Críticas al optimismo de Rajoy incluso desde el propio Partido Popular
El Gobierno se reafirma: “España ha cambiado el ciclo”
Carlos E. Cué
Madrid, El País
La decisión de Mariano Rajoy de dar por finalizada la crisis económica —“La crisis es historia”, aseveró el jueves— ha generado intensas críticas desde la oposición, los sindicatos, algunas organizaciones empresariales e incluso en su propio partido (PP), donde el presidente del Congreso, Jesús Posada, llegó a decir que es “un poco exagerado” decir que la crisis ha pasado a la historia.
Sin embargo, el Gobierno se reafirma. Aunque no lo hizo con las mismas palabras, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría respaldó ayer al presidente y aseguró en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que “la economía española está cambiando de ciclo, el signo ha cambiado totalmente, hay que seguir trabajando, pero de dónde veníamos y dónde estamos...” “Es muy diferente destruir empleo a ritmo de medio millón que crearlo a ese ritmo, es exactamente lo contrario”, aseguró la vicepresidenta después de desgranar varios datos económicos para avalar su optimismo.
Este discurso recibió críticas generalizadas. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, consideró “muy temerarias” las declaraciones del presidente. Méndez aseguró que “esa afirmación” de Rajoy “no se puede mantener”, “porque lo que hay que hacer es un análisis del paisaje después de la batalla”. Hay datos positivos, admitió el líder de UGT, pero la recuperación “no es verdad, ni muchísimo menos”, ya que la situación de las familias “es muy difícil”. “En España hay casi nueve millones de personas, 3,5 millones de familias, que tienen dificultades para pagar el agua a fin de mes”, recordó.
El escepticismo con Rajoy no llegó solo de la oposición. El jueves pasado, el presidente del Congreso, Jesús Posada, aseguró: “Estamos mucho mejor que hace un año, vamos saliendo de la crisis económica, pero decir que la crisis económica ya es historia quizá sea un poco exagerado”. Ayer el presidente del PP de la provincia de Valencia, Alfonso Rus, pidió un mayor apoyo del Gobierno a la Comunitat, y aseguró que en un momento “complicado” como el actual hay que escuchar a la gente. “No podemos decir que ya no hay crisis porque el que está en el paro no se lo cree”, remató en una clara referencia a Rajoy.
Mientras, Alberto Garzón, hombre fuerte de IU, ironizó: “Si quien lo dice [que la crisis es historia] es Ana Botín, es verdad”. La crisis, explicó, es historia para “las élites” y los especuladores, pero no para la “mayoría de la sociedad española”, y la “realidad dramática” que tiene que sufrir. Como Méndez, apeló a datos que indican que hay miles de personas que no pueden calentar su hogar a causa de la pobreza energética.
El jueves, el líder del PSOE, Pedro Sánchez, recomendó al presidente “poca autocomplacencia” porque España es el país “donde más ha crecido la desigualdad del mundo”, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarollo Económicos (OCDE).
También los empresarios matizan. El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, afirmó ayer que es demasiado temprano para afirmar que la crisis es historia. “La historia la hacemos cada día. En estos momentos es historia la crisis de 2013 y la de 2014, pero es demasiado reciente para decir que ya ha pasado a la historia, sino que decimos que está pasando a la historia”, aseguró Valls en Barcelona.
Madrid, El País
La decisión de Mariano Rajoy de dar por finalizada la crisis económica —“La crisis es historia”, aseveró el jueves— ha generado intensas críticas desde la oposición, los sindicatos, algunas organizaciones empresariales e incluso en su propio partido (PP), donde el presidente del Congreso, Jesús Posada, llegó a decir que es “un poco exagerado” decir que la crisis ha pasado a la historia.
Sin embargo, el Gobierno se reafirma. Aunque no lo hizo con las mismas palabras, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría respaldó ayer al presidente y aseguró en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que “la economía española está cambiando de ciclo, el signo ha cambiado totalmente, hay que seguir trabajando, pero de dónde veníamos y dónde estamos...” “Es muy diferente destruir empleo a ritmo de medio millón que crearlo a ese ritmo, es exactamente lo contrario”, aseguró la vicepresidenta después de desgranar varios datos económicos para avalar su optimismo.
Este discurso recibió críticas generalizadas. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, consideró “muy temerarias” las declaraciones del presidente. Méndez aseguró que “esa afirmación” de Rajoy “no se puede mantener”, “porque lo que hay que hacer es un análisis del paisaje después de la batalla”. Hay datos positivos, admitió el líder de UGT, pero la recuperación “no es verdad, ni muchísimo menos”, ya que la situación de las familias “es muy difícil”. “En España hay casi nueve millones de personas, 3,5 millones de familias, que tienen dificultades para pagar el agua a fin de mes”, recordó.
El escepticismo con Rajoy no llegó solo de la oposición. El jueves pasado, el presidente del Congreso, Jesús Posada, aseguró: “Estamos mucho mejor que hace un año, vamos saliendo de la crisis económica, pero decir que la crisis económica ya es historia quizá sea un poco exagerado”. Ayer el presidente del PP de la provincia de Valencia, Alfonso Rus, pidió un mayor apoyo del Gobierno a la Comunitat, y aseguró que en un momento “complicado” como el actual hay que escuchar a la gente. “No podemos decir que ya no hay crisis porque el que está en el paro no se lo cree”, remató en una clara referencia a Rajoy.
Mientras, Alberto Garzón, hombre fuerte de IU, ironizó: “Si quien lo dice [que la crisis es historia] es Ana Botín, es verdad”. La crisis, explicó, es historia para “las élites” y los especuladores, pero no para la “mayoría de la sociedad española”, y la “realidad dramática” que tiene que sufrir. Como Méndez, apeló a datos que indican que hay miles de personas que no pueden calentar su hogar a causa de la pobreza energética.
El jueves, el líder del PSOE, Pedro Sánchez, recomendó al presidente “poca autocomplacencia” porque España es el país “donde más ha crecido la desigualdad del mundo”, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarollo Económicos (OCDE).
También los empresarios matizan. El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, afirmó ayer que es demasiado temprano para afirmar que la crisis es historia. “La historia la hacemos cada día. En estos momentos es historia la crisis de 2013 y la de 2014, pero es demasiado reciente para decir que ya ha pasado a la historia, sino que decimos que está pasando a la historia”, aseguró Valls en Barcelona.
