En YPFB, 20 contratos están relacionados con comunicación
De los 2.462 procesos de contratación que proyectó Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) para este año , alrededor de 20 están relacionados con servicios que adjudicaba la Unidad de Comunicación. En esta área, se denunció la existencia de una red de corrupción que favoreció con seis contratos a cinco empresas.
El Programa Anual de Contrataciones Corporativo, divulgado en la página internet de YPFB, establece la adquisición de unos 15 servicios de cátering para las distintas subsidiarias de la petrolera estatal.
También contempla la contratación directa de nueve distintos medios de comunicación radiales y televisivos en el país para la promoción de la empresa.
Asimismo, establece cuatro contratos de vallas publicitarias que debían ser instaladas en distintas regiones del país, en aeropuertos y otros lugares.
Los más de dos millares de contratos de YPFB están divididos en adquisiciones menores, que corresponden a compras cuyo monto es menor a los 100 mil dólares; licitaciones, superiores a los 100 mil dólares, y otras modalidades que están "definidas por el organismo financiador o la normativa de compras a realizar por YPFB Casa Matriz”.
La petrolera denunció que se firmaron seis contratos para beneficiar a determinadas empresas, que vendieron servicios de instalación de vallas publicitarias y cátering, entre otros, e inició un proceso penal contra dos funcionarios y otros cuatro empresarios que se habrían beneficiado con esos convenios.
El presidente de YPFB, Carlos Villegas, dijo que se pagó 563.157 dólares.
Un contrato fue adjudicado por 2.724 dólares a Bell Comunicaciones y otro a Structura por 26.436 dólares. En ambos casos la propietaria es Ana Camacho, hermana de Selva Camacho, excolaboradora del titular de Yacimientos, Carlos Villegas.
Tres contratos fueron para Omnimedia por un valor total de 167.729 dólares. Su representante, Guido Alarcón, fue enviado al penal de San Pedro.
El contrato de mayor monto, 484 mil dólares, se adjudicó a Bravo Comunicaciones. Su representante, Yalile Bravo, fue trasladada al penal femenino de Miraflores en La Paz; se sospecha que su novio es Luis Alejandro Bell, hijo de Selva Camacho. Estos dos últimos están acusados de conformar la red de corrupción y tienen detención preventiva.
Villegas también acusó a la empresa Colibrí, cuya representante, Éricka Rojas, está detenida. Ella proporcionó al Ministerio Público una lista de otras personas involucradas en los hechos irregulares.
El fiscal que atiende el caso, Leopoldo Ramos, dijo que citará a otras personas. "Se ampliará la investigación en todo lo que se requiera, probablemente con unas 10 personas más, entre particulares y funcionarios de YPFB, que participaron en este hecho”, dijo.
Selva Camacho denunció a Villegas de acoso sexual e intento de violación. El titular de YPFB rechazó esas sindicaciones.
La investigación
Inicio El presidente de YPFB, Carlos Villegas, informó que el accionar de la empresa Colibrí y el contrato de YPFB con la empresa Structura, de Ana Camacho, fueron la punta del ovillo para descubrir la red de corrupción que formó el denominado "Clan Camacho”, a fin de adjudicarse de manera irregular contratos de la petrolera estatal.
Proceso La Unidad de Transparencia de YPFB prosigue con las investigaciones de todos los procesos de contratación relacionados con las empresas Omnimedia, Structura, Colibrí, Bravo y Bell Comunicaciones. Si se detectan irregularidades, serán remitidas al Ministerio Público y al Ministerio de Transparencia, para continuar con las investigaciones hasta establecer responsabilidades.
