hora.
Desde aquel día, los potosinos decidieron replegarse al coliseo de la UMSA a la espera de la solución a la demanda regional de Potosí. En el transcurso del prolongado conflicto, ambas partes llamaron al diálogo en reiteradas oportunidades.
Finalmente, el diálogo fue instalado el pasado 25 de julio en el edificio del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), donde durante cuatro días intentaron ponerse de acuerdo los dirigentes de Comcipo y autoridades del Gobierno, en medio de acusaciones y descalificaciones.
Ayer, las mesas técnicas de trabajo, que abordaron las demandas de los potosinos, concluyeron con su labor y cuando se esperaba que se instale la plenaria para suscribir un acuerdo final, dirigentes de Comcipo decidieron postergar este último paso de la concertación hasta las 09.00 de hoy, pero esa determinación causó la indignación de las autoridades del Gobierno, quienes dieron por terminado el diálogo.
El Directorio Ampliado del Comité Cívico Potosinista (Comcipo) definió la tarde de hoy que los marchistas, que llegaron hasta la ciudad de La Paz en demanda de atención a su pliego petitorio de 26 puntos, retornen a la capital potosina.
“Se ha resuelto que nuestros compañeros puedan retornar a la cabeza del compañero Jhonny Llally (presidente de Comcipo), pero se mantienen las medidas de presión y a la llegada de nuestros compañeros se va a convocar a un consejo consultivo para tomar otras acciones para que puedan ser atendidas las demandas del pueblo potosino”, dijo a ERBOL el secretario general de los cívicos, Emilio Elías.
La decisión fue adoptada después de que el Ejecutivo dio por cerrado el diálogo que se desarrolló durante cuatro días en la sede de Gobierno, pero casi a la conclusión de ese proceso no se logró instalar la plenaria en la que se iba suscribir un acuerdo final de las negociaciones.
Ante esa situación “se tomó la resolución de que nuestros compañeros retornen, por unanimidad se ha pedido que nuestros compañeros retornen porque no podemos seguir manteniéndolos (en La Paz), cuando el Gobierno se muestra totalmente soberbio y no quiere atendernos, por tanto tampoco podemos seguir siendo humillados”, aseveró.
Los potosinos llegaron a la ciudad de La Paz el pasado 7 de julio y desde entonces se instalaron en el coliseo de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) y desde ese centro deportivo salieron durante varios días a movilizarse por las céntricas calles de la sede de Gobierno.
Los manifestantes, incluso en más de tres oportunidades, trataron de ingresar por la fuerza a la plaza Murillo y en ese intento fueron gasificados por efectivos policiales que durante todas estas semanas resguardaron el centro político del país.
El pasado 22 de julio se registró la jornada más violenta en la sede de Gobierno, donde la dirigencia de Comcipo sostuvo un primer encuentro con autoridades del Ejecutivo en el edificio del Viceministerio de Régimen Interior y el mismo no tuvo los resultados esperados para la instalación del diálogo.
Entonces, la dirigencia cívica abandonó el Viceministerio y minutos después, un grupo de mineros violentó la puerta principal de ese edificio público con la explosión de un cachorro de dinamita, luego algunos de los movilizados ingresaron hasta el patio y rompieron los vidrios de la mencionada infraestructura.
Ante este hecho, policías intervinieron y los movilizados se enfrentaron a los uniformados durante más de una hora.
Desde aquel día, los potosinos decidieron replegarse al coliseo de la UMSA a la espera de la solución a la demanda regional de Potosí. En el transcurso del prolongado conflicto, ambas partes llamaron al diálogo en reiteradas oportunidades.
Finalmente, el diálogo fue instalado el pasado 25 de julio en el edificio del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), donde durante cuatro días intentaron ponerse de acuerdo los dirigentes de Comcipo y autoridades del Gobierno, en medio de acusaciones y descalificaciones.
Ayer, las mesas técnicas de trabajo, que abordaron las demandas de los potosinos, concluyeron con su labor y cuando se esperaba que se instale la plenaria para suscribir un acuerdo final, dirigentes de Comcipo decidieron postergar este último paso de la concertación hasta las 09.00 de hoy, pero esa determinación causó la indignación de las autoridades del Gobierno, quienes dieron por terminado el diálogo.