Madrid, Mundo Deportivo
Casi nueve minutos, eso es lo que duró la despedida de Iker Casillas del Real Madrid. Eran poco más de las 12 del mediodía cuando el portero se sentó en la sala de prensa del Bernabéu, Era una comparecencia, sin preguntas y en la que Casillas no estaba acompañado por ningún representante del Real Madrid, por expreso deseo del jugador. Frente a él, más de 50 medios de comunicación con los fotógrafos haciendo miles de fotos. “Esas no valen, las buenas serán las de las lágrimas”, le dijo un Casillas que, efectivamente, cuando comenzó a leer su comunicado, se desplomó: “Leer esto son 30 segundos, pero me va a costar una hora”, dijo Iker antes de comenzar, pero nada más decir las primeras palabras. “En primer lugar”, fueron esas palabras y ahí Casillas no pudo evitar llorar a moco tendido. Bebió agua, pero no podía parar y sólo los aplausos de los allí presentes lograron que se repusiera.
Casillas comenzó a leer su discurso y lo hizo para dar las “gracias por estar aquí, por acompañarme en este momento tan especial. He venido a este gran estadio para despedirme de todos vosotros y en especial de los madridista”. Acto seguido y siempre con la emoción a flor de piel, siguió explicando que “como sabéis, desde ayer dejé de pertenecer al Real Madrid. Me voy al Oporto por dos motivos: la primera la ilusión que me han transmitido desde el club portugués. Y segundo, por las muestras de cariño que he ido recibiendo a lo largo de estos días. He estado muy feliz y muy contento por ese interés. Lucharé al máximo para ganar todos los títulos posibles”.
Iker, acto seguido, quiso enviar un mensaje a los madridistas. “Ahora sí, me quiero dirigir a los madridistas. Ha llegado este día difícil, decir adiós a esta institución que me lo ha dado todo. Parece que fue ayer que con nueve años vestí por primera vez la camiseta del Real Madrid. Vi cumplido mi sueño. Durante todo este tiempo me he sentido muy querido y acompañado. Este club me ha formado también como persona y me ha ayudado a crecer. He tratado de llevar siempre sus valores”, dijo, para acto seguido acordarse de sus compañeros, entrenadores y empleados del club. “Dejo grandes amigos y sé que siempre podré contar con ellos. También me quiero acordar de todos mis entrenadores. Me acuerdo de todos , desde Mezquita, que me rescató, hasta a mi último entrenador: Carlo Ancelotti. De todos he aprendido muchas cosas. A los cuerpos técnicos. Todos me han transmitido comprensión, sabiduría, experiencia y profesionalidad. También a todo el personal del club, que día a día hemos formado parte de este Real Madrid. No se les ve pero siempre está ahí”.
La familia no podía faltar y Casillas ha querido recordar “a mis padres y a mi familia, que han estado conmigo siempre. También a mi mujer y a mi hijo”. Las últimas palabras de Casillas ,que se volvió a emocionar y tuvo que parar de leer, han sido para los aficionados del Real Madrid. “Estas últimas líneas, se las quiero dedicar al madridismo. Gracias a vuestro apoyo incondicional. Por ayudarme a levantar cada copa, por estar ahí, por tenderme la mano y tirar de ella para levantarme”, comenzó diciendo, para añadir que “quiero repetir una frase que he dicho siempre en las entrevistas. Independientemente de que haya sido buen o mal portero, espero que la gente se acuerde de mí por ser buena persona, con mis defectos y cualidades. Gracias, gracias, miles de gracias”.
Casillas se despidió con un “nunca os podré olvidar y allá donde vaya, seguiré gritando ¡Hala Madrid!. No voy a decir adiós, porque será un punto y seguido”, para dar a las gracias a la prensa presente a las que les dijo que “a vosotros qué os voy a decir, nos seguiremos viendo”. Ahí se levantó y se marchó entre aplausos, pero solo. Fuera, un centenar de aficionados le estaban esperando desde casi las 10 de la mañana para darle su último adiós en la entrada del aparcamiento del Bernabéu. No lo vieron entrar porque lo hizo por otra entrada, pero allí seguían, a pesar del calor, para darle el último adiós a una leyenda del Real Madrid y quejándose de que “así no es manera de despedir a Casillas”.