Ben Mee evita el triunfo del Chelsea en el último suspiro
Londres, As
El Chelsea empató 1-1 este sábado en Stamford Bridge con el modesto Burnley, en un partido en el que los "blues" acusaron en exceso la expulsión, mediada la segunda mitad, del centrocampista serbio Nemanja Matic.
El entrenador del Chelsea, el portugués José Mourinho, pudo volver a contar con el delantero hispano-brasileño Diego Costa después de haber cumplido los tres partidos con los que lo sancionó la Federación inglesa (FA) por su pisotón a Emre Can en la Copa de la Liga.
Sin embargo, al internacional español, máximo goleador de la "Premier League" esta temporada, no le acompañó la suerte, en un choque en el que fue duramente marcado por los defensas del Burnley, que jugaron al límite.
Al cuarto de hora de juego, los "blues" se pusieron por delante en el electrónico gracias a un tanto del defensa serbio Branislav Ivanovic, quien anotó su tercer gol en los últimos cuatro partidos.
El lateral empujó a la red desde dentro del área pequeña un gran pase desde la derecha del belga Eden Hazard, que consiguió deshacerse de tres rivales para ponerle el balón al serbio.
La primera mitad terminó con una ocasión de Diego Costa, que no pudo llegar a un balón tras una buena jugada en el costado izquierdo del colombiano Juan Guillermo Cuadrado, quien disputó su primer partido de titular con los londinenses.
Antes, Mourinho protestó airadamente dos decisiones del árbitro, que decidió no señalar penalti una mano dentro del área de un defensa del Burnley ni tampoco una posible falta tras una caída de Costa en un lance con un rival.
El punto de inflexión del partido llegó a falta de 20 minutos para la conclusión, con la expulsión del serbio Nemanja Matic, que reaccionó con agresividad a una salvaje entrada de Barnes.
La tarjeta roja directa le hace perderse al centrocampista la final de la Copa de la Liga (Capital One Cup) el próximo domingo ante el Tottenham Hotspur en el estadio de Wembley.
Mourinho reaccionó rápido a la expulsión del serbio y dio entrada al brasileño Ramires en lugar de su compatriota Oscar, reforzando el centro del campo.
Sin embargo, pocos minutos después, en el 80, Ben Mee subía el sorpresivo empate al marcador con un tanto de cabeza tras un saque de esquina.
El propio Ramires falló en el marcaje, Thibaut Courtois se quedó a media salida y Mee remató sin marca a la red, poniendo las tablas en el electrónico ante la incredulidad de Stamford Bridge.
Pese al empate, el Chelsea se mantiene en lo más alto de la tabla, con 60 puntos después de 26 jornadas disputadas, pero un triunfo este sábado del Manchester City, que juega frente al Newcastle (17:30 GMT) en casa, podría ver reducida la diferencia de los de Mourinho a cinco puntos.
El Chelsea empató 1-1 este sábado en Stamford Bridge con el modesto Burnley, en un partido en el que los "blues" acusaron en exceso la expulsión, mediada la segunda mitad, del centrocampista serbio Nemanja Matic.
El entrenador del Chelsea, el portugués José Mourinho, pudo volver a contar con el delantero hispano-brasileño Diego Costa después de haber cumplido los tres partidos con los que lo sancionó la Federación inglesa (FA) por su pisotón a Emre Can en la Copa de la Liga.
Sin embargo, al internacional español, máximo goleador de la "Premier League" esta temporada, no le acompañó la suerte, en un choque en el que fue duramente marcado por los defensas del Burnley, que jugaron al límite.
Al cuarto de hora de juego, los "blues" se pusieron por delante en el electrónico gracias a un tanto del defensa serbio Branislav Ivanovic, quien anotó su tercer gol en los últimos cuatro partidos.
El lateral empujó a la red desde dentro del área pequeña un gran pase desde la derecha del belga Eden Hazard, que consiguió deshacerse de tres rivales para ponerle el balón al serbio.
La primera mitad terminó con una ocasión de Diego Costa, que no pudo llegar a un balón tras una buena jugada en el costado izquierdo del colombiano Juan Guillermo Cuadrado, quien disputó su primer partido de titular con los londinenses.
Antes, Mourinho protestó airadamente dos decisiones del árbitro, que decidió no señalar penalti una mano dentro del área de un defensa del Burnley ni tampoco una posible falta tras una caída de Costa en un lance con un rival.
El punto de inflexión del partido llegó a falta de 20 minutos para la conclusión, con la expulsión del serbio Nemanja Matic, que reaccionó con agresividad a una salvaje entrada de Barnes.
La tarjeta roja directa le hace perderse al centrocampista la final de la Copa de la Liga (Capital One Cup) el próximo domingo ante el Tottenham Hotspur en el estadio de Wembley.
Mourinho reaccionó rápido a la expulsión del serbio y dio entrada al brasileño Ramires en lugar de su compatriota Oscar, reforzando el centro del campo.
Sin embargo, pocos minutos después, en el 80, Ben Mee subía el sorpresivo empate al marcador con un tanto de cabeza tras un saque de esquina.
El propio Ramires falló en el marcaje, Thibaut Courtois se quedó a media salida y Mee remató sin marca a la red, poniendo las tablas en el electrónico ante la incredulidad de Stamford Bridge.
Pese al empate, el Chelsea se mantiene en lo más alto de la tabla, con 60 puntos después de 26 jornadas disputadas, pero un triunfo este sábado del Manchester City, que juega frente al Newcastle (17:30 GMT) en casa, podría ver reducida la diferencia de los de Mourinho a cinco puntos.