Defensoría: falta de equipos y personal agrava situación de enfermos renales
La Paz, ANF
El Defensor del Pueblo, Rolando Villena, dio a conocer hoy, mediante un informe, que la situación de los enfermos renales del país se agrava y torna crítica por la falta de equipos, insumos médicos y personal especializado.
El informe se basa en la verificación de 19 hospitales de la Seguridad Social y del Sistema Público de Salud, donde “persisten las falencias que imposibilitan que los enfermos renales reciban una atención adecuada, de calidad y calidez”.
“Los equipos con los que cuentan las unidades de hemodiálisis son insuficientes lo que origina que la capacidad de atención, en relación al número de pacientes que atienden, sea rebasada, debiendo habilitar turnos en sábado y domingo, feriados y en las noches, lo que implica un permanente funcionamiento de las máquinas, lo cual se ve agravado ante la falta de personal de mantenimiento”, manifestó Villena.
Además denunció la falta de insumos médicos y especialistas en nefrología, así como médicos de apoyo en otras áreas como Psicología, Trabajo Social y nutrición, auxiliares en enfermería, entre otros.
“Si bien todos los hospitales señalan por norma la gratuidad total de la atención, existen casos en los que las y los pacientes deben cubrir el costo de algunos insumos médicos cómo catéters y en otros deben pagar por el mantenimiento de las máquinas”, manifestó el Defensor.
Agregó que muchos pacientes se quejan por no contar con espacios adecuados “y la falta de información respecto a una adecuada alimentación, medicamentos”, entre otros.
La Defensoría del Pueblo verificó los 19 hospitales entre octubre y noviembre del año pasado, y entre ellos están: la Caja Petrolera, Hospital Obrero y Hospital de Clínicas, en La Paz; Hospital Obrero y Hospital Viedma, en Cochabamba; Hospital Obrero, Hospital San Juan de Dios y Hospital El Bajío, en Santa Cruz; Hospital Obrero y Hospital San Juan de Dios, en Oruro; Hospital Obrero y Hospital Daniel Bracamonte, en Potosí; Hospital Obrero y Hospital San Juan de Dios, en Tarija; Hospital Jaime Mendoza y Hospital Santa Bárbara, en Sucre; Hospital Obrero y Hospital Germán Busch, en Beni; y, Hospital Roberto Galindo, en Pando.
Recomendaciones
El informe emite una serie de recomendaciones a los hospitales inspeccionados en el que incluye la dotación de ítems para médicos especialistas nefrólogos, médicos de apoyo y auxiliares de enfermería.
Villena también dijo que es urgente contar con un Plan Permanente de Capacitación Técnica y de Relaciones Humanas a todo el personal en salud que trabaja en estas unidades para mejorar la atención.
Solicitó habilitar espacios físicos para salas de aislamiento para portadores de hepatitis y VIH, salas de recuperación transitoria, salas de reuniones, vestidores, duchas para el personal, casilleros para pacientes, baños diferenciados y espacio para archivos clínicos, así como equipar las unidades de hemodiálisis para que cuenten con los insumos básicos (equipos de transfusión, tensiómetros para cada máquina, catéters, equipo portátil de hemodiálisis).
El Defensor sostuvo que la elaboración de una Guía Informativa reforzará la información verbal que generalmente dan los médicos de las unidades de hemodiálisis, además de elaborar e implementar un Plan de Contingencia que permita brindar a los pacientes una atención oportuna y de calidad, previniendo la compra de servicios o la habilitación de turnos.
Las recomendaciones fueron remitidas al Ministerio de Salud (Programa Nacional de Salud Renal), Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, Gobiernos Autónomos Departamentales y a los Directores de los hospitales verificados.
Ministra de Salud: Aumentamos 140 máquinas
La ministra de Salud, Ariana Campero, dijo en una anterior declaración, que hasta 2005 el Servicio de Salud Pública de Bolivia solo contaba con cinco máquinas para hemodiálisis, que estaban distribuidas en 14 unidades de hemodiálisis en el país, situación que cambió con 145 máquinas en la actualidad.
Por otra parte, informó que el Ministerio de Salud logró “cierta descentralización de las unidades de hemodiálisis, ya que antes sólo atendían en las capitales de departamento, en los hospitales de tercer nivel”.
El Hospital de Clínicas de La Paz tiene sólo 29 aparatos de hemodiálisis para tratar a más de 200 pacientes. Galenos de este hospital señalaron a la prensa que la cantidad de aparatos de hemodiálisis no abastece para atender satisfactoriamente a todos los enfermos renales que necesitan tratamiento, siendo que cada paciente utiliza el equipo tres veces a la semana, en sesiones de entre dos y cuatro horas.
Los enfermos renales de La Paz se declararon en emergencia en varias oportunidades debido a las deficiencias en el sistema de salud nacional.
Algunos datos
La disfunción renal afecta al 10% de la población adulta mundial. La disfunción renal es una enfermedad crónica que en una etapa inicial no presenta síntomas y puede ser tratada. Pero en etapas más avanzadas las personas pueden necesitar diálisis y hasta un trasplante de riñón.
El segundo jueves de marzo se celebra cada año el Día Mundial del Riñón. En 2014 la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertaron que una de cada diez personas tiene algún grado de enfermedad renal crónica. Recomiendan realizar pruebas de detección en pacientes con alto riesgo, como diabéticos, hipertensos, mayores de 65 años, quienes hayan tenido algún episodio cardiovascular, familiares de pacientes que ya sufren alguna dolencia renal, fumadores y personas sedentarias.
