Uruguayos eligirán presidente con claro favorito y amenaza climática
Montevideo, EFE
Los uruguayos concurren este domingo a las urnas para elegir en segunda vuelta a su futuro presidente, con el exmandatario Tabaré Vázquez como claro favorito y en medio de una alerta meteorológica por la posibilidad de abundantes lluvias, fuertes vientos y granizadas.
Un total de 2,6 millones de personas están habilitadas para votar en elecciones con sufragio obligatorio y donde las condiciones meteorológicas puede generar dificultades, especialmente en el interior del país, admitieron fuentes de la Corte Electoral.
En las pasadas elecciones y debido a fuertes lluvias fue preciso recurrir a helicópteros de la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU) para trasladar urnas tras el desborde de numerosos ríos y arroyos.
La alerta naranja emitida por el Instituto Uruguayo de Meteorología abarca la mayor parte del país.
Se prevé la ocurrencia de “tormentas fuertes” y “lluvias copiosas” de entre 50 y 100 milímetros en seis horas y “puntualmente superiores” a los 100 milímetros en 24 horas.
Además, se esperan rachas de viento de entre 75 y 120 kilómetros por hora, precipitación de granizo y actividad eléctrica.
La alerta por “riesgos importantes” incluye a quince de los diecinueve departamentos de Uruguay: Canelones, Colonia, Durazno, Flores, Florida, Lavalleja, Maldonado, Montevideo, Río Negro, Rocha, Paysandú, Salto, San José, Soriano y Tacuarembó.
Vázquez, socialista, oncólogo, de 74 años y que ya fue presidente de Uruguay entre 2005 y 2010, reúne entre el 52-53 % de la preferencia del electorado según las encuestas, frente al aspirante de la oposición, Luis Lacalle Pou, del Partido Nacional o Blanco y que aglutina entre el 35-38 %.
El candidato de la gobernante coalición de izquierda Frente Amplio tiene al expresidente de la empresa estatal de combustibles Ancap, Raúl Sendic, como compañero de fórmula y aspirante a la vicepresidencia.
A Lacalle Pou le acompaña el excandidato presidencial y actual senador Jorge Larrañaga.
Esta será la tercera vez que la presidencia de Uruguay se dirima en una segunda vuelta, desde que está vigente la reforma constitucional de 1996.
Lacalle Pou, abogado de 41 años, expresidente de la Cámara de Diputados e hijo de Luis Alberto Lacalle Herrera que fue presidente de Uruguay entre 1990 y 1995, hace unos meses llegó a entusiasmar a sus seguidores y a preocupar al oficialismo por su creciente popularidad, pero en la recta final de la campaña se desinfló.
Su derrota quedó prácticamente sellada el mismo día de la elección de primera vuelta, el 26 de octubre, cuando el Partido Nacional solo alcanzó el 30,9 % de los votos, quedando lejos de la posibilidad de bloquear el camino de la izquierda hacia un tercer gobierno consecutivo.
El panorama de cara a los comicios del domingo se presenta “bastante claro” y el triunfo de Vázquez es “seguro”, dijo recientemente a Efe el sociólogo Ignacio Zuasnábar, director de Opinión Pública de la consultora Equipos Mori.
La “única incógnita” que se desvelará en las urnas es “cual será el porcentaje” de apoyo que tendrá Vázquez y, en relación al mismo, “cómo quedará parado” Lacalle Pou de cara al futuro Gobierno y como líder de la oposición.
La fórmula que obtenga la mayoría de los votos será la ganadora sin necesidad de superar ningún porcentaje mínimo de apoyo popular.
Daniel Chasquetti, profesor del Instituto de Ciencia Política de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República, dijo a Efe que “no hay dudas” de que Vázquez será el ganador del balotaje y por una “diferencia importante” de votos.
Los buenos números económicos, que se mantienen desde que la izquierda accedió por primera vez al poder en 2005 de la mano de Vázquez, son su principal carta de presentación frente a la ciudadanía y clave para la amplia victoria en la primera vuelta con mayoría en la Cámara de Diputados (50 en 99).
El expresidente apuntó en la última parte de la campaña a destacar las “certezas” que puede dar como futuro mandatario frente a la “inexperiencia” del candidato de la oposición tres décadas más joven.
El ganador del balotaje recibirá el mando el 1 de marzo de 2015 de manos del presidente José Mujica.
