Filipinas: Rehén suizo escapa entre bombardeo
Manila, AP
Un rehén suizo logró escapar dramáticamente el sábado de los extremistas de Abu Sayaf después de asestar una cuchillada a un comandante rebelde en medio de un bombardeo militar, dijeron funcionarios. Su fuga puso fin a más de dos años de cautiverio en el sur de Filipinas.
Lorenzo Vinciguerra, de 49 años, escapó mientras las fuerzas del gobierno lanzaban un ataque cerca del lugar en la selva donde estaba cautivo en el pueblo de Patikul en una zona montañosa de la provincia de Sulu. Asió un cuchillo de gran tamaño, acuchilló a un comandante de Abu Sayaf y salió corriendo, pero en su fuga fue herido de bala por otro miliciano, dijeron funcionarios de seguridad.
Patrulleros del ejército filipino lo encontraron y lo llevaron a un lugar seguro.
"Fue herido pero está bien y convalece en un hospital", dijo el comandante regional, teniente general Rustico Guerrero, por teléfono.
En Berna, el gobierno suizo manifestó alivio al saber que Vinciguerra había recuperado su libertad, aunque lamentó que su compañero holandés permaneciera cautivo.
Mientras yacía en su lecho en un hospital militar de campaña, con la cabeza vendada, Vinciguerra se manifestó feliz por poder pasar la Navidad con su familia, pero muy preocupado por su compañero, Ewold Horn, todavía cautivo en manos de los rebeldes.
"Le pedí que me acompañara pero no quiso", dijo de Horn y agregó que el holandés padecía algunas dolencias.
Vinciguerra instó a los rebeldes a rendirse e iniciar una nueva vida. "Mi mensaje final a todos: depongan las armas y salgan de la selva", dijo a un reportero. "Hay una vida agradable aquí".
El suizo fue capturado por los rebeldes en la cercana provincia de Tawi Tawi en febrero de 2012 cuando observaba aves con Horn e Iván Sarenas, un filipino que los guiaba.
Sarenas, que escapó poco después de ser capturado al saltar de un bote en el que los llevaban a Sulu, dijo que estaba feliz por la fuga de Vinciguerra pero a la vez preocupado de que estuviera herido y de que Horn siguiera cautivo.
"No es la mejor noticia, pero es buna noticia después de tanto tiempo", dijo a The Associated Press. "Ahora quiero ir a abrazar a Lorenzo".
Un rehén suizo logró escapar dramáticamente el sábado de los extremistas de Abu Sayaf después de asestar una cuchillada a un comandante rebelde en medio de un bombardeo militar, dijeron funcionarios. Su fuga puso fin a más de dos años de cautiverio en el sur de Filipinas.
Lorenzo Vinciguerra, de 49 años, escapó mientras las fuerzas del gobierno lanzaban un ataque cerca del lugar en la selva donde estaba cautivo en el pueblo de Patikul en una zona montañosa de la provincia de Sulu. Asió un cuchillo de gran tamaño, acuchilló a un comandante de Abu Sayaf y salió corriendo, pero en su fuga fue herido de bala por otro miliciano, dijeron funcionarios de seguridad.
Patrulleros del ejército filipino lo encontraron y lo llevaron a un lugar seguro.
"Fue herido pero está bien y convalece en un hospital", dijo el comandante regional, teniente general Rustico Guerrero, por teléfono.
En Berna, el gobierno suizo manifestó alivio al saber que Vinciguerra había recuperado su libertad, aunque lamentó que su compañero holandés permaneciera cautivo.
Mientras yacía en su lecho en un hospital militar de campaña, con la cabeza vendada, Vinciguerra se manifestó feliz por poder pasar la Navidad con su familia, pero muy preocupado por su compañero, Ewold Horn, todavía cautivo en manos de los rebeldes.
"Le pedí que me acompañara pero no quiso", dijo de Horn y agregó que el holandés padecía algunas dolencias.
Vinciguerra instó a los rebeldes a rendirse e iniciar una nueva vida. "Mi mensaje final a todos: depongan las armas y salgan de la selva", dijo a un reportero. "Hay una vida agradable aquí".
El suizo fue capturado por los rebeldes en la cercana provincia de Tawi Tawi en febrero de 2012 cuando observaba aves con Horn e Iván Sarenas, un filipino que los guiaba.
Sarenas, que escapó poco después de ser capturado al saltar de un bote en el que los llevaban a Sulu, dijo que estaba feliz por la fuga de Vinciguerra pero a la vez preocupado de que estuviera herido y de que Horn siguiera cautivo.
"No es la mejor noticia, pero es buna noticia después de tanto tiempo", dijo a The Associated Press. "Ahora quiero ir a abrazar a Lorenzo".