Inteligencia danesa: no hubo indicio de ataque en Copenhague
Copenhague, AP
El servicio danés de Inteligencia admitió el martes que las autoridades penitenciarias habían alertado a la agencia el año pasado sobre el sospechoso de matar a dos personas y herir a cinco el fin de semana pasado en dos tiroteos en Copenhague.
El Servicio Danés de Seguridad e Inteligencia, conocido por su acrónimo en danés PET, dijo que el informe del pasado septiembre no daba motivos para creer que el hombre, de 22 años, estuviera planeando un ataque.
El PET también señaló que no tenía ningún dato de inteligencia que apuntara a un ataque inminente antes de los tiroteos en un centro cultural y una sinagoga.
Un documentalista danés y un guardia de seguridad judío murieron, y cinco agentes de policía resultaron heridos en los tiroteos antes de que el agresor fuera abatido el domingo por la mañana en una balacera con un equipo de asalto policial.
Dos fuentes de Associated Press familiarizadas con el caso identificaron al atacante como Omar Abdel Hamid El-Hussein. Una dijo que el agresor salió de prisión unas dos semanas antes de los ataques tras cumplir una sentencia por un ataque con arma blanca.
El-Hussein, nacido en Dinamarca con padres palestinos, llevaba entrando y saliendo de prisión desde 2011 tras ser condenado por delitos relacionados con armas, violencia y otras infracciones, según documentos judiciales.
Mientras esperaba un juicio por apuñalar de forma aleatoria a un pasajero de un tren, un cambio en su comportamiento el pasado verano hizo sonar las suficientes alarmas para que las autoridades penitenciarias alertaran al PET, la agencia antiterrorista danesa, indicó a la AP una fuente cercana a la investigación.
Por lo general, estas alertas suelen poner en marcha esfuerzos de anti radicalización, como asesoría en prisión. No estaba claro en un primer momento hasta qué punto estaba el tribunal al tanto del asunto. No había documentos judiciales que lo mencionaran.
El-Hussein, condenado a un tiempo de cárcel que ya había cumplido, fue liberado hace unas dos semanas, indicó la fuente, hablando bajo condición de anonimato porque la policía no ha identificado oficialmente al agresor.
Un juez ordenó el lunes 10 días de detención antes de juicio para dos personas acusadas de ayudar a el-Hussein a librarse de un arma cuando escapaba de las autoridades. Ambos hombres niegan las acusaciones, dijo Michael Juul Eriksen, abogado de defensor de uno de ellos.
La primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, dijo que no había indicios de que el atacante formara parte de una célula mayor, pero no dio detalles. La mandataria participó en una vigilia en memoria de las víctimas ante el centro cultural Kurdttoenden junto al príncipe heredero Federico, dignatarios extranjeros y unas 30.000 personas.
El centro, que celebraba un debate con un artista sueco que caricaturizó al profeta Mahoma, fue el primer objetivo del agresor el sábado. El artista, Lars Vilks, fue evacuado indemne por sus guardaespaldas. Un director de documentales de 55 años murió en el ataque y tres agentes de policía resultaron heridos.
Más tarde el sábado, según la policía, el atacante visitó un cibercafé antes de dirigirse a la sinagoga, donde abrió fuego el domingo el por la mañana sobre el guardia de seguridad judío y dos agentes de policía.
Dinamarca ha frustrado una serie de atentados terroristas desde la publicación en 2005 de 12 caricaturas de Mahoma en el periódico Jyllands-Posten que provocó disturbios en países musulmanes y peticiones de venganza.
El servicio danés de Inteligencia admitió el martes que las autoridades penitenciarias habían alertado a la agencia el año pasado sobre el sospechoso de matar a dos personas y herir a cinco el fin de semana pasado en dos tiroteos en Copenhague.
El Servicio Danés de Seguridad e Inteligencia, conocido por su acrónimo en danés PET, dijo que el informe del pasado septiembre no daba motivos para creer que el hombre, de 22 años, estuviera planeando un ataque.
El PET también señaló que no tenía ningún dato de inteligencia que apuntara a un ataque inminente antes de los tiroteos en un centro cultural y una sinagoga.
Un documentalista danés y un guardia de seguridad judío murieron, y cinco agentes de policía resultaron heridos en los tiroteos antes de que el agresor fuera abatido el domingo por la mañana en una balacera con un equipo de asalto policial.
Dos fuentes de Associated Press familiarizadas con el caso identificaron al atacante como Omar Abdel Hamid El-Hussein. Una dijo que el agresor salió de prisión unas dos semanas antes de los ataques tras cumplir una sentencia por un ataque con arma blanca.
El-Hussein, nacido en Dinamarca con padres palestinos, llevaba entrando y saliendo de prisión desde 2011 tras ser condenado por delitos relacionados con armas, violencia y otras infracciones, según documentos judiciales.
Mientras esperaba un juicio por apuñalar de forma aleatoria a un pasajero de un tren, un cambio en su comportamiento el pasado verano hizo sonar las suficientes alarmas para que las autoridades penitenciarias alertaran al PET, la agencia antiterrorista danesa, indicó a la AP una fuente cercana a la investigación.
Por lo general, estas alertas suelen poner en marcha esfuerzos de anti radicalización, como asesoría en prisión. No estaba claro en un primer momento hasta qué punto estaba el tribunal al tanto del asunto. No había documentos judiciales que lo mencionaran.
El-Hussein, condenado a un tiempo de cárcel que ya había cumplido, fue liberado hace unas dos semanas, indicó la fuente, hablando bajo condición de anonimato porque la policía no ha identificado oficialmente al agresor.
Un juez ordenó el lunes 10 días de detención antes de juicio para dos personas acusadas de ayudar a el-Hussein a librarse de un arma cuando escapaba de las autoridades. Ambos hombres niegan las acusaciones, dijo Michael Juul Eriksen, abogado de defensor de uno de ellos.
La primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt, dijo que no había indicios de que el atacante formara parte de una célula mayor, pero no dio detalles. La mandataria participó en una vigilia en memoria de las víctimas ante el centro cultural Kurdttoenden junto al príncipe heredero Federico, dignatarios extranjeros y unas 30.000 personas.
El centro, que celebraba un debate con un artista sueco que caricaturizó al profeta Mahoma, fue el primer objetivo del agresor el sábado. El artista, Lars Vilks, fue evacuado indemne por sus guardaespaldas. Un director de documentales de 55 años murió en el ataque y tres agentes de policía resultaron heridos.
Más tarde el sábado, según la policía, el atacante visitó un cibercafé antes de dirigirse a la sinagoga, donde abrió fuego el domingo el por la mañana sobre el guardia de seguridad judío y dos agentes de policía.
Dinamarca ha frustrado una serie de atentados terroristas desde la publicación en 2005 de 12 caricaturas de Mahoma en el periódico Jyllands-Posten que provocó disturbios en países musulmanes y peticiones de venganza.