El Cruz Azul rival del Madrid el martes
DAVID PALOMO, El Mundo
Maracaná, 14 de enero de 2000, el Corinthians se hacía con el primer trofeo del recientemente inaugurado Mundialito de clubes de la FIFA tras vencer al Vasco de Gama. Sin embargo, la noticia se había producido unas horas antes, en el partido que enfrentaba al Real Madrid ante el Nexaca por el tercer y cuarto puesto. Los blancos habían caído contra todo pronóstico ante los 'Rayos'. La culpa la había tenido un jugador ecuatoriano, a ratos torpón, conocido bajo el sobrenombre del 'Tin' Delgado. A la postre, el encargado de empatar el partido ganándole en una carrera a Karanka y después marcando el último penalti con Bizzarri bajo palos. ¿Resultado? Los mexicanos tocaron el cielo y el conjunto entonces entrenado por Vicente del Bosque se volvió a la capital de España con cara de pocos amigos.
Como en aquel 2000, el Cruz Azul espera repetir la hazaña el próximo martes ante el Real Madrid de Ancelotti después de conseguir la victoria ante el Sídney Wanderers (3-1) con dos goles de Torrado y otro de Pavone, aquel delantero que pasó con más pena que gloria por el Betis. Ése es el sueño de todo un país, que, desde aquella primera edición, ha visto desfilar -además del Nexaca- a otros cuatro equipos mexicanos (América, Pachuca, Atlante y Rayados) sin que ninguno haya podido acceder a la final. Acabar con esa maldición es lo que tratará de hacer el conjunto de Luis Fernando Tena, que se clasificó para el Mundialito de clubes tras proclamarse campeón de la Liga de Campeones de la CONCACAF.
Un lujo medirse al Madrid
El Cruz Azul sólo tiene dos argumentos para creer que es posible obrar el milagro. El primero de ellos, que su objetivo ya lo han cumplido. Para la entidad es todo un logro estar en semifinales. Nadie viajó a Marruecos pensando en volver a México con la copa debajo del brazo. Con eso asumido, exhiben como segunda arma el desconocimiento que tiene el fútbol europeo de ellos. Una ignorancia que esperan les sirva para dar la sorpresa.
Desde esa base parte Tena para alentar a los suyos. Así lo ha hecho en las cuatro etapas en las que ha dirigido al Cruz Azul y en su experiencia como técnico de la selección mexicana, con la que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres en 2012. En aquella final, el 'Tri' también partía en inferioridad ante un combinado brasileño cargado de estrellas: Neymar, Hulk, Thiago Silva... Sin embargo, dos goles de Peralta en Wembley -el primero de ellos el más rápido de la competición, a los 28 segundos- les permitieron arruinar a las casas de apuestas.
Torrado y Formica
En el campo, la prolongación de Tena la ofrece Gerardo Torrado, mito, leyenda y autor de dos goles contra el Wanderers. A sus 35 años, el centrocampista ha estado presente en tres Mundiales (Corea y Japón 2002, Alemania 2006 y Sudáfrica 2010), ha disputado 146 partidos con el 'Tri' y cerca de 300 con el Cruz Azul. Contra el Real Madrid, estará en el once. Suya será la responsabilidad de llevar la manija en la medular. Si él funciona, lo hará su equipo. Así lo reconoce 'el Borrego', que llegó a jugar en España (Tenerife, Poli Ejido, Sevilla y Racing) y que, pese a su avanzada edad, sigue siendo optimista. "¿Ganar al Madrid? ¿Y por qué no?", reconoce a la FIFA.
De ese optimismo bebe también un joven que sigue con el cartel de futura promesa, Mauro Formica, el jugador al que el 'Burrito' Ortega definió como el 'Kaká de Rosario', que tras pasar por el Blackburn Rovers y el Palermo, decidió formar parte del proyecto del Cruz Azul. Y que viene siendo la alternativa de Christian Giménez y el complemento perfecto para un Pavone.
En la otra semifinal se enfrentarán San Lorenzo de Almagro y Auckland City, que logró el pase tras conseguir la victoria ante el Sétif de Argelia (1-0) con un gol de Irving.