Los uruguayos concurren este domingo a las urnas para elegir en segunda vuelta a su futuro presidente, con el exmandatario Tabaré Vázquez como claro favorito y en medio de una alerta meteorológica por la posibilidad de abundantes lluvias, fuertes vientos y granizadas.
Un total de 2,6 millones de personas están habilitadas para votar en elecciones con sufragio obligatorio y donde las condiciones meteorológicas puede generar dificultades, especialmente en el interior del país, admitieron fuentes de la Corte Electoral.
En las pasadas elecciones y debido a fuertes lluvias fue preciso recurrir a helicópteros de la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU) para trasladar urnas tras el desborde de numerosos ríos y arroyos.
La alerta naranja emitida por el Instituto Uruguayo de Meteorología abarca la mayor parte del país.
Se prevé la ocurrencia de “tormentas fuertes” y “lluvias copiosas” de entre 50 y 100 milímetros en seis horas y “puntualmente superiores” a los 100 milímetros en 24 horas.
Además, se esperan rachas de viento de entre 75 y 120 kilómetros por hora, precipitación de granizo y actividad eléctrica.
La alerta por “riesgos importantes” incluye a quince de los diecinueve departamentos de Uruguay: Canelones, Colonia, Durazno, Flores, Florida, Lavalleja, Maldonado, Montevideo, Río Negro, Rocha, Paysandú, Salto, San José, Soriano y Tacuarembó.
Vázquez, socialista, oncólogo, de 74 años y que ya fue presidente de Uruguay entre 2005 y 2010, reúne entre el 52-53 % de la preferencia del electorado según las encuestas, frente al aspirante de la oposición, Luis Lacalle Pou, del Partido Nacional o Blanco y que aglutina entre el 35-38 %.
El candidato de la gobernante coalición de izquierda Frente Amplio tiene al expresidente de la empresa estatal de combustibles Ancap, Raúl Sendic, como compañero de fórmula y aspirante a la vicepresidencia.
A Lacalle Pou le acompaña el excandidato presidencial y actual senador Jorge Larrañaga.
Esta será la tercera vez que la presidencia de Uruguay se dirima en una segunda vuelta, desde que está vigente la reforma constitucional de 1996.
Lacalle Pou, abogado de 41 años, expresidente de la Cámara de Diputados e hijo de Luis Alberto Lacalle Herrera que fue presidente de Uruguay entre 1990 y 1995, hace unos meses llegó a entusiasmar a sus seguidores y a preocupar al oficialismo por su creciente popularidad, pero en la recta final de la campaña se desinfló.
Su derrota quedó prácticamente sellada el mismo día de la elección de primera vuelta, el 26 de octubre, cuando el Partido Nacional solo alcanzó el 30,9 % de los votos, quedando lejos de la posibilidad de bloquear el camino de la izquierda hacia un tercer gobierno consecutivo.
El panorama de cara a los comicios del domingo se presenta “bastante claro” y el triunfo de Vázquez es “seguro”, dijo recientemente a Efe el sociólogo Ignacio Zuasnábar, director de Opinión Pública de la consultora Equipos Mori.
La “única incógnita” que se desvelará en las urnas es “cual será el porcentaje” de apoyo que tendrá Vázquez y, en relación al mismo, “cómo quedará parado” Lacalle Pou de cara al futuro Gobierno y como líder de la oposición.
La fórmula que obtenga la mayoría de los votos será la ganadora sin necesidad de superar ningún porcentaje mínimo de apoyo popular.
Daniel Chasquetti, profesor del Instituto de Ciencia Política de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República, dijo a Efe que “no hay dudas” de que Vázquez será el ganador del balotaje y por una “diferencia importante” de votos.
Los buenos números económicos, que se mantienen desde que la izquierda accedió por primera vez al poder en 2005 de la mano de Vázquez, son su principal carta de presentación frente a la ciudadanía y clave para la amplia victoria en la primera vuelta con mayoría en la Cámara de Diputados (50 en 99).
El expresidente apuntó en la última parte de la campaña a destacar las “certezas” que puede dar como futuro mandatario frente a la “inexperiencia” del candidato de la oposición tres décadas más joven.
El ganador del balotaje recibirá el mando el 1 de marzo de 2015 de manos del presidente José Mujica.