Boca arrancó el torneo con una victoria sobre Olimpo
Boca Juniors le ganó por 3-1 a Olimpo en la Bombonera un partido igualado hasta más allá de la mitad del segundo tiempo, que había desatado ya la impaciencia del público local.
Dos aciertos del joven Sebastián Palacios, ingresado durante el segundo tiempo, sellaron un marcador que había abierto Fernando Gago, mediante un penal erróneamente sancionado, y que había quedado empatado sobre el final de la etapa inicial a través de una conversión de Jonatan Blanco para el equipo bahiense.
Olimpo planteó un partido de fuerte presión en la mitad de la cancha, considerable cantidad de infracciones para cortar y logró meter a Boca en un desarrollo desprolijo, sin que la pelota circulara con fluidez.
El equipo de Rodolfo Arruabarrena encontró algunas posibilidades sobre los costados, con Juan Manuel Martínez y Federico Carrizo, pero las participaciones de ambos extremos eran esporádicas.
Sobre los 7, una aparición de Martínez por derecha, después de un tiro libre de Federico Carrizo, terminó con remate desviado, y cinco minutos más tarde, el propio Martínez armó una jugada individual que finalizó con disparo débil, por lo que salvó Ezequiel Parnisari.
Boca no llegaba al área con continuidad, no hallaba el último pase, pero a los 27 minutos se le simplificó la tarde cuando, a continuación de un tiro libre en forma de centro que ejecutó Carrizo, Fernando Echenique sancióno penal en un forcejeo de Iván Furios con Daniel Díaz. Gago ejecutó con precisión, a la derecha de Nereo Champagne y puso el 1-0.
Recién cuando estuvo en desventaja, Olimpo se decidió a juntar más gente en ataque y empezaron a notarse algunas debilidades en el fondo del local. Boca recién volvió a llegar a los 39, con un desborde de Carrizo sobre izquierda y centro atrás que cabeceó imperfectamente y desviado Jonathan Calleri.
A los 42, los bahienses llegaron al empate: córner desde la izquierda por Joel Acosta, gran anticipo de Blanco, de cabeza, al palo derecho para vencer por completo la resistencia de Agustín Orion, que nada pudo hacer.
El cuadro azul y oro ganó intensidad en el comienzo del segundo tiempo, cuando creció notoriamente la figura de Gago y mejoró asimismo el rendimiento de Pablo Pérez, pero seguía faltándole resolución y no tenía peso suficiente en Calleri.
De todos modos, sumó aproximaciones, aunque también Olimpo tuvo una oportunidad inmejorable a los 17, después de un córner que ejecutó Acosta y desvió Adrián Martínez, pero el remate final de Juan Cobo, a dos metros del arco, fue salvado en gran forma por Orion.
Boca buscó soluciones con las entradas de Palacios, primero, y del uruguayo Nicolás Lodeiro, más tarde. Los hinchas exigían con sus gritos y las definiciones no llegaban, hasta que a los 27 Champagne se equivocó en un saque de arco, robó Calleri y Palacios, en dos toques, con rapidez y justeza, consiguió el gol por el que ya se desesperaba.
El final se hizo más sencillo porque Olimpo tuvo que salir, continuó siendo débil por los flancos que cubrían Parnisari y Juan Quiroga y entonces quedó expuesto a los contraataques.
A los 40, la enésima corrida de Carrizo por la izquierda tuvo esta vez el final adecuado, con toque paralelo hacia el sector opuesto, por donde llegó Palacios para cerrar su partido soñado y darle a Boca un triunfo que no disimuló sus problemas de elaboración.