Papa Francisco pide a mafiosos de Nápoles que se arrepientan

Nápoles, Reuters
El Papa Francisco llamó a los miembros del crimen organizado a abandonar la violencia y la explotación y a poner fin a las "lágrimas de las madres de Nápoles" tras visitar el sábado uno de los barrios más violentos y afectados por las drogas de la ciudad italiana.


Francisco, en un viaje de un día a la ciudad del sur de Italia, también denunció la corrupción política en un discurso pronunciado ante una multitud en el barrio de Scampia, bastión de los clanes de la Camorra, la versión en Nápoles de la mafia siciliana.

El Papa pronunció su discurso al lado de un proyecto inmobiliario conocido como Le Vele, tan peligroso que incluso la policía tiene miedo de entrar, según los residentes.

El pontífice instó a los residentes del área a no dejar que los criminales los despojen de su esperanza.

Más tarde, en una misa en el centro de Nápoles, Francisco instó a los napolitanos a "reaccionar firmemente ante organizaciones que explotan y corrompen a los jóvenes, que explotan a los pobres y a los débiles con un narcotráfico cínico y otros crímenes".

"A los criminales y a todos sus cómplices, hoy les repito, humildemente y como un hermano: conviértanse unos a otros al amor y la justicia. Es posible volver a la honestidad. Las lágrimas de las madres de Nápoles se los piden", declaró.

Desde su elección hace dos años, Francisco -que renunció a los espaciosos departamentos papeles usados por sus predecesores y vive en un pequeño apartamento en una casa de huéspedes en el Vaticano- ha hecho de la defensa de los pobres y de los más débiles de la sociedad una plataforma clave de su papado.

También ha dicho que los miembros del crimen organizado se excomulgan a sí mismos de la Iglesia y que ésta los recibiría de vuelta si se arrepienten.

En Scampia, las drogas se venden abiertamente y el desempleo entre los jóvenes supera el 40 por ciento.

El Papa también habló en defensa de los inmigrantes, diciendo que no pueden ser considerados como "seres humanos de segunda clase", pidió sueldos justos para los trabajadores y criticó a la corrupción en la vida pública

"¡Cuánta corrupción existe en el mundo! Yo espero que ustedes tengan el coraje (...) de limpiar a la ciudad y a la sociedad para que ya no exista ese hedor de corrupción", comentó.

Francisco emitió sus críticas un día después de la renuncia del ministro de Transportes de Italia, Maurizio Lupi, en medio de la investigación sobre sobornos en licitaciones de obras públicas.

Lupi ha negado haber incurrido en cualquier irregularidad.

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