¿Cómo América se convirtió en el primer continente sin rubeola?
Redacción, BBC
Han sido más de 15 años de trabajo pero el hemisferio occidental se acaba de convertir en la primera región del mundo en eliminar la rubeola, una enfermedad que llegó a afectar a más de 150.000 personas en las Américas en los años noventa y puede causar discapacidades de por vida.
En los últimos cinco años no ha habido casos endémicos – las últimas infecciones fueron registradas en Argentina y Brasil en 2009 – por lo que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) anunció este miércoles que el continente está libre de esta enfermedad.
La eliminación de la rubeola y del síndrome congénito de rubeola, no ha sido tarea fácil, según contó a BBC Mundo Carlos Castillo Solorzano, quien fue jefe del proyecto de la eliminación de rubeola y sarampión de la OPS desde 2003 hasta el año pasado y ahora es representante del organismo en Paraguay.
La rubeola es causada por un virus que se propaga a través del aire o por contacto cercano, que en el caso de las mujeres embarazadas puede causar malformaciones congénitas o incluso aborto.
“Empezamos a estudiar cuántos niños en las Américas estaban naciendo con rubeola congénita”, contó Castillo.
Los estudios y la búsqueda retrospectiva de datos mostraron que en América Latina y el Caribe nacían anualmente entre 16.000 y 20.000 niños con síndrome de rubeola congénita. Además sólo en 1997 se registraron más de 158.000 casos de rubeola.
Los países de la OPS pusieron en marcha estrategias de vacunación para reducir el número de casos nuevos e interrumpir la transmisión por contagio para ampliar la vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubeola (SPR), también conocida como triple viral, a lo largo del continente.
Entre 2003 y 2010 se vacunó a unos 250 millones de personas, incluidos niños, mujeres y hombres hasta los 39 años, dentro de esta campaña que no sólo contribuyó a acabar con la rubeola sino que ayudó a generar una cultura de prevención.
“Además de eliminar una enfermedad que genera discapacidad es una ganancia para el programa de inmunizaciones y la salud de la población de las Américas”, aseguró Castillo que subrayó la importancia de mantener la vacunación puesto que no se puede descartar que pueda haber casos importados.
“En un mundo global en seis horas de vuelo podemos estar de un punto a otro del planeta”, señala Castillo, que enfatiza que lo importante es estar bien preparados.
Y para eso se las ingenió no sólo para que el público se acercara a recibir la inyección sino que salieron a las calles para ponérselo más fácil. Además de acudir a escuelas, universidades y centros de trabajo, equipos de sanitario visitaron tiendas en Sao Paulo, instalaron puestos móviles en la hora punta de los metros de Buenos Aires y México; y hasta abrieron puestos de vacunación en el mítico estadio de Maracaná, en Rio de Janeiro.
“Se quería llegar adonde estaba la gente”, asegura Castillo.
Este logro que histórico se une a otros éxitos similares como la eliminación de la viruela en 1971 y de la poliomielitis en 1994. Dos hitos en los que el continente también fue primero a nivel mundial.
“La eliminación de la rubeola de las Américas es un logro histórico que refleja la voluntad colectiva de los países de nuestra región de trabajar juntos para lograr metas ambiciosas de salud pública”, dijo Carissa F. Etienne, Directora de la OPS en una rueda de prensa en Washington.
Aunque el virus suele causar infecciones leves o asintomáticas en niños y adultos, cuando una mujer la contrae al comienzo de su embarazo, puede causar un aborto involuntario o el síndrome de rubeola congénita, que implica defectos de nacimiento como la ceguera, sordera y problemas cardíacos congénitos.
En Estados Unidos, unos 20.000 bebés nacieron con el síndrome de rubeola congénita durante el último mayor brote de rubeola (1964-1965).
Desde sus comienzos en 2003, se ha vacunado a más de 519 millones de personas contra más de veinte enfermedades, incluyendo rubeola, sarampión, difteria, tétanos y tos ferina.
