Chile sale a replicar alegatos de Bolivia en la CIJ en crisis y con Muñoz sin saber si se queda o no
La Haya, HOLANDA, ABI
Chile se preparaba para contestar este jueves en La Haya los alegatos de Bolivia de la víspera en medio de la confusión que sembró la decisión de su presidente, Michelle Bachelet, que en un intento por superar la crisis política que envuelve su gobierno, pidió la renuncia de todo su gabinete, inclusive el canciller Heraldo Muñoz, que comanda las actuaciones del equipo jurídico chileno en la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
"Estoy concentrado en defender el interés nacional. No me puedo referir a decisiones que le competen a la Presidenta", dijo Muñoz cuando los periodistas chilenos preguntaron sobre su situación laboral y la crisis política que asalta su país, según la estatal Televisión Nacional de Chile.
De acuerdo con este mismo medio, la versión de que el Canciller fue ratificado no fue oficializada por La Moneda que intenta capear una crisis de legitimidad, en momentos en que la impopularidad de Bachelet se acercaba a 65%.
Acorralada por denuncias de corrupción que salpican a su hijo y nuera, la Presidente demandó el miércoles la renuncia de todos sus ministros, mas su decisión no precisó si incluía a Muñoz que, según Televisión Nacional de Chile, recibió el espaldarazo de los parlamentarios incluso de la oposición de derechas.
En tanto el agente de Chile ante la CIJ, Felipe Bulnes remarcó en La Haya que su país respondería de manera "contundente" a los alegatos presentados por Bolivia.
Chile, por vía de Muñoz, tachó de "ficción" la basa de los alegatos bolivianos expuesta el miércoles ante la CIJ.
"Mantenemos plena confianza, no hemos oído ningún argumento distinto a su respuesta escrita", agregó Bulnes, mientras que el asesor chileno Alberto van Klaveren dijo que, pese a todo, el equipo chileno "estaba tranquilo".
"No hay que asustarse, lo que importa son los planteamientos de fondo y estamos muy tranquilos. No hay ningún elemento sorpresivo. Tenemos respuesta para todos ellos", afirmó a su turno
El coagente chileno Claudio Grossman enfatizó que "no hay ninguna novedad" en lo planteado por Bolivia. "Es lo que se esperábamos", apuntó.
Bolivia en tanto esperaba expectante la réplica de Chile anotada para las 10h30 bolivianas, luego de escuchar los alegatos de su agente y abogados que pusieron en el centro de la mira la tesis chilena de que la demanda boliviana apunta a revisar el Tratado de paz y límites de 1904.
Bolivia pidió que Chile asuma los compromisos escritos que firmó durante 7 décadas del siglo XX y que no obstante pasó por alto a la hora de concretarlo.
El agente ante la CIJ y expresidente boliviano, Eduardo Rodríguez Veltzé, dijo ante los magistrados de la CIJ que, "sencillamente lo que pide Bolivia, como se manifiesta en su solicitud, es que Chile cumpla su obligación, respete sus promesas, su acuerdo de negociar un acceso con soberanía al mar un acuerdo independiente al Tratado de 1904".
Explicó que Chile "reafirmó una y otra vez que, con independencia del tratado de 1904, negociaría este acceso con plena soberanía por parte de Bolivia al mar y reconocía que el haber negado este acceso soberano seguía siendo una injusticia histórica contra Bolivia que socavaba su desarrollo y que impedía el que se desarrollasen relaciones amistosas entre dos estados vecinos".
El portavoz internacional de la demanda marítima, Carlos Mesa, salió al paso de los argumentos de Chile y señaló que el objeto de la demanda boliviana es demostrar que las autoridades chilenas ofrecieron de manera voluntaria a Bolivia una salida soberana al mar y que de ninguna manera pretende poner en tela de juicio el Tratado de Paz y Amistad de 1904.
"El objeto (de la demanda) no es poner en tela de juicio el Tratado de 1904, es demostrar que las autoridades chilenas, presidentes, ministros y embajadores a lo largo del tiempo establecieron una línea de negociación con Bolivia ofreciéndole a Bolivia un acceso soberano al mar", indicó.
