Una sola persona importó 236 vehículos subfacturados
Página Siete/ La Paz
Una investigación de la Cámara Automotor Boliviana reveló que en los últimos meses una sola persona logró importar más de 236 vehículos que, se presume, ingresaron a territorio nacional con un valor subfacturado.
Los motorizados fueron nacionalizados con el pago de tributos por 12,7 millones de bolivianos, aunque de acuerdo con las tablas de la Aduana Nacional, deberían haberse legalizado con la cancelación de 16,2 millones de bolivianos. Esto implica que el Estado dejó de percibir 3,4 millones bolivianos en impuestos o un 27,2% menos.
Sin embargo, si los automóviles hubieran sido adquiridos de un distribuidor o dealer oficial tendrían que haber tributado 18,6 millones de bolivianos. En este caso las pérdidas reales para el Estado suben a 5,9 millones de bolivianos, porque se nacionalizaron con un 46,4% por debajo de su valor real.
El miércoles Página Siete informó que hay importadores que se dan a la tarea de internar motorizados con documentos fraudulentos (factura comercial), para evitar el pago de aranceles e impuestos o recurren al registro de un valor o precio inferior.
Este medio consultó a la Aduana Nacional sobre los controles que se ejercen y en la entidad se limitaron a señalar que conocen la denuncia, que es investigada.
El presidente del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), Érik Ariñez, sostuvo que esa entidad no puede controlar la subfacturación en autos importados.
"Ese tipo de facturación se debe preguntar a la Aduana, porque el momento de la importación se hace una subvaluación y eso lo controla la Aduana”, aclaró el jefe del SIN.
Sin embargo, los importadores legalmente establecidos cuestionan este hecho y creen que el SIN debe controlar.
Al respecto, Ariñez remarcó que este tema no está dentro de sus competencias. "No, Impuestos controla la facturación en territorio nacional, la facturación que se hubiera dado dentro del país. Aduana es la que controla la importación”, explicó.
Procedimiento
Las personas que importan estos autos los adquieren en el exterior, pero no al fabricante, porque éste sólo vende a los distribuidores autorizados de cada país.
Compran los motorizados de comerciantes que emiten facturas subvaloradas, es decir, con precios inferiores al real, con el objetivo de que se pueda pagar menos aranceles de importación durante el proceso de nacionalización en la Aduana Nacional.
Habitualmente, los vehículos son importados supuestamente a pedido de algún cliente, que incluso al pagar por el motorizado no recibe una factura de venta. Este modus operandi es empleado para introducir cientos de motorizados al país.
La Aduana es la encargada de registrar el cobro de aranceles de importación, pero por normas vigentes lo que hace es presumir la buena fe de quien declara los tributos.
Posteriormente Impuestos Nacionales debe cobrar tributos al comprador final.
Norma tributaria
Omisión de pago El Código Tributario, en su artículo 165, señala que "El que por acción u omisión no pague o pague menos la deuda tributaria, no efectúe las retenciones a que está obligado u obtenga indebidamente beneficios y valores fiscales, será sancionado con el 100% del monto calculado por la deuda tributaria”.
Tributos
La base imponible sobre la cual se debe liquidar el IVA y la alícuota porcentual del Impuesto al Consumo Específico está constituida por el Gravamen Aduanero y otras erogaciones impositivas.
Fiscalización La Aduana Nacional y el Servicio de Impuestos Nacionales son las instancias encargadas de controlar tatno el pago de aranceles como de tributos en el país.
Una investigación de la Cámara Automotor Boliviana reveló que en los últimos meses una sola persona logró importar más de 236 vehículos que, se presume, ingresaron a territorio nacional con un valor subfacturado.
Los motorizados fueron nacionalizados con el pago de tributos por 12,7 millones de bolivianos, aunque de acuerdo con las tablas de la Aduana Nacional, deberían haberse legalizado con la cancelación de 16,2 millones de bolivianos. Esto implica que el Estado dejó de percibir 3,4 millones bolivianos en impuestos o un 27,2% menos.
Sin embargo, si los automóviles hubieran sido adquiridos de un distribuidor o dealer oficial tendrían que haber tributado 18,6 millones de bolivianos. En este caso las pérdidas reales para el Estado suben a 5,9 millones de bolivianos, porque se nacionalizaron con un 46,4% por debajo de su valor real.
El miércoles Página Siete informó que hay importadores que se dan a la tarea de internar motorizados con documentos fraudulentos (factura comercial), para evitar el pago de aranceles e impuestos o recurren al registro de un valor o precio inferior.
Este medio consultó a la Aduana Nacional sobre los controles que se ejercen y en la entidad se limitaron a señalar que conocen la denuncia, que es investigada.
El presidente del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), Érik Ariñez, sostuvo que esa entidad no puede controlar la subfacturación en autos importados.
"Ese tipo de facturación se debe preguntar a la Aduana, porque el momento de la importación se hace una subvaluación y eso lo controla la Aduana”, aclaró el jefe del SIN.
Sin embargo, los importadores legalmente establecidos cuestionan este hecho y creen que el SIN debe controlar.
Al respecto, Ariñez remarcó que este tema no está dentro de sus competencias. "No, Impuestos controla la facturación en territorio nacional, la facturación que se hubiera dado dentro del país. Aduana es la que controla la importación”, explicó.
Procedimiento
Las personas que importan estos autos los adquieren en el exterior, pero no al fabricante, porque éste sólo vende a los distribuidores autorizados de cada país.
Compran los motorizados de comerciantes que emiten facturas subvaloradas, es decir, con precios inferiores al real, con el objetivo de que se pueda pagar menos aranceles de importación durante el proceso de nacionalización en la Aduana Nacional.
Habitualmente, los vehículos son importados supuestamente a pedido de algún cliente, que incluso al pagar por el motorizado no recibe una factura de venta. Este modus operandi es empleado para introducir cientos de motorizados al país.
La Aduana es la encargada de registrar el cobro de aranceles de importación, pero por normas vigentes lo que hace es presumir la buena fe de quien declara los tributos.
Posteriormente Impuestos Nacionales debe cobrar tributos al comprador final.
Norma tributaria
Omisión de pago El Código Tributario, en su artículo 165, señala que "El que por acción u omisión no pague o pague menos la deuda tributaria, no efectúe las retenciones a que está obligado u obtenga indebidamente beneficios y valores fiscales, será sancionado con el 100% del monto calculado por la deuda tributaria”.
Tributos
La base imponible sobre la cual se debe liquidar el IVA y la alícuota porcentual del Impuesto al Consumo Específico está constituida por el Gravamen Aduanero y otras erogaciones impositivas.
Fiscalización La Aduana Nacional y el Servicio de Impuestos Nacionales son las instancias encargadas de controlar tatno el pago de aranceles como de tributos en el país.