La Fiscal dice que González no puede defender a los opositores venezolanos
Luisa Ortega Díaz advierte que las leyes venezolanas impiden participar del proceso penal al exjefe del gobierno español
Alfredo Meza
Caracas, El País
La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, ha asegurado este domingo que el exjefe del gobierno Felipe González no puede incorporarse a la defensa del opositor venezolano Leopoldo López, quien está siendo juzgado como principal instigador de las protestas desarrolladas entre febrero y junio de 2014 contra el régimen de Nicolás Maduro.
La postura de Ortega Díaz, cuyo despacho responde a las órdenes del Ejecutivo venezolano, parte de la interpretación del Código Orgánico Procesal Penal (COOP) y la Ley del Ejercicio de las Profesiones en el país. “No es posible que vengan personas del exterior como consultores técnicos para la defensa de un detenido. No es posible porque no se ajusta al ordenamiento jurídico”, ha reiterado en un programa de la televisión local de Caracas. En todo caso esta postura choca con la interpretación de los representantes legales de López y del propio González, quien ha dicho que el ordenamiento jurídico vigente faculta a los defensores para que sumen al equipo a asesores técnicos sin importar la nacionalidad.
El sábado Maduro dio un paso atrás en su polémica con España al tender un puente para que se normalicen las relaciones diplomáticas, afectadas por las acusaciones hechas por Caracas sobre la supuesta intervención de Madrid en los asuntos internos de Venezuela. “Aquí está mi mano, Rajoy”, dijo el presidente venezolano, con la mira puesta en la venidera cumbre entre los países de América Latina y Europa. El jefe de estado venezolano ha recibido con agrado las declaraciones de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, quien aseguró el viernes que Madrid está dispuesta a dialogar con Caracas sobre la base del respeto mutuo y al margen de las profundas diferencias que mantienen.
El presidente de España ha recibido a las esposas de los opositores venezolanos Leopoldo López y Antonio Ledezma, un gesto que no ha caído nada bien en Caracas. El apoyo de la mayoría de los diputados españoles a la causa de ambos ha terminado por quebrar las ya precarias relaciones entre ambos países. Desde la semana pasada el representante de Madrid en Caracas, José Antonio Pérez Hernández y Torra, regresó a España llamado a consultas por la cancillería.
Alfredo Meza
Caracas, El País
La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, ha asegurado este domingo que el exjefe del gobierno Felipe González no puede incorporarse a la defensa del opositor venezolano Leopoldo López, quien está siendo juzgado como principal instigador de las protestas desarrolladas entre febrero y junio de 2014 contra el régimen de Nicolás Maduro.
La postura de Ortega Díaz, cuyo despacho responde a las órdenes del Ejecutivo venezolano, parte de la interpretación del Código Orgánico Procesal Penal (COOP) y la Ley del Ejercicio de las Profesiones en el país. “No es posible que vengan personas del exterior como consultores técnicos para la defensa de un detenido. No es posible porque no se ajusta al ordenamiento jurídico”, ha reiterado en un programa de la televisión local de Caracas. En todo caso esta postura choca con la interpretación de los representantes legales de López y del propio González, quien ha dicho que el ordenamiento jurídico vigente faculta a los defensores para que sumen al equipo a asesores técnicos sin importar la nacionalidad.
El sábado Maduro dio un paso atrás en su polémica con España al tender un puente para que se normalicen las relaciones diplomáticas, afectadas por las acusaciones hechas por Caracas sobre la supuesta intervención de Madrid en los asuntos internos de Venezuela. “Aquí está mi mano, Rajoy”, dijo el presidente venezolano, con la mira puesta en la venidera cumbre entre los países de América Latina y Europa. El jefe de estado venezolano ha recibido con agrado las declaraciones de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, quien aseguró el viernes que Madrid está dispuesta a dialogar con Caracas sobre la base del respeto mutuo y al margen de las profundas diferencias que mantienen.
El presidente de España ha recibido a las esposas de los opositores venezolanos Leopoldo López y Antonio Ledezma, un gesto que no ha caído nada bien en Caracas. El apoyo de la mayoría de los diputados españoles a la causa de ambos ha terminado por quebrar las ya precarias relaciones entre ambos países. Desde la semana pasada el representante de Madrid en Caracas, José Antonio Pérez Hernández y Torra, regresó a España llamado a consultas por la cancillería.