Copa Libertadores: Osvaldo debutó con un gol para el triunfo de Boca ante Wanderers
Daniel Osvaldo tuvo el jueves un positivo debut con un gol, el uruguayo Nicolás Lodeiro fue la gran figura de la noche del jueves, y Boca Juniors logró un celebrado triunfo por 2 a 1 sobre Montevideo Wanderers, en una Bombonera repleta por la Copa Libertadores de América.
El único gol de diferencia es engañoso, ya que Boca controló el juego prácticamente de punta a punta, jugó la pelota con claridad y dispuso, en particular durante el primer tiempo, de oportunidades como para imponer diferencias más amplias.
Lo que debe objetarse a sí mismo el equipo de Rodolfo Arruabarrena es no haber definido el partido por otras cifras ante un rival que atacó muy poco, fue pasivo en defensa y en contadas oportunidades se acercó al área local.
Boca comenzó demasiado acelerado, pero en la medida en que encontró más pausa y precisión, sobre todo a través de Lodeiro, se hizo dueño absoluto del juego ante un Wanderers que lució muy parado y perdía la pelota con facilidad. A los 13 minutos, después de una combinación entre Lodeiro y Palacios, el uruguayo cabeceó desviado; a los 19, Marco Torsiglieri cabeceó un córner de Lodeiro, también desviado; y a los 21, Lodeiro remató desde fuera del área desviado.
Poco después, Osvaldo tuvo una gran volea tras centro de Andrés Chávez desde la izquierda, que salió recto al cuerpo del arquero visitante, y a los 26, tras un tiro libre de Lodeiro, el propio Osvaldo cabeceó desviado.
El gol de Boca parecía cuestión de tiempo y llegó a los 33, mediante un tiro libre pasado de Lodeiro desde la derecha, por detrás de todos apareció Juan Cruz Komar, quien suplió a Guillermo Burdisso lesionado, para meter el cabezazo y establecer el 1-0. Wanderers sacó del medio y aprovechó un quedo imperdonable de Boca para lograr la igualdad.
Diego Riolfo corrió muchos metros por la izquierda y tras una buena pared ingresó al área, para terminar su escalada con remate bajo de zurda que se le escurrió a Agustín Orion entre sus piernas, en el primer remate al arco del conjunto visitante.
El empate confundió a Boca, que perdió la pelota, pero a los 42, Nicolás Colazo desde la izquierda lanzó un centro al medio del área, Osvaldo cabeceó muy bien hacia abajo y a la derecha para poner el 2-1, que trajo tranquilidad.
Al final del primer tiempo, se contabilizaban cinco cabezazos de los jugadores de Boca en el área rival, dos de ellos transformados en gol.
En el segundo tiempo, Boca bajó más el ritmo, le faltó intensidad en ataque y por eso el marcador no se modificó, pese a que no encontraba salidas ni fórmulas para pasar a la ofensiva.
De todas maneras, el equipo argentino acumuló una buena cantidad de aproximaciones, como un remate débil de Osvaldo, que contuvo el arquero Leonardo Burián, a los 5; un remate desviado de Palacios, a los 27, y otro de Pablo Pérez, a los 39.
El único mediano riesgo para el arco de Boca tuvo lugar a los 35, con una corrida del ingresado Sebastián Gularte por la izquierda, que no pudo conectar el remate a tiempo, porque lo trabó Leandro Marin y finalmente controló Orion.
Fue una noche de fiesta en La Bombonera, con una buena respuesta del equipo, que consiguió su séptima victoria consecutiva, contando los amistosos, y va definiendo una fisonomía interesante, aunque hoy le haya faltado gol.