El Gobierno keniano afirma que no se dejará “intimidar por los terroristas”
El presidente de Somalia llama a reforzar la cooperación bilateral antiterrorista tras el peor ataque de Al Shabab en Kenia
Agencias
GARISSA / Mogadiscio
Kenia no se va a dejar “intimidar por los terroristas”. Así lo ha dejado claro esta mañana el ministro keniano del Interior, Joseph Nkaissery, un día después del peor ataque yihadista en el país africano, en el que murieron 147 personas, gran parte de ellos estudiantes, en un ataque de la milicia islamista somalí de Al Shabab a la Universidad de Garissa, en el este de Kenia y fronteriza con Somalia. Mientras, el Gobierno somalí ha llamado a reforzar la cooperación con su vecino contra los islamistas.
“El Gobierno keniano no se dejará intimidar por los terroristas que han decidido asesinar a inocentes para humillar al Gobierno”, ha declarado Nkaissery, que ha visitado la universidad atacada en Garissa. Cinco milicianos de Al Shabab irrumpieron este jueves por la mañana en el centro educativo, donde la mayoría de los estudiantes dormía, y tomaron a cientos de ellos como rehenes en las residencias. El ejército lanzó una operación de rescate al cabo de unas horas y, a su final, informó de la muerte de 147 personas, entre ellas cuatro de los cinco terroristas.
De "brutalidad" ha hablado este viernes el papa Francisco, que ha condenado el ataque. "Su Santidad condena este acto de brutalidad sin sentido y reza por un cambio de actitud entre sus autores", se lee en un telegrama de pésame que el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolín, ha enviado en nombre del pontífice al arzobispo de Nairobi. En el mensaje, el Papa se muestra "profundamente entristecido" por las 147 muertes y urge a las autoridades para "redoblar sus esfuerzos" con el objetivo de "poner fin a la violencia" en Kenia.
Al Shabab (Los Jóvenes), una milicia islamista implantada en Somalia, reivindicó el ataque. El presidente somalí, Hassan Sheikh Mohamud, ha condenado hoy el “bárbaro” asalto a la universidad y ha llamado a reforzar la cooperación mutua en materia de seguridad. El ataque, ha declarado, “muestra la necesidad de reforzar la cooperación antiterrorista entre los dos países, con el objetivo de eliminar esta amenaza de la región”.
Agencias
GARISSA / Mogadiscio
Kenia no se va a dejar “intimidar por los terroristas”. Así lo ha dejado claro esta mañana el ministro keniano del Interior, Joseph Nkaissery, un día después del peor ataque yihadista en el país africano, en el que murieron 147 personas, gran parte de ellos estudiantes, en un ataque de la milicia islamista somalí de Al Shabab a la Universidad de Garissa, en el este de Kenia y fronteriza con Somalia. Mientras, el Gobierno somalí ha llamado a reforzar la cooperación con su vecino contra los islamistas.
“El Gobierno keniano no se dejará intimidar por los terroristas que han decidido asesinar a inocentes para humillar al Gobierno”, ha declarado Nkaissery, que ha visitado la universidad atacada en Garissa. Cinco milicianos de Al Shabab irrumpieron este jueves por la mañana en el centro educativo, donde la mayoría de los estudiantes dormía, y tomaron a cientos de ellos como rehenes en las residencias. El ejército lanzó una operación de rescate al cabo de unas horas y, a su final, informó de la muerte de 147 personas, entre ellas cuatro de los cinco terroristas.
De "brutalidad" ha hablado este viernes el papa Francisco, que ha condenado el ataque. "Su Santidad condena este acto de brutalidad sin sentido y reza por un cambio de actitud entre sus autores", se lee en un telegrama de pésame que el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolín, ha enviado en nombre del pontífice al arzobispo de Nairobi. En el mensaje, el Papa se muestra "profundamente entristecido" por las 147 muertes y urge a las autoridades para "redoblar sus esfuerzos" con el objetivo de "poner fin a la violencia" en Kenia.
Al Shabab (Los Jóvenes), una milicia islamista implantada en Somalia, reivindicó el ataque. El presidente somalí, Hassan Sheikh Mohamud, ha condenado hoy el “bárbaro” asalto a la universidad y ha llamado a reforzar la cooperación mutua en materia de seguridad. El ataque, ha declarado, “muestra la necesidad de reforzar la cooperación antiterrorista entre los dos países, con el objetivo de eliminar esta amenaza de la región”.