Abby Wambach: “Es triste que el Mundial femenino de fútbol se dispute sobre césped artificial”
Suiza, EFELa estadounidense Abby Wambach, que compite con la brasileña Marta y con la alemana Nadine Kessler por el Balón de Oro, mostró hoy su tristeza porque el Mundial de Canadá se dispute sobre césped artificial y lamentó que el “diálogo con la Fifa no haya sido mejor”.
“La Fifa tomó una decisión que nos hizo daño”, aseguró la delantera del Western New York Flash estadounidense en una rueda de prensa celebrada en Zúrich poco antes de la ceremonia de entrega del Balón de Oro. “Será mi último Mundial y es triste que se dispute sobre césped artificial. La Fifa tomó su decisión y la mantiene”, agregó.
“Después de cada partido, sé que tendré el cuerpo más dolorido”
La delantera estadounidense, ganadora del premio en el año 2012, reveló haber mantenido en la ciudad suiza una reunión con representantes del órgano rector del fútbol mundial, a los que trasladó su decepción porque la competición de selecciones más importante se dispute sobre césped artificial.
“Las jugadoras queremos ser tratadas de una forma igualitaria”, comentó, “pero la Fifa no cambiará su decisión”.
A pocos meses del comienzo del Mundial, que se disputará en Canadá entre el 6 de junio y el 5 de julio, Wambach agradeció el diálogo y apuntó: “Quizás si hubiéramos tenido más tiempo, quizás podríamos haber llegado a un entendimiento, aunque a veces las cosas no están en tu mano”.
La veterana jugadora, una voces más críticas con la decisión de la Fifa y de la organización del Mundial, invitó a las futbolistas a asumir que la cita más importante del año 2015 se disputará sobre césped artificial aunque denunció: “Después de cada partido, sé que tendré el cuerpo más dolorido”.
Abby Wambach reclamó asimismo que las federaciones y el organismo presidido por Joseph Blatter “trabajen de la mano” para que las niñas que sueñan con jugar al fútbol puedan llegar a ser deportistas profesionales.
“Es cierto que hemos alcanzado grandes logros”, coincidieron Marta y Nadine Kessler, “pero todavía queda mucho por hacer”.
