Piden expulsión de un concejal español del PP por disfrazarse de Hitler en Halloween

París, dpa
El Centro Simon Wiesenthal divulgó hoy una carta dirigida a la secretaria general del Partido Popular (PP) español, María Dolores Cospedal, en la que le pide que expulse a un concejal de su agrupación que eligió un disfraz de Adolf Hitler para una reciente fiesta de Halloween.
Shimon Samuel, director de Relaciones Internacionales de la organización judía internacional de defensa de los derechos humanos, condena la elección del disfraz por parte del concejal de Agricultura de la ciudad valenciana de Gandía, Toni Rodríguez, en el este de España.


Rodríguez acudió a una fiesta privada de Halloween organizada por una amiga del alcalde de la localidad, Arturo Torró, caracterizado como el dictador nazi responsable del Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial.

“Aparentemente, Rodríguez negó en un primer momento haber escogido tal disfraz, luego dijo que no se trataba de Hitler, para finalmente sostener que por haberse tratado de una fiesta privada, podía disfrazarse como quisiera”, señala Samuels en la carta enviada a la dirección del partido conservador que dirige también el gobierno central en Madrid.

Samuels denuncia asimismo un saludo hitleriano que hizo ante un mausoleo en memoria de los soldados franquistas caídos durante la Guerra Civil “en agosto de 2013 un colega de Rodríguez, Daniel Terrades”, también funcionario del PP en Gandía, y pide por tanto una “condena pública” de su comportamiento y que ambos sean expulsados de la agrupación.

Aunque destaca el respeto que el Centro Wiesenthal guarda por el PP y la buena colaboración en el pasado “en relación con la presencia de criminales de guerra nazis en España”, Samuels subraya que si no se sanciona el comportamiento de los funcionarios ello “podría dañar gravemente al Partido Popular al impregnarle la mancha del nazismo”.

El miércoles, el ayuntamiento de Gandía pidió disculpas tras la polémica. “En ningún momento la intención del edil ha sido ensalzar la figura del dictador nazi Hitler, sino todo lo contrario; al tratarse de una fiesta de disfraces, el objetivo fue ridiculizar al personaje histórico y tratarlo como un personaje de terror”, destacó en un comunicado.

El alcalde, Arturo Torró, defendió a su compañero como un demócrata y manifestó en el comunicado su “sincero respeto a las víctimas de esa doctrina política e ideológica de carácter racista y antisemita”.

El propio Torró también causó sorpresa con su disfraz, pero en su caso no por el contenido político sino de estilo: fue de “vampiro rosa” con plumas y sombrero de copa.

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