Tarea para 'El Jefecito'

Barcelona, Marca
Al Barcelona se le acabó en El Madrigal la buena suerte con las lesiones. Antes de visitar Villarreal, Luis Enrique tenía argumentos para presumir de enfermería poca concurrida, pero una entrada desafortunada de Tomás Pina detuvo la racha y mandó a Sergio Busquets al traumatólogo.
Según el parte oficial del Barça, el centrocampista de Badia sufre "una lesión en la sindesmosis del tobillo derecho". El club se limitó a fusilar lo que Ricard Pruna observó a pie de césped. Las pruebas de ayer por la mañana confirmaron el primer diagnóstico y descartaron al futbolista para el partido de este domingo ante el Rayo Vallecano en el Camp Nou. Hasta ahí la versión oficial. Lo que pase luego en Eibar o contra el Manchester City y el Real Madrid está en duda.


Busquets, según ha podido saber MARCA, tampoco podrá jugar en Ipurua y prácticamente está descartado para reaparecer en la Champions contra los de Pellegrini. Tanto él como los médicos trabajan con el objetivo del Clásico del próximo 22 de marzo, pero la lesión, que en todo caso es bastante menos grave de lo que se temía en primera instancia, normalmente necesitaría más tiempo de recuperación del que falta para el choque que puede decantar la Liga. La importancia de la cita y el plus de "compromiso y actitud" de Busquets mantendrán en ascuas a Luis Enrique.

Fuentes médicas advierten que las sensaciones del jugador serán claves cuando pasen cuatro o cinco días, baje la hinchazón y el reposo relativo dé paso al tratamiento específico de la zona afectada.

Samper, al primer equipo
A diferencia de lo que sucedía el curso pasado con Song, puede decirse que el sustituto de Busquets es fiable. De hecho, podría añadirse que es una prolongación del técnico en el campo. Un indiscutible que combina participaciones entre la defensa y el pivote. Hablamos de Mascherano, titular en 29 partidos esta temporada y pieza fundamental del equipo. Su falta de toque la compensará Samper, que dejará el filial por un tiempo.