Presidente de Irán presiona a los elementos de línea dura
Teherán, AP
El presidente de Irán ha rechazado la idea de que los policías hagan cumplir reglas de moralidad, asumiendo una posición clara contra los elementos de línea dura que en su mayoría se oponen a su acercamiento a Occidente.
El presidente Hassan Ruhani ha hecho declaraciones contra la idea dos veces en días recientes, incluido el lunes en un discurso transmitido por la televisión estatal, en el que dijo que la policía debe ser responsable de hacer cumplir las leyes, no diferentes interpretaciones del islam.
La semana pasada, el ayatolá Mohamed Yazdi, jefe de la poderosa Asamblea de Expertos, dijo que el poder ejecutivo del país debe hacer cumplir las leyes del islam, o de otra manera la religión lo rechazará.
Los comentarios ocurren antes de la llegada del verano, cuando los elementos de línea dura quieren que las mujeres usen el velo según sus normas. Pero también ocurren en momentos que esos mismos elementos se oponen al acercamiento de Ruhani al Occidente y las negociaciones con potencias mundiales sobre el programa nuclear del país.
El presidente de Irán ha rechazado la idea de que los policías hagan cumplir reglas de moralidad, asumiendo una posición clara contra los elementos de línea dura que en su mayoría se oponen a su acercamiento a Occidente.
El presidente Hassan Ruhani ha hecho declaraciones contra la idea dos veces en días recientes, incluido el lunes en un discurso transmitido por la televisión estatal, en el que dijo que la policía debe ser responsable de hacer cumplir las leyes, no diferentes interpretaciones del islam.
La semana pasada, el ayatolá Mohamed Yazdi, jefe de la poderosa Asamblea de Expertos, dijo que el poder ejecutivo del país debe hacer cumplir las leyes del islam, o de otra manera la religión lo rechazará.
Los comentarios ocurren antes de la llegada del verano, cuando los elementos de línea dura quieren que las mujeres usen el velo según sus normas. Pero también ocurren en momentos que esos mismos elementos se oponen al acercamiento de Ruhani al Occidente y las negociaciones con potencias mundiales sobre el programa nuclear del país.