Intentan salvar a rinocerontes cerca de extinción
Ol Pejeta, AP
La tarea no iba a ser fácil: Llevar por aire cuatro rinocerontes de un zoológico de la República Checa a África, llevarles a las sabanas del Monte Kenia y esperar que el ambiente natural les ayude a producir un crío, para evitar la extinción.
Y el experimento virtualmente ha fracasado.
Los cuidadores de tres rinocerontes blancos en Kenia — la mitad de los tres rinocerontes de esa especie que quedan en el mundo — han admitido públicamente que el macho y las dos hembras no van a reproducir naturalmente.
La esperanza que queda, no obstante, es la ciencia. Van a comenzar esfuerzos para mantener viva la especie por medio de la fertilización in vitro, y posiblemente trabajar con el material genético de los rinocerontes en el naciente campo llamado de-extinción.
"Sabíamos desde el inicio que las probabilidades de que esto diese resultados eran mínimas", dijo Richard Vigne, director ejecutivo de Ol Pejeta Conservancy, donde han vivido los rinocerontes desde diciembre del 2009.
La reserva dijo el miércoles que técnicas artificiales de reproducción "pudieran ser la última esperanza de supervivencia para el animal más amenazado en el mundo".
Algunos expertos en animales dijeron al inicio del proyecto que no era suficiente y llegaba demasiado tarde y que el dinero habría sido empleado mejor en otros proyectos de conservación. Pero el grueso de los 100.000 dólares provino de un donante— Alastair Lucas, entonces vicepresidente de Goldman Sachs en Australia — que quería ver el proyecto realizado.
Vigne dijo que el proyecto no fue en vano.
"Ellos fueron regresados a África de un zoológico, y han prosperado en ese ambiente. De cierta forma fue un éxito", dio. "El hecho de que no hayan apareado claramente es una gran decepción, pero existen nuevas tecnologías para rescatar especies extintas".
Uno de los dos machos trasladados a Ol Pejeta murió por causas desconocidas este año. Veterinarios que examinaron a los tres rinocerontes el mes pasado determinaron que el macho tenía un volumen de semen muy bajo y que las dos hembras no pueden quedar embarazadas o sostener el embarazo.
La tarea no iba a ser fácil: Llevar por aire cuatro rinocerontes de un zoológico de la República Checa a África, llevarles a las sabanas del Monte Kenia y esperar que el ambiente natural les ayude a producir un crío, para evitar la extinción.
Y el experimento virtualmente ha fracasado.
Los cuidadores de tres rinocerontes blancos en Kenia — la mitad de los tres rinocerontes de esa especie que quedan en el mundo — han admitido públicamente que el macho y las dos hembras no van a reproducir naturalmente.
La esperanza que queda, no obstante, es la ciencia. Van a comenzar esfuerzos para mantener viva la especie por medio de la fertilización in vitro, y posiblemente trabajar con el material genético de los rinocerontes en el naciente campo llamado de-extinción.
"Sabíamos desde el inicio que las probabilidades de que esto diese resultados eran mínimas", dijo Richard Vigne, director ejecutivo de Ol Pejeta Conservancy, donde han vivido los rinocerontes desde diciembre del 2009.
La reserva dijo el miércoles que técnicas artificiales de reproducción "pudieran ser la última esperanza de supervivencia para el animal más amenazado en el mundo".
Algunos expertos en animales dijeron al inicio del proyecto que no era suficiente y llegaba demasiado tarde y que el dinero habría sido empleado mejor en otros proyectos de conservación. Pero el grueso de los 100.000 dólares provino de un donante— Alastair Lucas, entonces vicepresidente de Goldman Sachs en Australia — que quería ver el proyecto realizado.
Vigne dijo que el proyecto no fue en vano.
"Ellos fueron regresados a África de un zoológico, y han prosperado en ese ambiente. De cierta forma fue un éxito", dio. "El hecho de que no hayan apareado claramente es una gran decepción, pero existen nuevas tecnologías para rescatar especies extintas".
Uno de los dos machos trasladados a Ol Pejeta murió por causas desconocidas este año. Veterinarios que examinaron a los tres rinocerontes el mes pasado determinaron que el macho tenía un volumen de semen muy bajo y que las dos hembras no pueden quedar embarazadas o sostener el embarazo.