El Madrid mete dos goles menos por partido que en 2014
El equipo de Ancelotti cerró las 15 jornadas de 2014 con 3,6 goles por partido y en las 12 que ha disputado este ha bajado a 1,6. Desde febrero, incluso baja a un gol por choque…
Madrid, As
Carlo Ancelotti aseguró tras el 1-0 en San Mamés que “es confuso” lo que está haciendo el Madrid y explicó el problema: “Jugamos lento, sin buena circulación y los delanteros no tienen espacios”. Un diagnóstico que explica en parte la caída en la producción goleadora de un Real Madrid que acabó 2014 siendo una apisonadora en Liga con cuatro puntos sobre el Barça y 55 goles por 36 del conjunto culé. Un final feliz de año que se ha venido abajo en 2015. Si el equipo de Ancelotti firmó un promedio de 3,6 goles por encuentro en las 15 jornadas de esta Liga 2014-15 disputadas el año pasado, ahora ha descendido abruptamente a 1,6 de media (20 tantos en 12 jornadas). O lo que es lo mismo. Con el cambio de calendario el Madrid ha pasado a meter dos goles menos por choque.
Esa estadística está íntimamente relacionada con la que demuestra que el Madrid ya no bombardea la portería rival con tanta asiduidad como solía. En las 15 jornadas de 2014, los blancos dispararon a la portería rival un promedio de 15,2 veces por partido, de los que 8,7 fueron entre los tres palos (el 57 por ciento). En este 2015, lanza tres veces menos. Sus cifras han descendido a 12,6 chuts, de los que apenas 5,7 fueron a portería (el 45%). Tira menos y con menos precisión…
Sin ir más lejos, el partido de San Mamés mostró el tiovivo en el que está montado el Madrid. Si la pasada jornada el 1-1 contra el Villarreal fue el mayor asedio blanco contra una portería rival de esta Liga (24 remates) aunque se saldase con un 1-1, la visita a Bilbao fue la cruz, siendo el tercer peor partido madridista en ese apartado, con apenas 8 remates de los cuales únicamente dos fueron a la portería de Iraizoz (apenas el 25%).
Desde la magnífica racha de 22 triunfos consecutivos, el Madrid ha empezado a conocer con más asiduidad la derrota. Cuatro de los siete partidos perdidos en competición oficial han venido con el cambio de año. En 2015, el balance ha tomado un color gris con ocho triunfos, dos empates y cuatro partidos perdidos.
Cristiano y la BBC.
A nivel individual, las tres grandes estrellas del ataque blanco también viven un cortocircuito. El primero, Cristiano. El astro portugués tuvo en Bilbao un mal día, intentando apenas dos lanzamientos sin encontrar siquiera portería, algo que sólo le había pasado este campeonato liguero en otros tres partidos, todos ellos de 2015: ante el Espanyol, en Córdoba y en el Calderón. En materia goleadora, atraviesa un momento delicado. Finalizó 2014 siendo un titán, con 25 goles (12 más que Messi) lo que suponía un 1,6 por choque. Una media casi sobrenatural. En 2015, arroja resultados propios de un mortal: sólo cinco goles en diez choques (se perdió dos por la roja en el Nuevo Arcángel), una media de 0,5.
Bale, por su parte, no sabe lo que es un cantar un gol en Liga desde el 24 de enero, cuando hizo el 1-2 en Córdoba de penalti. Fue el tercero de este año. Benzema es el que está manteniendo mejor el tipo, con cinco de sus 13 dianas en 2015.
Madrid, As
Carlo Ancelotti aseguró tras el 1-0 en San Mamés que “es confuso” lo que está haciendo el Madrid y explicó el problema: “Jugamos lento, sin buena circulación y los delanteros no tienen espacios”. Un diagnóstico que explica en parte la caída en la producción goleadora de un Real Madrid que acabó 2014 siendo una apisonadora en Liga con cuatro puntos sobre el Barça y 55 goles por 36 del conjunto culé. Un final feliz de año que se ha venido abajo en 2015. Si el equipo de Ancelotti firmó un promedio de 3,6 goles por encuentro en las 15 jornadas de esta Liga 2014-15 disputadas el año pasado, ahora ha descendido abruptamente a 1,6 de media (20 tantos en 12 jornadas). O lo que es lo mismo. Con el cambio de calendario el Madrid ha pasado a meter dos goles menos por choque.
Esa estadística está íntimamente relacionada con la que demuestra que el Madrid ya no bombardea la portería rival con tanta asiduidad como solía. En las 15 jornadas de 2014, los blancos dispararon a la portería rival un promedio de 15,2 veces por partido, de los que 8,7 fueron entre los tres palos (el 57 por ciento). En este 2015, lanza tres veces menos. Sus cifras han descendido a 12,6 chuts, de los que apenas 5,7 fueron a portería (el 45%). Tira menos y con menos precisión…
Sin ir más lejos, el partido de San Mamés mostró el tiovivo en el que está montado el Madrid. Si la pasada jornada el 1-1 contra el Villarreal fue el mayor asedio blanco contra una portería rival de esta Liga (24 remates) aunque se saldase con un 1-1, la visita a Bilbao fue la cruz, siendo el tercer peor partido madridista en ese apartado, con apenas 8 remates de los cuales únicamente dos fueron a la portería de Iraizoz (apenas el 25%).
Desde la magnífica racha de 22 triunfos consecutivos, el Madrid ha empezado a conocer con más asiduidad la derrota. Cuatro de los siete partidos perdidos en competición oficial han venido con el cambio de año. En 2015, el balance ha tomado un color gris con ocho triunfos, dos empates y cuatro partidos perdidos.
Cristiano y la BBC.
A nivel individual, las tres grandes estrellas del ataque blanco también viven un cortocircuito. El primero, Cristiano. El astro portugués tuvo en Bilbao un mal día, intentando apenas dos lanzamientos sin encontrar siquiera portería, algo que sólo le había pasado este campeonato liguero en otros tres partidos, todos ellos de 2015: ante el Espanyol, en Córdoba y en el Calderón. En materia goleadora, atraviesa un momento delicado. Finalizó 2014 siendo un titán, con 25 goles (12 más que Messi) lo que suponía un 1,6 por choque. Una media casi sobrenatural. En 2015, arroja resultados propios de un mortal: sólo cinco goles en diez choques (se perdió dos por la roja en el Nuevo Arcángel), una media de 0,5.
Bale, por su parte, no sabe lo que es un cantar un gol en Liga desde el 24 de enero, cuando hizo el 1-2 en Córdoba de penalti. Fue el tercero de este año. Benzema es el que está manteniendo mejor el tipo, con cinco de sus 13 dianas en 2015.