San Lorenzo no da buena imagen en el Trofeo Berlusconi
Milan, As
Los poco más de 5.000 espectadores y la grada vacía del mítico San Siro, el trofeo Luigi Berlusconi sin brillo ni atractivo para los tifosi, son el fiel reflejo del estado actual del Milán. Hasta Ancelotti rehusó la invitación de acudir pues Galliani le tenía organizada una cena con Inzhagi y, con buen criterio, no quiso alimentar los rumores (o deseos) que le colocan de nuevo en el banquillo rossonero. El ganador de la Libertadores, San Lorenzo, posible rival del Madrid en la final del Mundial de Clubes, fue el elegido por el Milán para este trofeo que Berlusconi creó en 1991 en honor a su padre y que salvo en las ediciones de 1992, 93 y 94 (Inter, Madrid y Bayern) siempre disputaron Milán y Juve.
El técnico Bauza viajó a Europa con todo a excepción del mediapunta y capitán Romagnoli, recién operado del codo (se espera que llegue a Marruecos). Exhibió en San Siro su última propuesta, el 4-3-3 con el que venía jugando los últimos tres partidos y con el que consiguió ganar 2-0 a Boca, lo que debería servir como punto de inflexión al bajón experimentado (también hubo importantes salidas) tras alzar la Libertadores. En ese nuevo trivote de cara al Mundial de Clubes, junto a Ortigoza y Mercier (mejor pareja de mediocentros dos años en Argentina), debería unirse Kalinski. O Barrientos, brillante ayer, esta una opción mucho más ofensiva. El Milán fue superior y Leo Franco se lució. Torrés entró en el 63’ pero el ex del Atlético le paró dos ocasiones claras. Diego López no fue convocado.
Milán: Abbiati; Bonera, Rami, Mexes, Armero; Van Ginkel, Essien, Saponara; Niang, Pazzini, El Shaarawy. También jugaron: Agazzi, Torres, Albertazzi, Mastour y Bonaventura.
San Lorenzo: Leo Franco; Prosperi, Fontanini, Yepes, Mas; Ortigoza, Kalinski, Barrientos; Villalba, Matos, Blandi. También jugaron: Mercier, Buffarini, Verón, Kannemann, Cauteruccio, Cetto.
Árbitro: Irratti. Amonestó a Niang (42’), Kasnnemmani (68’), Yepes (70’)
Espectadores: 5.153
Goles: 1-0 (min. 30) Pazzini; 2-0 (min.84) Bonaventura.
Los poco más de 5.000 espectadores y la grada vacía del mítico San Siro, el trofeo Luigi Berlusconi sin brillo ni atractivo para los tifosi, son el fiel reflejo del estado actual del Milán. Hasta Ancelotti rehusó la invitación de acudir pues Galliani le tenía organizada una cena con Inzhagi y, con buen criterio, no quiso alimentar los rumores (o deseos) que le colocan de nuevo en el banquillo rossonero. El ganador de la Libertadores, San Lorenzo, posible rival del Madrid en la final del Mundial de Clubes, fue el elegido por el Milán para este trofeo que Berlusconi creó en 1991 en honor a su padre y que salvo en las ediciones de 1992, 93 y 94 (Inter, Madrid y Bayern) siempre disputaron Milán y Juve.
El técnico Bauza viajó a Europa con todo a excepción del mediapunta y capitán Romagnoli, recién operado del codo (se espera que llegue a Marruecos). Exhibió en San Siro su última propuesta, el 4-3-3 con el que venía jugando los últimos tres partidos y con el que consiguió ganar 2-0 a Boca, lo que debería servir como punto de inflexión al bajón experimentado (también hubo importantes salidas) tras alzar la Libertadores. En ese nuevo trivote de cara al Mundial de Clubes, junto a Ortigoza y Mercier (mejor pareja de mediocentros dos años en Argentina), debería unirse Kalinski. O Barrientos, brillante ayer, esta una opción mucho más ofensiva. El Milán fue superior y Leo Franco se lució. Torrés entró en el 63’ pero el ex del Atlético le paró dos ocasiones claras. Diego López no fue convocado.
Milán: Abbiati; Bonera, Rami, Mexes, Armero; Van Ginkel, Essien, Saponara; Niang, Pazzini, El Shaarawy. También jugaron: Agazzi, Torres, Albertazzi, Mastour y Bonaventura.
San Lorenzo: Leo Franco; Prosperi, Fontanini, Yepes, Mas; Ortigoza, Kalinski, Barrientos; Villalba, Matos, Blandi. También jugaron: Mercier, Buffarini, Verón, Kannemann, Cauteruccio, Cetto.
Árbitro: Irratti. Amonestó a Niang (42’), Kasnnemmani (68’), Yepes (70’)
Espectadores: 5.153
Goles: 1-0 (min. 30) Pazzini; 2-0 (min.84) Bonaventura.