Ya nadie canta a Casillas en el Santiago Bernabéu

Madrid, Ecodiario
El Real Madrid volvió ayer al Santiago Bernabéu. Después de la buena imagen dada ante el Barça y el parón de las selecciones, amén del horario festivo-matinal, las tensiones de otras jornadas desaparecieron. No fue una jornada para críticas internas. Más bien todo lo contrario. El 9-1 final borró cualquier atisbo de divorcio entre plantilla y afición. O casi. Sólo las tensiones contra Iker Casillas permanecen como reminiscencia constante de ese complicado matrimonio que conforman el público blanco y el capitán merengue. Ayer, ante los andaluces, el arquero se llevó la única pitada del partido y constató, para su desaliento, que es el único nombre de peso al que nadie canta desde sus propias gradas.


Porque este partido sirvió, además de para ver a un recuperado Jamés o a un hambriento Cristiano, para que buena parte del equipo recibiera los mismos de los suyos. Alentados por la nueva 'Grada Joven', el público alentó a los suyos uno a uno. El primero fue Cristiano Ronaldo, obvio.

La hinchada coreó el ya famoso "Lolo, lololo, lololo, Cristiano Ronaldo" al ritmo del 'Rumore, rumore' de Rafaella Carrá. Luego, con cada gol, el público acompañaba el también famoso "Uhhhhhhhh" del portugués.

Más tarde aparecieron los mismos ánimos para Bale, Modric, Benzema, Kroos, James, éstos tres después de ser sustituidos. Sergio Ramos tuvo su momento de gloria cuando, en cada córner, se cantaba "Y Sergio Ramos marca gol" con la esperanza de que alguno de sus testarazos se colase en la puerta.

Hasta Arbeloa recibió el mimo del respetable (sobre todo el que procedía de la 'Grada Joven') tras un fallo en una entrega. Sus declaraciones entre semana alimentaron este apoyo incondicional.

Su caso, con todo, contrasta con el de Casillas. Por algo parecido él fue silbado. Sucedió cuando una mala entrega a Marcelo acabó en despiste del defensa. El Granada robó la pelota y generó una clara ocasión de gol. Fue entonces cuando empezaron a escucharse los pitos contra Casillas. Fue lo único que se oyó en torno a su figura. Ni un reclamo a su favor.

Arbeloa, curiosamente, trató de negar la carencia de apoyo hacia el capitán. "¿Por qué no se canta a Casillas?", le cuestionaron en la zona mixta. "Eso no es así. Yo he visto al Bernabéu cantar muchas veces 'Iker, Iker'", respondió sin hacer mención a cuándo escuchó esos cánticos. Ayer, ante el Granada, no se produjeron. En verdad hace tiempo que no se escuchan en las gradas del coliseo merengue.