El Defensor del Pueblo, Rolando Villena, dio a conocer hoy, mediante un informe, que la situación de los enfermos renales del país se agrava y torna crítica por la falta de equipos, insumos médicos y personal especializado.
El informe se basa en la verificación de 19 hospitales de la Seguridad Social y del Sistema Público de Salud, donde “persisten las falencias que imposibilitan que los enfermos renales reciban una atención adecuada, de calidad y calidez”.
“Los equipos con los que cuentan las unidades de hemodiálisis son insuficientes lo que origina que la capacidad de atención, en relación al número de pacientes que atienden, sea rebasada, debiendo habilitar turnos en sábado y domingo, feriados y en las noches, lo que implica un permanente funcionamiento de las máquinas, lo cual se ve agravado ante la falta de personal de mantenimiento”, manifestó Villena.
Además denunció la falta de insumos médicos y especialistas en nefrología, así como médicos de apoyo en otras áreas como Psicología, Trabajo Social y nutrición, auxiliares en enfermería, entre otros.
“Si bien todos los hospitales señalan por norma la gratuidad total de la atención, existen casos en los que las y los pacientes deben cubrir el costo de algunos insumos médicos cómo catéters y en otros deben pagar por el mantenimiento de las máquinas”, manifestó el Defensor.
Agregó que muchos pacientes se quejan por no contar con espacios adecuados “y la falta de información respecto a una adecuada alimentación, medicamentos”, entre otros.
La Defensoría del Pueblo verificó los 19 hospitales entre octubre y noviembre del año pasado, y entre ellos están: la Caja Petrolera, Hospital Obrero y Hospital de Clínicas, en La Paz; Hospital Obrero y Hospital Viedma, en Cochabamba; Hospital Obrero, Hospital San Juan de Dios y Hospital El Bajío, en Santa Cruz; Hospital Obrero y Hospital San Juan de Dios, en Oruro; Hospital Obrero y Hospital Daniel Bracamonte, en Potosí; Hospital Obrero y Hospital San Juan de Dios, en Tarija; Hospital Jaime Mendoza y Hospital Santa Bárbara, en Sucre; Hospital Obrero y Hospital Germán Busch, en Beni; y, Hospital Roberto Galindo, en Pando.
Recomendaciones
El informe emite una serie de recomendaciones a los hospitales inspeccionados en el que incluye la dotación de ítems para médicos especialistas nefrólogos, médicos de apoyo y auxiliares de enfermería.
Villena también dijo que es urgente contar con un Plan Permanente de Capacitación Técnica y de Relaciones Humanas a todo el personal en salud que trabaja en estas unidades para mejorar la atención.
Solicitó habilitar espacios físicos para salas de aislamiento para portadores de hepatitis y VIH, salas de recuperación transitoria, salas de reuniones, vestidores, duchas para el personal, casilleros para pacientes, baños diferenciados y espacio para archivos clínicos, así como equipar las unidades de hemodiálisis para que cuenten con los insumos básicos (equipos de transfusión, tensiómetros para cada máquina, catéters, equipo portátil de hemodiálisis).
El Defensor sostuvo que la elaboración de una Guía Informativa reforzará la información verbal que generalmente dan los médicos de las unidades de hemodiálisis, además de elaborar e implementar un Plan de Contingencia que permita brindar a los pacientes una atención oportuna y de calidad, previniendo la compra de servicios o la habilitación de turnos.
Las recomendaciones fueron remitidas al Ministerio de Salud (Programa Nacional de Salud Renal), Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, Gobiernos Autónomos Departamentales y a los Directores de los hospitales verificados.
Ministra de Salud: Aumentamos 140 máquinas
La ministra de Salud, Ariana Campero, dijo en una anterior declaración, que hasta 2005 el Servicio de Salud Pública de Bolivia solo contaba con cinco máquinas para hemodiálisis, que estaban distribuidas en 14 unidades de hemodiálisis en el país, situación que cambió con 145 máquinas en la actualidad.
Por otra parte, informó que el Ministerio de Salud logró “cierta descentralización de las unidades de hemodiálisis, ya que antes sólo atendían en las capitales de departamento, en los hospitales de tercer nivel”.
El Hospital de Clínicas de La Paz tiene sólo 29 aparatos de hemodiálisis para tratar a más de 200 pacientes. Galenos de este hospital señalaron a la prensa que la cantidad de aparatos de hemodiálisis no abastece para atender satisfactoriamente a todos los enfermos renales que necesitan tratamiento, siendo que cada paciente utiliza el equipo tres veces a la semana, en sesiones de entre dos y cuatro horas.
Los enfermos renales de La Paz se declararon en emergencia en varias oportunidades debido a las deficiencias en el sistema de salud nacional.
Algunos datos
La disfunción renal afecta al 10% de la población adulta mundial. La disfunción renal es una enfermedad crónica que en una etapa inicial no presenta síntomas y puede ser tratada. Pero en etapas más avanzadas las personas pueden necesitar diálisis y hasta un trasplante de riñón.
El segundo jueves de marzo se celebra cada año el Día Mundial del Riñón. En 2014 la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertaron que una de cada diez personas tiene algún grado de enfermedad renal crónica. Recomiendan realizar pruebas de detección en pacientes con alto riesgo, como diabéticos, hipertensos, mayores de 65 años, quienes hayan tenido algún episodio cardiovascular, familiares de pacientes que ya sufren alguna dolencia renal, fumadores y personas sedentarias.