Chile se preparaba para contestar este jueves en La Haya los alegatos de Bolivia de la víspera en medio de la confusión que sembró la decisión de su presidente, Michelle Bachelet, que en un intento por superar la crisis política que envuelve su gobierno, pidió la renuncia de todo su gabinete, inclusive el canciller Heraldo Muñoz, que comanda las actuaciones del equipo jurídico chileno en la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
"Estoy concentrado en defender el interés nacional. No me puedo referir a decisiones que le competen a la Presidenta", dijo Muñoz cuando los periodistas chilenos preguntaron sobre su situación laboral y la crisis política que asalta su país, según la estatal Televisión Nacional de Chile.
De acuerdo con este mismo medio, la versión de que el Canciller fue ratificado no fue oficializada por La Moneda que intenta capear una crisis de legitimidad, en momentos en que la impopularidad de Bachelet se acercaba a 65%.
Acorralada por denuncias de corrupción que salpican a su hijo y nuera, la Presidente demandó el miércoles la renuncia de todos sus ministros, mas su decisión no precisó si incluía a Muñoz que, según Televisión Nacional de Chile, recibió el espaldarazo de los parlamentarios incluso de la oposición de derechas.
En tanto el agente de Chile ante la CIJ, Felipe Bulnes remarcó en La Haya que su país respondería de manera "contundente" a los alegatos presentados por Bolivia.
Chile, por vía de Muñoz, tachó de "ficción" la basa de los alegatos bolivianos expuesta el miércoles ante la CIJ.
"Mantenemos plena confianza, no hemos oído ningún argumento distinto a su respuesta escrita", agregó Bulnes, mientras que el asesor chileno Alberto van Klaveren dijo que, pese a todo, el equipo chileno "estaba tranquilo".
"No hay que asustarse, lo que importa son los planteamientos de fondo y estamos muy tranquilos. No hay ningún elemento sorpresivo. Tenemos respuesta para todos ellos", afirmó a su turno
El coagente chileno Claudio Grossman enfatizó que "no hay ninguna novedad" en lo planteado por Bolivia. "Es lo que se esperábamos", apuntó.
Bolivia en tanto esperaba expectante la réplica de Chile anotada para las 10h30 bolivianas, luego de escuchar los alegatos de su agente y abogados que pusieron en el centro de la mira la tesis chilena de que la demanda boliviana apunta a revisar el Tratado de paz y límites de 1904.
Bolivia pidió que Chile asuma los compromisos escritos que firmó durante 7 décadas del siglo XX y que no obstante pasó por alto a la hora de concretarlo.
El agente ante la CIJ y expresidente boliviano, Eduardo Rodríguez Veltzé, dijo ante los magistrados de la CIJ que, "sencillamente lo que pide Bolivia, como se manifiesta en su solicitud, es que Chile cumpla su obligación, respete sus promesas, su acuerdo de negociar un acceso con soberanía al mar un acuerdo independiente al Tratado de 1904".
Explicó que Chile "reafirmó una y otra vez que, con independencia del tratado de 1904, negociaría este acceso con plena soberanía por parte de Bolivia al mar y reconocía que el haber negado este acceso soberano seguía siendo una injusticia histórica contra Bolivia que socavaba su desarrollo y que impedía el que se desarrollasen relaciones amistosas entre dos estados vecinos".
El portavoz internacional de la demanda marítima, Carlos Mesa, salió al paso de los argumentos de Chile y señaló que el objeto de la demanda boliviana es demostrar que las autoridades chilenas ofrecieron de manera voluntaria a Bolivia una salida soberana al mar y que de ninguna manera pretende poner en tela de juicio el Tratado de Paz y Amistad de 1904.
"El objeto (de la demanda) no es poner en tela de juicio el Tratado de 1904, es demostrar que las autoridades chilenas, presidentes, ministros y embajadores a lo largo del tiempo establecieron una línea de negociación con Bolivia ofreciéndole a Bolivia un acceso soberano al mar", indicó.