Se abre compás de espera para liberación del periodista Carlos Quisbert

La Paz, ANF
El consenso entre autoridades y periodistas en el sentido de que la detención del reportero de "El Diario", Carlos Quisbert, fue un acto de abuso judicial y policial, ha dado pie a un compás de espera rumbo a su liberación. Hugo Moldiz, ministro de Gobierno, publicó este martes en su cuenta de Twitter que se está “coordinando con la Fiscalía general para liberar a periodista injustamente detenido”. Quisbert está detenido preventivamente en la cárcel de San Pedro acusado de obstaculizar la justicia en el caso de la muerte del bebé Alexander. Este miércoles a las tres de la tarde, se ha convocado a la audiencia de la acción de libertad, presentada por la Asociación Nacional de la Prensa (ANP), al cabo de la cual podría determinarse la libertad de Quisbert.


A través de un comunicado de prensa, el fiscal General Ramiro Guerrero informó este martes que una comisión de fiscales llegará a la ciudad de La Paz para revisar el cuaderno de investigaciones del caso de Quisbert. Moldiz coincidió con Guerrero en que se se deben hacer las gestiones legales para su liberación.

“Vamos a trabajar en las próximas horas y hacer las gestiones judiciales para que ojalá mañana mismo (por hoy) lo tengamos al periodista gozando su plena y absoluta libertad”, declaró Moldiz.

La Asociación Nacional de la Prensa (ANP) presentó una acción de libertad ante las instancias correspondientes señalando que esta detención fue un atropello. Lo mismo hizo "El Diario", el medio en el que trabaja Quisbert y dio un plazo de 48 horas para que se convoque a la audiencia. En caso contrario se anunciaron otras medidas.

La Asociación de Periodistas de La Paz (APLP) se declaró en emergencia por este caso. “Algo se está tapando”, conjeturó la presidenta de esta entidad, Lupe Cajías.

Los hechos

Este domingo, el periodista Quisbert fue a visitar a una de las imputadas en el caso de la muerte del bebé Alexander de nombre Madeleine Pahe, al penal de Qalahuma, en Viacha. En esa visita, el periodista quiso entregarle dos cartas de una persona de confianza. Sin embargo, ella le dijo a los policías que no conocía a Quisbert y éstos infirieron una intromisión en el caso. Es así que en circunstancias todavía no esclarecidas, el periodista fue detenido y trasladado a las celdas de la FELCC en El Alto. La jueza Lorena Camacho lo envió entonces a la cárcel de San Pedro en menos de 24 horas.

El fiscal Antonio Vargas realizó la denuncia por la presunta obstrucción de justicia al haber habido la intención de entregar las cartas. La base legal para ello sería el artículo 32 de la Ley de lucha contra la Corrupción, Enriquecimiento ilícito e investigación de Fortunas “Marcelo Quiroga Santa Cruz”, la cual, sin embargo, se aplica a funcionarios públicos.

El artículo 32 establece que quien "utilice fuerza física, amenazas, intimidación promesas, ofrecimiento a la concesión de un beneficio indebido para inducir a una persona a prestar falso testimonio u obstaculizar la prestación de testimonio o la aportación de pruebas en procesos por delitos de corrupción, será sancionado con privación de libertad de tres a ocho años y multa de treinta a quinientos días".

Según la red Erbol, la primera carta que Quisbert pensaba entregar decía:“Amigas estamos calladas asumiendo un error ajeno, por lo que pido tengas confianza en el joven Carlos, yo le conté toda la verdad, no tengo yo nada que perder, porque me despidieron sin derecho a nada, me siento mal. Te pido que seamos unidas, no lo fuimos al principio, pero tengo que dar mi vida para que se sepa la verdad, esta es mi posición, atentamente, tu amiga”.

La segunda carta reza lo siguiente: “Lola, yo confío en ti y mucho, sé fuerte, la verdad saldrá a la luz, conté todo lo que pasó al periodista Carlos, hazlo tu también para que crean (vean) como proceden los fiscales y las mentiras que dicen, confía en Dios”.

El abogado defensor del periodista comentó a Erbol que en el contenido de las misivas no se induce en ningún momento a decir algo falso sobre el caso y sólo se pide aclarar la verdad.

Entre las irregularidades que rodearon la detención de Quisbert está que no pudo contactarse con su familia en las primeras 24 horas del arresto y que no tuvo la oportunidad de presentar los documentos que acrediten que tenía casa y trabajo para contar con medidas sustitutivas.Al no estar disponible esa documentación, se presumió riesgo de fuga y por eso fue recluido en la cárcel.

La abogada de Quisbert, Paola Barriga, dijo a la revista Oxígeno, que existen deficiencias en las investigaciones del caso y hay constantes cambios en los investigadores y algunos fiscales no quieren continuar con el caso. “Se tiene un cambio precipitado no sólo de investigadores, sino de fiscales. Se está perjudicando la investigación y ahora no saben a dónde apuntar, quizá justificando estos términos pretenden seguir dilatando este proceso para que la sociedad se olvide y prueba de ello van a cercenar la voz de la prensa”, manifestó Barriga.

Los periodistas de La Paz, Cochabamba, El Alto y Sucre se movilizaron para protestar y este miércoles la Confederación de Trabajadores Sindical de Trabajadores de la Prensa de Bolivia convocó a una movilización nacional de emergencia por diferentes calles.

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