Maracaná, 14 de enero de 2000, el Corinthians se hacía con el primer trofeo del recientemente inaugurado Mundialito de clubes de la FIFA tras vencer al Vasco de Gama. Sin embargo, la noticia se había producido unas horas antes, en el partido que enfrentaba al Real Madrid ante el Nexaca por el tercer y cuarto puesto. Los blancos habían caído contra todo pronóstico ante los 'Rayos'. La culpa la había tenido un jugador ecuatoriano, a ratos torpón, conocido bajo el sobrenombre del 'Tin' Delgado. A la postre, el encargado de empatar el partido ganándole en una carrera a Karanka y después marcando el último penalti con Bizzarri bajo palos. ¿Resultado? Los mexicanos tocaron el cielo y el conjunto entonces entrenado por Vicente del Bosque se volvió a la capital de España con cara de pocos amigos.
Como en aquel 2000, el Cruz Azul espera repetir la hazaña el próximo martes ante el Real Madrid de Ancelotti después de conseguir la victoria ante el Sídney Wanderers (3-1) con dos goles de Torrado y otro de Pavone, aquel delantero que pasó con más pena que gloria por el Betis. Ése es el sueño de todo un país, que, desde aquella primera edición, ha visto desfilar -además del Nexaca- a otros cuatro equipos mexicanos (América, Pachuca, Atlante y Rayados) sin que ninguno haya podido acceder a la final. Acabar con esa maldición es lo que tratará de hacer el conjunto de Luis Fernando Tena, que se clasificó para el Mundialito de clubes tras proclamarse campeón de la Liga de Campeones de la CONCACAF.
Un lujo medirse al Madrid
El Cruz Azul sólo tiene dos argumentos para creer que es posible obrar el milagro. El primero de ellos, que su objetivo ya lo han cumplido. Para la entidad es todo un logro estar en semifinales. Nadie viajó a Marruecos pensando en volver a México con la copa debajo del brazo. Con eso asumido, exhiben como segunda arma el desconocimiento que tiene el fútbol europeo de ellos. Una ignorancia que esperan les sirva para dar la sorpresa.
Desde esa base parte Tena para alentar a los suyos. Así lo ha hecho en las cuatro etapas en las que ha dirigido al Cruz Azul y en su experiencia como técnico de la selección mexicana, con la que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres en 2012. En aquella final, el 'Tri' también partía en inferioridad ante un combinado brasileño cargado de estrellas: Neymar, Hulk, Thiago Silva... Sin embargo, dos goles de Peralta en Wembley -el primero de ellos el más rápido de la competición, a los 28 segundos- les permitieron arruinar a las casas de apuestas.
Torrado y Formica
En el campo, la prolongación de Tena la ofrece Gerardo Torrado, mito, leyenda y autor de dos goles contra el Wanderers. A sus 35 años, el centrocampista ha estado presente en tres Mundiales (Corea y Japón 2002, Alemania 2006 y Sudáfrica 2010), ha disputado 146 partidos con el 'Tri' y cerca de 300 con el Cruz Azul. Contra el Real Madrid, estará en el once. Suya será la responsabilidad de llevar la manija en la medular. Si él funciona, lo hará su equipo. Así lo reconoce 'el Borrego', que llegó a jugar en España (Tenerife, Poli Ejido, Sevilla y Racing) y que, pese a su avanzada edad, sigue siendo optimista. "¿Ganar al Madrid? ¿Y por qué no?", reconoce a la FIFA.
De ese optimismo bebe también un joven que sigue con el cartel de futura promesa, Mauro Formica, el jugador al que el 'Burrito' Ortega definió como el 'Kaká de Rosario', que tras pasar por el Blackburn Rovers y el Palermo, decidió formar parte del proyecto del Cruz Azul. Y que viene siendo la alternativa de Christian Giménez y el complemento perfecto para un Pavone.
En la otra semifinal se enfrentarán San Lorenzo de Almagro y Auckland City, que logró el pase tras conseguir la victoria ante el Sétif de Argelia (1-0) con un gol de Irving.