Han sido más de 15 años de trabajo pero el hemisferio occidental se acaba de convertir en la primera región del mundo en eliminar la rubeola, una enfermedad que llegó a afectar a más de 150.000 personas en las Américas en los años noventa y puede causar discapacidades de por vida.
En los últimos cinco años no ha habido casos endémicos – las últimas infecciones fueron registradas en Argentina y Brasil en 2009 – por lo que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) anunció este miércoles que el continente está libre de esta enfermedad.
Del sarampión a la rubeola
Su equipo trabajando en la eliminación del sarampión en la región en los años noventa cuando “encontramos que habían casos sospechosos como sarampión pero en el laboratorio se vio que era rubeola”, explicó Castillo.La rubeola es causada por un virus que se propaga a través del aire o por contacto cercano, que en el caso de las mujeres embarazadas puede causar malformaciones congénitas o incluso aborto.
Los estudios y la búsqueda retrospectiva de datos mostraron que en América Latina y el Caribe nacían anualmente entre 16.000 y 20.000 niños con síndrome de rubeola congénita. Además sólo en 1997 se registraron más de 158.000 casos de rubeola.
Evaluación
Los expertos evaluaron el costo de esta enfermedad para las arcas públicas y llegaron a la conclusión que si los países invertían unos US$200 millones en campañas de vacunación podrían ahorrar US$3.000 millones en el tratamiento de estos niños.Los países de la OPS pusieron en marcha estrategias de vacunación para reducir el número de casos nuevos e interrumpir la transmisión por contagio para ampliar la vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubeola (SPR), también conocida como triple viral, a lo largo del continente.
“Además de eliminar una enfermedad que genera discapacidad es una ganancia para el programa de inmunizaciones y la salud de la población de las Américas”, aseguró Castillo que subrayó la importancia de mantener la vacunación puesto que no se puede descartar que pueda haber casos importados.
“En un mundo global en seis horas de vuelo podemos estar de un punto a otro del planeta”, señala Castillo, que enfatiza que lo importante es estar bien preparados.
Vacunarse en el Maracaná
En 1998 solo diez países incluían la rubeola en su vacunación. El objetivo para la OPS estaba claro: había que ampliar programas nacionales de inmunización de la región.Y para eso se las ingenió no sólo para que el público se acercara a recibir la inyección sino que salieron a las calles para ponérselo más fácil. Además de acudir a escuelas, universidades y centros de trabajo, equipos de sanitario visitaron tiendas en Sao Paulo, instalaron puestos móviles en la hora punta de los metros de Buenos Aires y México; y hasta abrieron puestos de vacunación en el mítico estadio de Maracaná, en Rio de Janeiro.
“Se quería llegar adonde estaba la gente”, asegura Castillo.
“La eliminación de la rubeola de las Américas es un logro histórico que refleja la voluntad colectiva de los países de nuestra región de trabajar juntos para lograr metas ambiciosas de salud pública”, dijo Carissa F. Etienne, Directora de la OPS en una rueda de prensa en Washington.
Brotes generalizados
La rubeola causó brotes generalizados en las Américas antes de la introducción de la vacuna triple viral.Aunque el virus suele causar infecciones leves o asintomáticas en niños y adultos, cuando una mujer la contrae al comienzo de su embarazo, puede causar un aborto involuntario o el síndrome de rubeola congénita, que implica defectos de nacimiento como la ceguera, sordera y problemas cardíacos congénitos.
En Estados Unidos, unos 20.000 bebés nacieron con el síndrome de rubeola congénita durante el último mayor brote de rubeola (1964-1965).
Semana de vacunación
El anuncio se produce coincidiendo con la celebración esta semana de la XIII Semana de Vacunación en las Américas, cuyo objetivo es concienciar sobre la importancia de la inmunización y llegar a quienes viven zonas marginales o en comunidades fronterizas.Desde sus comienzos en 2003, se ha vacunado a más de 519 millones de personas contra más de veinte enfermedades, incluyendo rubeola, sarampión, difteria, tétanos y tos ferina.