Warner habría recibido 1 millón de euros de un magnate qatarí
Zurich, As
El exvicepresidente de la FIFA Jack Warner recibió 1,2 millones de dólares (1,06 millones de euros) en 2011 del multimillonario qatarí Mohamed Bin Hammam, exmiembro del comité ejecutivo de la FIFA, poco después de que ese país fuese elegido sede del Mundial de 2022, según publica hoy un diario trinitense.
El periódico Trinidad Express asegura haber obtenido documentos oficiales que "demuestran" que Bin Hammam, expresidente de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC, por su sigla en inglés), pagó 1.212.000 dólares estadounidenses en una transferencia electrónica a la cuenta privada de Warner en el Banco Intercomercial, sucursal de Chaguanas (Trinidad y Tobago), el 14 de julio de 2014.
Este pago, y siempre según el periódico, se produjo después de que un mes antes la compañía de Bin Hammam, 'Khalid Electrical and Mechanical Est', intentara sin éxito transferir tres pagos, que sumaban 1,2 millones, desde una cuenta en EE.UU., a cuentas de los hijos de Warner, Daryan y Daryll, y de su asistente personal.
El político trinitense, de 72 años, que está imputado en el escándalo de corrupción en la FIFA destapado por la Justicia de EE.UU. y sobre el que pesa una orden de arresto de la Interpol, ha negado en repetidas ocasiones las acusaciones de haber recibido o pagado sobornos.
En marzo de 2014, el periódico británico Daily Telegraph publicó una información denunciando un pago a cambio de que Warner apoyara la candidatura de Qatar al Mundial de 2022. Según el rotativo, el FBI estadounidense ya estaba investigando en aquel entonces a Warner y sus presuntos vínculos con la elección de Qatar como sede del Mundial, una de las decisiones más controvertidas de la historia de la FIFA.
En la actualidad, la Justicia de EE.UU. investiga también si Warner desvió a cuentas de su uso personal 750.000 dólares estadounidenses destinados a las víctimas del terremoto de Haití de 2010, según citó este martes la cadena británica BBC.
Ese medio de comunicación alega que Warner recibió esos fondos de la FIFA y la federación coreana de fútbol con el propósito de ayudar a reconstruir el país tras el desastre.
Por otra parte, el actual secretario general de la FIFA, Jérome Valcke, negó hoy que la organización tenga algo que ver con los 10 millones de dólares que en 2008 Warner habría recibido a cambio de su apoyo a Sudáfrica como sede del Mundial de Fútbol en 2010, tal y como denunció recientemente el expresidente del Comité Organizador de aquella competición, Danny Jordaan.
Según Jordaan, los 10 millones de dólares se pagaron a la Confederación de Fútbol de América del Norte, Central y el Caribe (Concacaf) para promover el desarrollo del fútbol en la zona. Sin embargo, según la investigación del FBI, Warner, que era entonces presidente de la Concacaf, recibió el supuesto soborno para votar por Sudáfrica y conseguir el apoyo para esta candidatura de otros dos miembros con derecho a voto.
El exvicepresidente de la FIFA Jack Warner recibió 1,2 millones de dólares (1,06 millones de euros) en 2011 del multimillonario qatarí Mohamed Bin Hammam, exmiembro del comité ejecutivo de la FIFA, poco después de que ese país fuese elegido sede del Mundial de 2022, según publica hoy un diario trinitense.
El periódico Trinidad Express asegura haber obtenido documentos oficiales que "demuestran" que Bin Hammam, expresidente de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC, por su sigla en inglés), pagó 1.212.000 dólares estadounidenses en una transferencia electrónica a la cuenta privada de Warner en el Banco Intercomercial, sucursal de Chaguanas (Trinidad y Tobago), el 14 de julio de 2014.
Este pago, y siempre según el periódico, se produjo después de que un mes antes la compañía de Bin Hammam, 'Khalid Electrical and Mechanical Est', intentara sin éxito transferir tres pagos, que sumaban 1,2 millones, desde una cuenta en EE.UU., a cuentas de los hijos de Warner, Daryan y Daryll, y de su asistente personal.
El político trinitense, de 72 años, que está imputado en el escándalo de corrupción en la FIFA destapado por la Justicia de EE.UU. y sobre el que pesa una orden de arresto de la Interpol, ha negado en repetidas ocasiones las acusaciones de haber recibido o pagado sobornos.
En marzo de 2014, el periódico británico Daily Telegraph publicó una información denunciando un pago a cambio de que Warner apoyara la candidatura de Qatar al Mundial de 2022. Según el rotativo, el FBI estadounidense ya estaba investigando en aquel entonces a Warner y sus presuntos vínculos con la elección de Qatar como sede del Mundial, una de las decisiones más controvertidas de la historia de la FIFA.
En la actualidad, la Justicia de EE.UU. investiga también si Warner desvió a cuentas de su uso personal 750.000 dólares estadounidenses destinados a las víctimas del terremoto de Haití de 2010, según citó este martes la cadena británica BBC.
Ese medio de comunicación alega que Warner recibió esos fondos de la FIFA y la federación coreana de fútbol con el propósito de ayudar a reconstruir el país tras el desastre.
Por otra parte, el actual secretario general de la FIFA, Jérome Valcke, negó hoy que la organización tenga algo que ver con los 10 millones de dólares que en 2008 Warner habría recibido a cambio de su apoyo a Sudáfrica como sede del Mundial de Fútbol en 2010, tal y como denunció recientemente el expresidente del Comité Organizador de aquella competición, Danny Jordaan.
Según Jordaan, los 10 millones de dólares se pagaron a la Confederación de Fútbol de América del Norte, Central y el Caribe (Concacaf) para promover el desarrollo del fútbol en la zona. Sin embargo, según la investigación del FBI, Warner, que era entonces presidente de la Concacaf, recibió el supuesto soborno para votar por Sudáfrica y conseguir el apoyo para esta candidatura de otros dos miembros con derecho a voto.