Carmelo podría no jugar más en lo que queda de temporada

Nueva York, As
La desastrosa temporada que están completando los Knicks (5-30 de balance, su peor inicio de siempre) hace que en Manhattan ya piensen en la próxima campaña, la que será la segunda completa de la era Phil Jackson. Para poder volver a pelear por el anillo a partir el próximo mes de noviembre, en la franquicia quieren contar con su mejor jugador, Carmelo Anthony, al 100%. Algo que no se puede decir en este momento: el alero está jugando con dolor en su rodilla izquierda desde el segundo partido del actual curso. Es más, en ciertos entornos de la organización knick ya se habla de que para que estas molestias desaparezcan, 'Melo' deberá someterse a una cirugía menor.


Por todo ello, y tras causar baja en la última derrota (y van 10 seguidas) de los neoyorquinos ante los Pistons, Derek Fisher ya deja caer la posibilidad de que el número 3 del draft 2003 no vuelva a jugar en lo que resta de temporada. "Por las conversaciones de las que he formado parte, creo que todo el mundo es lo suficientemente inteligente para darse cuenta de que puede haber llegado el momento en el que tomar esta decisión", reconoce el técnico novato. No obstante, sabe que hay que tener en cuenta los pensamientos del propio afectado: "Aún no podemos forzarle".

¿Y qué piensa 'Melo' sobre todo esto? Siempre ha manifestado que espera seguir jugando mientras su dañada rodilla se lo permita. "Nuestro cuerpo médico y técnico mantienen conversaciones con él sobre cómo se encuentra, cuáles son sus sensaciones. A partir de ahí, se van tomando poco a poco las decisiones", explica Fisher. Vista la situación, no es descartable que Anthony siga intentando tirar de sus Knicks durante las próximas semanas, pero lo cierto es que, más temprano que tarde, acabará por decir un adiós prematuro al curso 2014-15.

Renovó este verano. Carmelo Anthony sigue siendo uno de los mejores jugadores de toda la NBA, por eso, no le faltaron las novias cuando decidió saltar al mercado el verano pasado. Sin embargo, el 'Maestro Zen' consiguió (a razón de 124 millones de dólares para los próximo cinco años) que siguiera en el Madison Square Garden, la que ha sido su casa desde que abandonara Denver en febrero de 2011.

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